volver al índide de los levantmientos revolucionarios en Medio Oriente y Egipto al día

La revolución libia ha comenzado mientras la política del imperialismo de disparar a matar se le vuelve en contra

La fiebre egipcia, tunecina y libia se está expandiendo a Marruecos, la Palestina ocupada, Argelia, Sudan, Djibouti, Arabia Saudita, Yemen, Bahrein, los Emiratos Árabes, Irak, Irán, China, Bolivia y Wisconsin (EE.UU.), por ahora.

Los acontecimientos revolucionarios de Libia al día :

Declaración del SCI de la FLTI: "¡Por el triunfo de la insurrección obrera y de las masas explotadas!" del 24/02/2011


Desde el 11 de febrero cuando las masas revolucionarias de Egipto forzaron al imperialismo a entregar a su marioneta Mubarak, el imperialismo mundial se embarcó en una campaña para contener las repercusiones negativas de su  derrota. El mensaje claro que el proletariado mundial le ha mandado al imperialismo es que ya no está dispuesto a tolerar regímenes represivos que lo mantengan desocupado, indigente y muriéndose de hambre. Para comer, tener trabajo, una casa, las masas deben derrocar a los dictadores capitalistas -este es uno de los mensajes que el proletariado está esbozando cada vez más. Este es el mensaje que los imperialismos mundiales combinados intentan ahogar en sangre.

Antiguos rivales -Francia, Reino Unido, Alemania, Japón- se han unido temporalmente contra la revolución de masas. Incluso mientras hacen esto se apuñalan unos a otros por la espalda para extender sus zonas de influencia unos sobre los otros, mientras compiten para vivir de forma parasitaria sobre los hombros de las masas revolucionarias para contener la revolución socialista.

Por eso desde el 11 de febrero el imperialismo mundial ha apresurado su campaña para contener la revolución con un mayor uso de la fuerza, para ahogarla en sangre así como intentan en Libia desde hace 5 días, con el uso de armamento pesado de ametralladoras, bombardeos aéreos, y el uso de mercenarios. Hay una división de tareas – el imperialismo mata a las masas allí donde tiene gran influencia: en Bahrein, donde esta la V flota, el imperialismo de EEUU dio orden de disparar a los protestantes con gran armamento; en Argelia 5000 protestantes fueron rodeados por 35000 policías, que los cazaron y los molieron a palos; en Libia, usaron mercenarios Franceses e Italianos junto con las tropas de Ghadaffi para dispararle a manifestantes desarmados con gran armamento, ametralladoras y bombardeos desde aviones.

Pero como en Tunes y Egipto, cuando los imperialistas mandan al ejercito contra las masas, el ejercito se divide por la base (o una parte considerable del mismo) para ir del lado de la revolución. Dos coroneles de la Fuerza Aérea se negaron a bombardear  a los protestantes desarmados; la policía fue aplastada y en algunos sitios la policía se unió a las masas contra soldados que les estaban disparando. Divisiones enteras del ejército se han pasado del lado de las masas revolucionarias. Benghazi la segunda ciudad de Libia donde hay mas reservas de petróleo, fue tomada por las masas revolucionarias. La batalla por Trípoli ha empezado y las masas están intentando marchar a la base principal de Ghadaffi. Los trabajadores de una de las principales refinerías están en huelga.

El programa inmediato para la revolución libia
El primer punto debe ser el armamento de las masas, la puesta en pie de comités obreros y milicia armada para defender las masas contra el estado asesino y el ataque del imperialismo. Es necesario que el armamento de las masas esté acompañado del desarme de la policía y la disolución del ejército. Los soldados de base deben elegir sus propios comités y mandar delegados a los comités obreros.
 

La huelga de los obreros petroleros debe extenderse a una huelga general política con un solo objetivo: derrocar al régimen de Ghadaffi- todo el poder a las masas revolucionarias basadas en consejos con delegados obreros, que sean instantáneamente revocables y donde ningún delegado o dirigente gane más que un trabajador promedio. Las compañías petroleras imperialistas, bancos y otras compañías capitalistas son el centro desde donde la contrarrevolución se organiza para matar a las masas. Todos los bienes imperialistas deben ser expropiados (Incluso todas las compañías que hayan sido privatizadas), sin indemnización a los capitalistas y puestas bajo control obrero; nacionalización inmediata de todas las tierras, expropiación de toda la agricultura capitalista, sin indemnización a los capitalistas puestas bajo control obrero.

El “socialismo africano” libio es capitalismo africano y no tiene nada que ver con el socialismo.
Cuando Ghadaffi lanzó su golpe en 1969 solo nacionalizó parcialmente la industria petrolera; y bajo la máscara del “socialismo”, el imperialismo todavía controlo los pozos petroleros. No están permitidos sindicatos ni huelgas- un verdadero paraíso capitalista. Esta es la recompensa a Ghadaffi por abrir Libia a la mayor privatización desde 2003 como muchos otros países capitalistas- Muchos otros pozos petroleros están 100% controlados por el imperialismo, (Shell y Exxon Movil, etc). Como recompensa a las privatizaciones le garantizaron una posición de dos años en el Consejo de Seguridad de la ONU (2008-09) Ghadaffi fue también el director de la Unión Africana. Actualmente, este carnicero, lacayo del imperialismo, después de dispararle a cientos de protestantes desarmados en los últimos cinco días, todavía es un miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Esto demuestra dos cosas: primero, la ONU es una organización de carniceros y asesinos en la que no se puede confiar para que aseguren los derechos de las masas; segundo que el rol de la ONU es asegurar el completo control del  imperialismo sobre cada centímetro de la tierra y como instrumento de violencia contra las masas del mundo. Libia juega el rol de recibir esclavos y es el centro del tráfico humano de trabajo barato y esclavo del resto de África y de Asia, para suministrarlos a Italia y otros centros imperialistas. La ONU hizo oídos sordos a esto, y todavía apoya a Ghadaffi y a su consejo gubernamental ilegítimo como campeones de los “derechos humanos”.
Lo que se necesita no es izar la vieja bandera Libia como de manera oportunista quiere hacer ahora el imperialismo, sino llamar a las masas a levantar la bandera roja- la bandera de la clase obrera internacional en su lucha por el Socialismo.
El momento para expropiar a los expropiadores ha llegado.

Problemas de las revoluciones egipcia y tunecina
Los problemas con las revoluciones egipcias y tunecinas hasta ahora es que el aplastamiento de la policía que también resultó en una pérdida sustancial de vidas del bando de la revolución, no fue acompañado por el armamento generalizado de las masas. Esto le permitió al imperialismo maniobrar para secuestrar la revolución (por el momento) y llevarla a “caravanas de la liberación” pacifistas (Túnez) y a una prisión a cielo abierto para las masas desarmadas en la Plaza Tahrir (Egipto). El imperialismo y su prensa capitalista (incluyendo a Al Jazeera) alentó a la juventud de la clase media y sistemáticamente fogoneó a dirigentes de las clases medias para formar un frente popular bonapartista con los sindicatos del viejo régimen en Túnez y una dictadura militar con un gabinete desdentado de la “oposición” capitalista y del viejo régimen en Egipto. En Egipto la dictadura militar es incluso controlada más directamente por el imperialismo norteamericano que la farsa en los tiempos de Mubarak.

Segundo ninguno de los grupos hizo ningún esfuerzo para llamar o poner en pie los comités de delegados obreros o para organizar una huelga general política, llamando a unificar el movimiento huelguístico sobre una base política contra el viejo régimen; esto hubiera puesto inmediatamente las bases del poder obrero. Así es que activistas de la juventud y figuras de la “oposición” capitalista que no han sido elegidos han secuestrado (por ahora)  la lucha de la clase obrera para cooptarlo al sistema capitalista. El precio es el estrangulamiento de la revolución para que el imperialismo capitalista continúe controlando la riqueza.

Tercero, los combates en Túnez y Egipto se mantuvieron en el terreno nacionalista e ignoraron el hecho fundamental de que el imperialismo es quien realmente manda y los regímenes títeres son únicamente gerentes de los ataques del imperialismo mundial contra las masas locales. Así es que la revolución se condujo hacia el cambio de un gerente dictador por uno más “democrático” del mismo imperialismo.

Los Socialistas Egipcios (parte de la Tendencia Socialista Internacional) dirigieron la lucha por las conquistas económicas dentro de la fábrica, mientras que la tarea que estaba planteada era una huelga general política que hubiese puesto las bases para tomar el poder por parte de los obreros. Aplicaron la misma política que el KKE en Grecia y el NPA en Francia y que otros reformistas usaron para prevenir que la clase obrera se tome el poder.

El modelo de “democracia” (Estados Unidos) está reduciendo sus gastos en un billón de dólares, mucho de los recortes son en los gastos de la clase obrera; miles de maestros están siendo despedidos, 24 millones no pueden conseguir ni un trabajo estable; los aportes a las obras sociales se han duplicado (es decir que se han recortado un 20% los salarios); el monitoreo de compañías sobre la contaminación, en las ganancias, etc, se está recortando drásticamente; las asignaciones para la calefacción se están recortando, lo que significa que muchos más morirán de frío este año, etc., etc. Al mismo tiempo los enormes recortes de impuestos para las grandes corporaciones continúan. Obama está forzando a la clase obrera norteamericana a pagar el salvataje de los mismos bancos norteamericanos que controlan el mundo, incluyendo una gran parte de la economía tunecina y egipcia.

El gobierno republicrata de Obama le paga a los monopolios norteamericanos para que manden equipamiento militar anticuado y viejo a Túnez y Egipto. Los gobiernos tunecinos y egipcios han entregado varios miles de millones de dólares de la riqueza de las masas a esos monopolios norteamericanos. “Ayuda” militar es una cobertura del saqueo de las masas por parte del imperialismo. La mayoría de esta “ayuda” ni siquiera sale de Estados Unidos, sino que hay un constante flujo de riquezas de Túnez y Egipto por los bienes militares. Los mismos bancos y compañías norteamericanas son quienes han despedido a los trabajadores egipcios y tunecinos, que mantienen trabajo de baja calificación en las semicolonias como Egipto y Túnez y quienes imponen dictaduras en las fábricas, generalmente sin permitir sindicatos o un sindicato títere estatizado para “representar” a los obreros.

Al pasar los años el imperialismo ha colapsado la producción local de alimentos a través de la OMC y creó una dependencia de la importación de productos. El 86% de toda la tierra productiva es controlada por los monopolios. Esto crea las bases para que los imperialistas eleven el precio de los alimentos, aunque la producción esté a pleno. En 2008 cuando los imperialistas elevaron los precios de los alimentos artificialmente para obtener más ganancias hubo record de producción de trigo y otros alimentos. El precio de trigo rojo pasó de U$D 3 por bushel (35.2 litros) a U$D 25 en 2008 cuando había un record en los cultivos. La razón del incremento no fue la escasez sino que el 64% de la producción mundial estaba almacenada en algún lugar u otro por parte de los bancos imperialistas, quienes retuvieron la producción y crearon una escasez artificial e impulsaron los precios hacia arriba. Este es el mismo proceso ahora cuando los bancos basados en sus grandes stocks de comida, hambrearon deliberadamente a las masas del mundo para aumentar sus ganancias que decrecían. El crecimiento de la clase media china e india es dada como una razón para el aumento en el precio del maíz y otros productos alimenticios. Pero los estudios muestran que la demanda de alimentos ha caído un 3% en los últimos 2 o 3 años.

Hay suficientes elementos de construcción para que las masas del mundo tengan viviendas digas, y aún así cientos de millones viven en la miseria; el planeta es un campo de miseria masivo. Con el monopolio en los materiales para la construcción y la tierra en manos de los grandes bancos, el imperialismo mantiene artificialmente el precio de la vivienda por fuera de la mayoría de la población. Las unidades de viviendas que deberían costar 2.000 dólares son vendidas por 80.000 dólares. Las masas son mantenidas deliberadamente sin viviendas para que los bancos imperialistas obtengan ganancias de las viviendas.

Los primeros pasos del régimen de Ben Ali (sin Ben Ali) y del régimen de Mubarak (sin Mubarak) fue mantener el estado de emergencia que rige hace décadas; siguen arrestando y torturando activistas; tratan de forzar a que los obreros vuelvan a trabajar para las mismas compañías imperialistas que han atormentado a la clase obrera por décadas; han reprimido las acciones de protestas de las masas; el partido comunista dirige a los sindicatos que son parte del gobierno en Túnez mientras que la Hermandad Musulmana y el Movimiento 6 de Abril le dan legitimidad a la dictadura militar en Egipto. En otras palabras los regímenes han reprimidos las mismas demandas democráticas que fueron las bases de las revoluciones. Estos regímenes mantienen la dictadura de las empresas imperialistas que mantienen al proletariado mundial y las masas empobrecidas en el hambre, sin hogares y con un permanente desempleo en masa. Estos regímenes permiten a las empresas y los bancos imperialistas repatriar cientos de miles de millones de dólares mientras que las masas son mantenidas en la pobreza y muriendo de hambre. La dictadura militar amaga con ir tras tal o cual funcionario pero no levanta ni un solo dedo contra el carnicero Mubarak; Ben Ali pudo escapar con 1500 toneladas de oro. El imperialismo no quiere procesar a sus antiguos secuaces ya que esto crearía una gran inseguridad en las basas de sus actuales títeres. Así es que el imperialismo ayuda escapar a los asesinos.

Las tareas internacionales de las revoluciones desplegadas por alimento, trabajo y libertad

La primer tarea es para la clase obrera en Italia, locales e inmigrantes, es llamar a una huelga general inmediata. ¡Fuera Berlusconi y su régimen por apoyar a los mercenarios y las masacras de las masas revolucionarias libias! ¡Fuera Sarkozy y su régimen por el apoyo los mercenarios y su apoyo a la represión de las revoluciones argelinas y libanesas! ¡Abajo Obama y su régimen con su política de “tirar a matar” en Bahrain contra las masas desarmadas! ¡Es una política de tirar a matar contra las masas del mundo! ¡Que la huelga de Wisconsin se extienda a una huelga general política a todo Estado Unidos! Los ejes principales de la huelga general política es: abajo el régimen, expropiación de Wall Street, Londres, Paris, Tokio y los bancos de Berlín! ¡Expropiación de todos los bienes imperialistas sin indemnización, que sean puestos bajo control obrero! ¡Por un gobierno obrero basado en la autoorganización de la clase obrera!

Los imperialistas han lanzado una ofensiva de matar deliberadamente a millones de las masas del mundo a través del hambre, el desempleo y el alza artificial de los precios. Esto es una guerra mundial contra las masas. Las revoluciones en Túnez, Egipto y ahora en Libia muestran que para poder comer, la clase obrera debe derribar al régimen capitalista e ir más allá; y necesita tomar el poder en sus propias manos. El domingo 20 de febrero hubo comienzos de protestas en China, protestas que se realizaron en 16 ciudades y que siguen expandiéndose. Esta no es únicamente una revolución del Norte de África y Medio Oriente, sino el inicio de la revolución mundial. La posición de dependencia de las semicolonias de los centros imperialistas significa que para que la clase obrera conquiste el socialismo, la clase obrera tiene que tomar el poder en las semicolonias y en varios centros imperialistas. La revolución libia debe llegar a Italia y Alemania; las revoluciones Argelinas y Tunecinas deben llegar a Francia; las revoluciones egipcia, palestina, jordana, bahrainí, saudí, iraquí, iraní, china, zimbabwense, sudafricana, mexicana deben llegar a Estados Unidos, etc.

El levantamiento de Bolivia en diciembre de 2010, cuando las masas revolucionarias derrotaron el aumento del 80% en el precio de las naftas con dinamita en mano, muestra que una tarea central de la revolución debe ser expulsar del movimiento obrero a todos los dirigentes colaboracionista; es decir cualquier dirigente que colabore con un régimen capitalista o con cualquier capitalista. No es suficiente construir organismos obreros independientes mientras los dirigentes traidores se mantengan dominando a un gran sector de las masas.

Por lo tanto se necesita una conferencia urgente para unir a las organizaciones obreras revolucionaras y los trotskistas internacionalistas para formar una nueva internacional, que para nosotros significa la refundación de la IV Internacional. Llamamos a desenmascarar el rol del imperialismo en las masacres, a través de protestas en las embajadas de EE.UU., Italia y Francia. Que la llama de la revolución se enfrente al capitalismo en todos lados.

22/02/2011

Workers International Vanguard League

Miembro de la Fracción Leninista Trotskista Internacional

Integrada por:

- Liga Trotskista Internacional de Bolivia
- Liga Trotskista Internacional de Perú
- Partido Obrero Internacionalista (CI) de Chile
- Liga Obrera Internacionalista (CI) de Argentina
- Fracción Trotskista - Vanguardia Proletaria de Brasil
- Workers International Vanguard League de Sudáfrica
- Workers International League de Zimbabwe
- Comité por la Refundación de la Cuarta Internacional de San Pablo

| contactenos