09 de abril de 2015

El genocida Bashar Al Assad continúa la masacre del pueblo palestino en el campamento de refugiados de Yarmouk en Siria

¡FUERA EL IMPERIALISMO, SUS PETROLERAS Y SUS BANQUEROS, QUE SE ROBAN EL ORO NEGRO DEL MAGREB Y MEDIO ORIENTE Y SOLO DEJAN SANGRE DE LOS OPRIMIDOS EN LAS CALLES!

En Yarmouk, la resistencia palestina, junto a brigadas de la resistencia siria, combaten heroicamente al perro Bashar, como lo hacen las masas palestinas en Gaza, en Jerusalén y Cisjordania contra el ocupante sionista de la nación palestina. Lo hacen a 10 kilómetros de la casa de gobierno. Son una chispa que puede encender toda la sublevación de los trabajadores y campesinos pobres de Damasco y todo su rif (provincia).

Ni con los mercenarios de Bashar ni con las tropas cipayas iraníes se pudo aplastar a Yarmouk como tampoco a la heroica resistencia de Aleppo, entre otras. Por eso ahora el imperialismo mandó a su otro perro guardián: el ISIS, el que va a degollar por la espalda a las masas sirias. Son los generales saddamhuseinistas de Irak, los lacayos de las petroleras imperialistas… que están bajo la misma dirección del comando de la OTAN que hoy invade con Arabia Saudita y los jeques fantoches de la Liga Árabe a las masas yemeníes sublevadas en una enorme revolución.
A 10 kilómetros del centro de Damasco, la chispa de Yarmouk, las llamas de Aleppo, con el viento a favor de la sublevación revolucionaria de las masas obreras y campesinas de Yemen, puede hacer volver el fuego de la revolución en el Magreb y Medio Oriente. Esto anticipó la decisión de dar un golpe decisivo a Yarmouk con el ingreso del ISIS, bajo el paraguas de las bombas de barriles de Al Assad y con Jabhat al-Nusra –su socio en el control de las masas en las “zonas liberadas” del norte de Siria - cediéndole el paso al campo de refugiados.

El perro Bashar necesita retomar Yarmouk o dejarlo en manos firmes -como las del ISIS- que controlen a las masas palestinas con la espada sobre sus cabezas. Hasta ahora, nada había sido suficiente para doblegar la heroica resistencia de Yarmouk, como no lo habían hecho en Aleppo e Idlib.
Esta vez el perro Bashar y su amo Obama buscaron al ISIS como la otra punta de su misma soga para estrangular la heroica resistencia palestina de Yarmouk.
En apenas 5 días ya hubo 500 muertos de los 18.000 hombres y mujeres que aún resisten y viven en el campamento.

Hoy, el ISIS fue enviado por el imperialismo para entrar a Yarmouk. Su ingreso fue protegido por las tropas del perro Bashar que le liberaron y despejaron la zona, para que entre a masacrar a mansalva a la resistencia palestina. Ya está claro que Abu Bakr al-Baghdadi, el “califa” del ISIS que está bajo el mando de Arabia Saudita y el imperialismo angloyanqui, no sólo le cuida la cabeza al perro Bashar sino también al sionismo.
Lanzaron una operación militar combinada: el ISIS por tierra y  el perro Bashar tirando bombas de barriles desde sus helicópteros.
Mientras esto pasaba, la dirección palestina de Hamas estaba sentada en Egipto negociando con el sionismo y la ONU un “acuerdo de paz”, mendigando sus negocios. La dirección de la OLP está en la ONU representando un “estado palestino” que no existe, salvo en ghettos y campos de concentración. Ellos vienen, ya desde hace años, mirando para otro lado ante la masacre de las masas sirias y en particular de la resistencia palestina de Yarmouk que pelea contra Bashar, el guardián de las fronteras del estado de Israel.

 

El siniestro pacto de la burguesía palestina de la OLP con el criminal
de guerra Bashar… entregó a su propio pueblo
Yarmouk ya es una nueva Gaza masacrada por el perro Bashar que sostiene al sionismo

 

Más temprano que tarde quedará claro que el pacto de la burguesía palestina de Gaza y Cisjordania y la ONU en Egipto incluye mirar para otro lado cuando se masacra a las masas explotadas del mundo árabe y musulmán. Le quieren hacer creer a las masas palestinas que ellas “estarán mejor si se mantienen neutrales” puesto que con Obama y la ONU “recuperarán su estado nacional”… ¡Mentira! Esto no es así, y Yarmouk es un ejemplo. Con la derrota de la Plaza Tahrir de El Cairo, de las masas sirias, el cerco a la revolución libia, y si aplastan la revolución yemení, el sionismo tendrá las manos libres para terminar de ocupar hasta el último centímetro cuadrado del territorio palestino.
No se puede ser neutrales cuando las masas del mundo musulmán enfrentan y resisten a los gobiernos que sostienen al estado sionista-fascista de Israel, como el perro Bashar y los generales de Egipto que firmaron el pacto de Camp David de reconocimiento del estado de Israel en 1979. Ni hablar de los jeques de la monarquía asesina saudita, simples marionetas a sueldo de la British Petroleum, la Shell y la Exxon. Es que la banda de las petroleras imperialistas son los verdaderos jefes del sionismo que ocupa la nación palestina y los que sostienen a todos los regímenes antiobreros del mundo árabe y musulmán.

En Yarmouk se libra una batalla contra Al Assad y el sionismo, como ayer se libró en Gaza y Cisjordania y hoy se libra en la revolución yemení contra las tropas terrestres de la OTAN de Arabia Saudita y demás lacayos del imperialismo, o como ayer se libraba en todo el Magreb y Medio Oriente. Allí debe estar todo el peso del apoyo de las masas palestinas y de todos los trabajadores y pueblos oprimidos del mundo.
Yarmouk es una nueva Gaza masacrada. Millones de trabajadores del mundo ganaron las calles contra el ataque genocida del sionismo de julio/agosto de 2014 a los trabajadores y el pueblo palestino. Hoy, las masas palestinas deben llamarlos a ganar las calles nuevamente contra el perro asesino Bashar, que masacra igual o peor que el sionismo.

La burguesía de la OLP ya hace rato, desde el 2013, había huido de Yarmouk y se alineó junto al régimen genocida de Al Assad. Ellos, en la Palestina ocupada, son los carceleros de los ghettos donde se recluyen a las masas palestinas, como en Cisjordania… y lo eran también en Yarmouk. Ellos sólo buscan fondos para su bolsillo para administrar los ghettos y campos de concentración a los que ha sido reducida la nación palestina por parte del ocupante sionista. Basta mencionar que sólo negociaban en la ONU los fondos que les tocan a ellos para administrar las cárceles a cielo abierto en donde se encuentran los trabajadores y el pueblo palestino, al mismo momento en que se masacraba abiertamente en Yarmouk y el sionismo bombardeaba en la Gaza que aún clama justicia.
La burguesía palestina negocia sus fondos, tiene representaciones simbólicas en la ONU que no significan recuperar ni un milímetro de tierra ocupada, mientras el sionismo recluta base contrarrevolucionaria en todo el mundo para, con colonos fascistas, terminar de ocupar toda la tierra palestina.

La dirección de Hamas no puede mirar para otro lado. Las heroicas brigadas de Yarmouk se sienten solidarias con la lucha de las masas de Gaza y reconocen a Hamas como su dirección. Ésta no puede dejar abandonadas a las heroicas masas palestinas por el pacto y los acuerdos comerciales con el sionismo en Egipto.

El sionismo, no ha podido lanzar –salvo en Gaza- ningún ataque directo contra la revolución del Magreb y Medio Oriente que, de Túnez a Jerusalén, conmovió al mundo, a riesgo de tirarle más nafta al fuego de la revolución.
El imperialismo mandó a otros perros guardianes a reconstituir sus dispositivos de control de las rutas del petróleo y aplastar la revolución. Mandó a los Ayatollahs, al ISIS, a las tropas de las monarquías saudí y de la península arábiga… Francia invadió Malí. Si hubiera intervenido el sionismo directamente, se hubiera unificado y sincronizado una sola revolución, no solo en la región sino que ésta hubiera contado con el apoyo de todos los trabajadores del mundo.

Hoy Yarmouk no puede quedar aislado. La resistencia siria no puede ser aplastada como fueron derrotadas las masas de Egipto y Bahrein o como quedaron aisladas las milicias rebeldes de Libia. La llama de la revolución en Yemen debe triunfar. Deben ser aplastadas las fuerzas terroristas contrarrevolucionarias de la monarquía saudí, sus tribus y jeques testaferros de las petroleras de los Emiratos Árabes Unidos. Ellos, con su guardia pretoriana de Al Qaeda y la CIA, bajo el mando de la British Petroleum, son los que defienden al gobierno yemení de Hadi del odio de los obreros y campesinos armados e insurreccionados.

Las mentiras e infamias echadas a correr en el mundo (esparcidas por el Foro Social Mundial y la izquierda lacaya de Obama) sólo persiguen el objetivo de dejar aisladas a las masas revolucionarias del Magreb y Medio Oriente. Pero estas mentiras se desvanecen como arena del desierto entre las manos. Ya queda absolutamente claro que el imperialismo está usando a todos sus agentes para masacrar a una sola y única revolución de Túnez a Jerusalén, que conmovió al mundo en 2011 y que aún vive, en la resistencia como en Siria, o a la ofensiva con las heroicas masas yemeníes. Este pérfido plan se organiza desde la mesa de negociaciones de Ginebra, donde están todos: la burguesía saudí, los Ayatollahs iraníes, el sionismo, el perro Bashar, la Coalición Nacional Siria y demás burguesías sunnitas. Desde allí, el imperialismo mueve los hilos de todos sus agentes en la región.

Pero semejante engaño a las masas no quedará impune. Es que las masas palestinas tienen mucho que decir. Aún no han dicho su última palabra, ni el sionismo ha disparado todo su fuego contrarrevolucionario para aplastar la nación palestina. En estos combates de la revolución siria, de la cual Yarmouk es un heroico bastión de la resistencia, como también en la revolución yemení, se define en gran medida el futuro de la nación palestina.
¡Hay que extender la intifada de Gaza y Cisjordania contra el sionismo ahora a Siria para aplastar al perro Bashar, que sostiene al estado de Israel y masacra la nación palestina!
¡Todo el armamento de Gaza y del pueblo palestino de Cisjordania tiene que estar a disposición de la resistencia siria de Aleppo, Idlib y Yarmouk!

En la Jerusalén ocupada y en Damasco se libra la batalla contra el mismo enemigo: el sionismo y su perro ladero Bashar, ambos bajo el mando del imperialismo.
La irrupción de las masas palestinas en apoyo a Yarmouk junto a la revolución yemení haría temblar de sus cimientos al régimen de Bashar, asentado en un verdadero genocidio contra obreros y campesinos. Arrastraría a millones de trabajadores y pueblos oprimidos del mundo a las calles, como los que ayer se sublevaron para parar el puño asesino del sionismo que masacraba en Gaza.

 

El Foro Social Mundial de Túnez de 2013 y 2015: una cortina de humo para encubrir las peores masacres contra la revolución del Magreb y Medio Oriente; y para sostener el plan de los “dos estados” de Obama, el sionismo y la ONU para ocupar la nación palestina

 

La masacre en los campamentos palestinos en el Líbano de Sabra y Shatila de principios de los ’80 conmovió a todos los trabajadores y pueblos oprimidos del mundo (ver recuadro). Hoy esta masacre se repite en Yarmouk. No se puede guardar silencio sobre ello.
La complicidad de la burguesía palestina y de todas las corrientes de izquierda que fueron al Foro Social Mundial este año -por segunda vez- en Túnez apoyando abiertamente al verdugo de las masas sirias, el perro Bashar, es lo que ha permitido que se ahogue en sangre el grito de solidaridad con la nación palestina en Yarmouk.
El Foro Social Mundial que se reunió en Túnez fue el que sostuvo a la guardia republicana iraní y a los Ayatollahs sirvientes de Obama y la Merkel, que apoyó a los Castro, Chávez, Morales y los Kirchner -los entregadores de la lucha antiimperialista de las masas latinoamericanas. Son los que encubrieron con un manto de “luchadores antiimperialistas” a los más crueles asesinos y enemigos de los trabajadores y pueblos oprimidos del Magreb y Medio Oriente, como lo fue Khadafy y hoy lo siguen siendo el perro Bashar, los generales egipcios asesinos de las masas ayer sublevadas en la Plaza Tahrir e inclusive el mismo ISIS, al que encubren que está armado hasta los dientes por la British Petroleum, los yanquis y la monarquía asesina de Arabia Saudita.

Este año, el FSM se dividió en dos, puesto que los bolivarianos ya cumplieron su objetivo de estrangular la revolución latinoamericana, restaurar al capitalismo en Cuba y sostener a Obama en todo el continente americano. Ellos se fueron a hacer buenos negocios con los yanquis a la “Cumbre de las Américas”.
En la “Cumbre de las Américas” que comienza estos días se acabaron los chisporroteos, diatribas “antiimperialistas” y fuegos de artificio de los bolivarianos con los yanquis. Negocios son negocios. Los bolivarianos están con el libre comercio en el Atlántico y el Pacifico. Están todos con los yanquis, con Obama, atacando con feroces planes de hambre y entrega a la clase obrera latinoamericana, de la misma manera que lo hacen los gobiernos “reaccionarios” del TLC del Pacífico, como Colombia o México. Lo que han hecho es poner en pie el ALCA que quería Bush.

El FSM y la estafa de su “revolución bolivariana” no fue más que un rodeo para sostener a Obama, al imperialismo yanqui en bancarrota y estrangular la revolución en el continente. Su grito de guerra en la Cumbre de las Américas de Panama, junto con su amo Obama, es “América para los americanos”.

En Medio Oriente, los otros personajes vestidos más de izquierda aterrizaron en Túnez. Pero por más edulcorante rojo que se le ponga, esa es la izquierda de Obama. En Túnez se juntaron los mismos que ayer aplaudían las “primaveras árabes” y las “democracias”, y sólo sostuvieron a las más grandes contrarrevoluciones y genocidios del siglo XXI. Ellos son los responsables de la restauración del régimen de Ben Ali, de sus generales y jueces asesinos; de haber apoyado a la burguesía “democrática” de Egipto, que le dio el poder a los generales asesinos de Mubarak.

En su cumbre de 2013, también llevada a cabo en Túnez, elogiaron la “labor antiimperialista” del asesino Bashar Al Assad. Hoy son responsables de los crímenes y el genocidio no solamente contra las masas sirias, sino también contra las masas palestinas.
Desde el FSM guardan silencio sobre Yarmouk porque preparan un gran acuerdo para imponerle a las masas palestinas el plan de Obama de los “dos estados”, lo que significa, ni más ni menos, que el reconocimiento del estado de Israel y confinar a las masas palestinas a campos de concentración como lo son Gaza y Cisjordania.

Los voceros del FSM llegaron a justificar la masacre de miles de obreros, mujeres y niños palestinos de Yarmouk bajo el pretexto de “no hacerle el juego al imperialismo”. Es decir que ¿“para no hacerle el juego al imperialismo” hay que masacrar a las masas palestinas como lo hace el sionismo? Esto ya no es una mentira. Es una verdadera confesión de partes de los cómplices de los verdugos de la nación palestina. ¡Cínicos! No pueden esconder más que en el Foro Social Mundial están los que limpian las espadas y alistan las sogas de los verdugos de las masas del Magreb y Medio Oriente a cuenta del imperialismo. Éste controla la región masacrando a la nación palestina y a todos los trabajadores y los pueblos que han “osado” sublevarse contra sus regímenes asesinos de entrega, opresión y saqueo.
La resistencia siria, palestina y de la clase obrera mundial debe rodear de solidaridad a Yarmouk como bastión de la lucha revolucionaria de las masas del Magreb y Medio Oriente.
En todas las revoluciones de estos años, desde los levantamientos de Bahrein, Yemen, la Plaza Tahrir de El Cairo, de Túnez, de la toma de Trípoli por las milicias rebeldes de Libia, en Siria en Homs o Hama, las masas gritaban: ¡Muera EEUU! ¡Muera el sionismo!
El FSM se ha encargado de que este grito de lucha con el cual las masas identifican a su enemigo se disipe, que se destruya, que no exista más. Por eso sostienen, mintiéndole a las masas, que el estado sionista-fascista de Israel puede reconocer una nación que ocupa –como es Palestina- sin oprimirla, aplastarla y masacrarla. Significa que EEUU no es el enemigo de las masas. EEUU, para ellos, “trae la democracia” para que las “primaveras” florezcan. Les lavan la cara a los carniceros imperialistas de Wall Street que comandan las más brutales masacres contra las masas del Magreb y Medio Oriente y en todo el mundo.

 

El FSM viene a poner un manto de silencio a la masacre palestina en Yarmouk
Viene a encubrir, en nombre de su
lucha “antiterrorista”, el ataque de las tropas cipayas de la OTAN de
Arabia Saudita a la revolución yemeni

 

En Siria la cuestión es clara. En Aleppo, en Idlib, en Yarmouk, se combate contra el perro Bashar, y en la retaguardia contra los generales asesinos del ISIS. Allí están las barricadas y las trincheras que enfrentan al imperialismo y al sionismo.
En Yemen, en los levantamientos de Sanaa y Aden, con una alianza obrera y campesina que desarmó al ejército y derrotó al gobierno sunnita de Hadi, desapareció la mentira de los choques de “sunnitas contra chiitas”. Allí hubo un enorme levantamiento y sublevación de todas las masas del norte y sur de Yemen contra el brutal ataque de aumento de precios y de carestía de la vida que lanzó el gobierno esclavista yemení. Éste, junto a los jeques y monarcas de Arabia Saudita, cobra comisiones por todos los obreros esclavos, yemeníes y de África, que van a trabajar a los pozos de petróleo de Medio Oriente o que son exportados como esclavos a Europa.

Contra la carestía de la vida surgieron miles de consejos de obreros, campesinos y soldados: los shoras, que tomaron hasta el palacio presidencial reclamando ¡pan, fuera el imperialismo y fuera el sionismo!
Cuando las masas tomaban la capital, una rama de la burguesía chiita de la región, los Houthi llamaba a las masas a desalojar los edificios públicos y hacer un acuerdo con el gobierno odiado de Hadi. Y cuando las masas sunnitas se sublevaban en la capital del sur, Aden, contra el mismo presidente que se había fugado de Sanaa, se encontraban con la guardia militar de al Qaeda defendiendo el palacio presidencial.
Allí las cosas han quedado claras. La revolución obrera y campesina yemení está limpiando el panorama de tanta polvareda, engaño y veneno arrojado a la consciencia de las masas del mundo. El gran capital utiliza a todos sus agentes, haciéndole jugar a cada uno el rol que tiene que jugar, para salvar y defender su propiedad. Todo lo demás es una vil mentira, y está siendo desnudada de forma clarísima por la revolución yemení, que ha paralizado la lengua y los dedos de todas las cacatúas de la izquierda de Obama.

Irán ayer mandó a 40.000 hombres para masacrar a las masas sublevadas en Damasco y para defender al perro genocida Bashar. Aquí hoy todos se sacan las caretas. La burguesía iraní de los ayatollahs hoy guarda silencio y mira para otro lado cuando las tropas sunnitas de Arabia Saudita y los jeques de la península arábiga han lanzado un brutal ataque contra las masas revolucionarias yemeníes que inclusive gran parte de ellas son chiitas.
La mentira de que en Yemen estamos ante un choque entre bandos religiosos se desploma y se desenmascara como lo que es: un engaño de las direcciones traidoras de la clase obrera mundial, que hace pasar a los enemigos de las masas como sus aliados, y a sus aliados como sus enemigos.
La burguesía chiita de los Houthis en Yemen sólo busca colocarse encima de la marea revolucionaria de las masas para impedir que éstas se hagan del poder cuando ya controlan todos los edificios públicos con sus shoras, es decir, consejos de obreros, soldados y campesinos pobres.
Como ya dijimos, las tropas sunnitas de Al Qaeda en Yemen, los que el imperialismo y sus sirvientes llaman los “jefes de los terroristas de los súper-terroristas” del mundo, son los que rodean el palacio presidencial de Aden contra las masas para que éstas no se lo tomen, defendiendo la presidencia de Hadi, que es reconocida por las tropas de Arabia Saudita, EEUU y la ONU…
¿Al Qaeda? ¿El ISIS? También son tropas de Obama, los yanquis y la OTAN. El imperialismo tiene distintas fuerzas. Utiliza a cada sicario de acuerdo a la labor que tienen que cumplir y cómo tienen que engañar a las masas para ejecutar sus planes.

En Yemen los engaños se disipan. Se unieron todas las masas explotadas contra un aumento brutal del costo de vida. Siguieron el camino revolucionario por el pan y contra el hambre y retomaron la chispa que se encendió cuando se inmoló Mohammed Bouazizi contra el régimen infame de Ben Ali en Túnez en 2011.

La invasión y la masacre que ha comenzado contra el pueblo sublevado de Yemen es el ataque a las masas sirias, a la Plaza Tahrir, a las masas de Bahrein… Todavía hay periodistas que se presentan como “intelectuales cultos” que dicen imbecilidades como que “la crisis yemení es un choque de dos potencias por el control de Medio Oriente, entre Irán y Arabia Saudita”… Una estupidez, si no fuera un engaño para evitar que la clase obrera mundial distinga a sus aliados, los explotados, combatiendo en el Magreb y Medio Oriente.
¿Irán una potencia, cuando ni siquiera tiene reactores para hacer una bomba nuclear? ¿Irán una potencia, cuando no tiene refinerías para su propio petróleo, que se refina en Alemania, la cual sí hace enormes negocios? ¿Arabia Saudita una potencia, cuando es una monarquía títere de las petroleras imperialistas? Estamos ante burguesías cipayas, a veces díscolas para discutir su parte del botín.
En el laberinto de Yemen se pierden los que engañan a los trabajadores y el pueblo. La vida está dando su veredicto.

En Yarmouk, el perro Bashar, a cuenta del imperialismo, masacra a la resistencia siria y las masas palestinas cuidándole las fronteras al sionismo, mientras éste termina su trabajo de ocupación de la nación palestina.
En Yemen combaten los consejos de obreros, campesinos y soldados chiitas y sunnitas por un lado, contra los Houthis chiitas, contra Al Qaeda y el presidente Hadi sunnitas… y los invasores que también son sunnitas, tan terroristas como el ISIS al cual financian. Están todos bajo el mando de las verdaderas “potencias regionales”: la Shell, la Exxon, la British Petroleum, la Total, la ENI y la flota norteamericana del Mediterráneo, que junto a las bases militares inglesas y francesas y el ejército sionista controlan la región.

En Yemen y en Yarmouk mueren las palabras. Se rompen los dientes los enemigos de la lucha antiimperialista de los pueblos oprimidos del Magreb y Medio Oriente que calumnian a las masas revolucionarias.
¿Son sunnitas? ¿Son chiitas? ¿Son Houthis? ¿Son el ISIS? ¿Son musulmanes? ¿Son católicos? ¿Son masones?… Y podrían seguir las dudas y preguntas después de tantas mentiras y engaños. ¡NO, SEÑORES CACATÚAS PAGADAS POR EL IMPERIALISMO! En Yemen son obreros y campesinos haciendo una revolución.

¿Es el Ejército Sirio Libre? ¿Es Jabhat Al Nusra? ¿Son los terroristas? ¿Es el ISIS? ¡NO! En Siria se masacra a la resistencia de las masas palestinas, que en Yarmouk combate junto a la resistencia siria contra el más grande agente del sionismo en Medio Oriente que es el perro genocida Bashar. En Yarmouk, se ataca la resistencia de la nación palestina, masacrada por Bashar, como ayer lo fuera en Sabra y Shatila, o como lo fuera meses atrás en Gaza por el sionismo.

¡NO, ESTÚPIDOS! ¡DEJEN DE MENTIR! ES LA REVOLUCIÓN. Y USTEDES, VOCEROS DEL IMPERIALISMO, DEFIENDEN A LA CONTRARREVOLUCIÓN. Desde el Foro Social Mundial vienen a adormecer a las masas, a engañarlas, a desorganizar lo que éstas conquistan en la lucha, para que luego las potencias imperialistas recuperen el control de una región de la que saquean una de las riquezas más grandes del mundo, que es el “oro negro”.

Esta gente hablaba de la “primavera de los pueblos” y terminaron entregando a las masas revolucionarias, país por país, a los sables asesinos del imperialismo. La izquierda de Obama inventó que el imperialismo yanqui “expande la democracia en el mundo”, cuando no lo hace ni siquiera en EEUU, donde mata a tiros a la juventud negra, donde con bandas fascistas muele a palos y encarcela a los inmigrantes y sus hijos. Reprimen con piquetes y rompehuelgas a cuanto levantamiento haya de la clase obrera. No mientan más. Ya no son creíbles. La vida y los testarudos hechos demuelen vuestras palabras. Cada vez se acaba más el tiempo del engaño. Las masas lo perciben. Ellas pagan con sangre sus traiciones.
Estamos frente a una izquierda proimperialista, que vendió el verso del “socialismo del siglo XXI” y del “socialismo de mercado”… y terminó entregando Cuba a la Coca Cola y Cargill, y en China entregó a la clase obrera, como esclava de una maquiladora gigante, al mercado controlado por Wall Street.

Las primaveras de los pueblos que pregonaba el Foro Social Mundial y su engaño de “más democracia” no fue más que un rodeo para volver a los generales de Mubarak, de Ben Ali, de Khadafi, de la OTAN y con el sionismo masacrando a las masas palestinas.

Para los socialistas revolucionarios no puede haber ni olvido, ni silencio, ni perdón de las masacres y el genocidio en Siria. El olvido y el silencio de hoy, encubrir las traiciones de la direcciones de la clase obrera mundial significaría no preparar a las masas para la masacre inevitable que vendrá no solo en Yarmouk, no solo en Yemen, no solo en Palestina, sino que, un imperialismo victorioso, apuntará su bayoneta contra su propia clase obrera.

En el Magreb y Medio Oriente se libra una de las grandes batallas de los explotados contra los explotadores. La política de los enfermeros del capitalismo es que los explotados del mundo no distingan dónde está su frente de lucha en la región.
Si se mantiene el olvido y el silencio sobre la masacre y el genocidio en Siria, significará el silencio y olvido para que el ocupante sionista termine su obra masacrando y no dejando rastros de la nación palestina. LOS TRABAJADORES Y LOS PUEBLOS OPRIMIDOS DEL MUNDO NO LO PODEMOS PERMITIR.
En el pacto de Egipto entre la burguesía palestina de Gaza y Cisjordania, el sionismo y la ONU se exige que Hamas reconozca oficialmente al estado sionista-fascista de Israel. Pero saben que si esto ocurriera, Hamas no duraría ni un minuto al frente de las masas palestinas.
Con los engaños y las mentiras de un “nuevo estado palestino” en la ONU, de sumarse a la corte penal internacional, etc. el único que gana es el sionismo, que está mandando una nueva oleada de colonos a ocupar las mejores tierras que aún quedan de la nación palestina. Es un vil engaño. Las masas palestinas no lo van a permitir.

 

En Yarmouk, Aleppo y toda Siria…
en Gaza, Cisjordania y Jerusalén,
una misma lucha, un mismo enemigo:
el sionismo, el genocida Bashar y el imperialismo

La resistencia en Yarmouk y Aleppo, las indomables masas palestinas que no se rinden, las milicias rebeldes de Misrata que no deponen sus armas ni se someten y la enorme revolución de las masas obreras y campesinas en Yemen demuestran que la cadena de revoluciones comenzada en Túnez en 2011 y todo el Magreb y Medio Oriente aún sigue viva.

Pero el ataque conjunto del ISIS y Bashar a Yarmouk, el bombardeo incesante sobre las masas sirias, el ataque de los reyezuelos de Arabia Saudita y demás lacayos del imperialismo a las masas insurrectas de Yemen también dan cuenta que una feroz contraofensiva imperialista busca aplastarla. El imperialismo tiene que asentar sus logros. Una vez que las masas estén aplastadas y sus agentes hayan logrado su cometido, vendrán directamente ellos y se quedarán con todo.
La masacre y el ataque, como el que sufren las masas de Yarmouk, es permitido por el cerco y aislamiento al que están sometidas. Bashar y el ISIS tienen las manos libres para masacrar a las masas palestinas, como ayer las tuvieron para imponer el genocidio en toda Siria.

¡Basta! ¡No podemos permitir esto un minuto más! ¡Las masas palestinas en Gaza, Cisjordania, Jerusalén, Jordania y el Líbano deben salir en apoyo de sus hermanos de Yarmouk! Ya han comenzado las primeras marchas en las principales ciudades como Hebrón, Nablus y hasta en la misma Ramallah. ¡Ese es el camino para romper el cerco a los explotados que resisten en Siria el genocidio del perro Bashar!
Un clamor en las calles de las masas palestinas llamando a parar la masacre en Yarmouk y de las masas sirias, enfrentando al genocida Al Assad, despertaría rápidamente una enorme solidaridad entre todos los trabajadores del mundo.

Ayer las masas palestinas han sublevado a millones de explotados en el planeta contra el ataque del ocupante sionista a Gaza y pararon su maquinaria de guerra provisoriamente contra las masas palestinas. Como ayer por Gaza, hoy, ¡ganemos las calles de todo el mundo para parar la masacre del perro Bashar contra las masas palestinas en Yarmouk y contra los explotados sirios! ¡Semejante masacre y genocidio no puede quedar impune!

El imperialismo mueve sus tropas de sicarios y gurkas azuzando las creencias religiosas y étnicas de las masas dirigidas por las burguesías locales. Aquí y allá manda “brigadas internacionales” contrarrevolucionarias para aplastar revoluciones. Despertó a los ex generales de Saddam Hussein, les puso un Califa al frente, les dio plata de Arabia Saudita y puso de pie al ISIS para ir a aplastar a las masas que se habían insurreccionado en las ciudades iraquíes de Tikrit, Fallujah, Mosul, y en toda Siria. Una vez que el ISIS aplastó esa cadena de insurrecciones que surgió a la retirada yanqui de Irak, mandan a la burguesía chiita del sur de Irak a “retomar las ciudades” terminando de masacrar y escarmentar a todo aquel que haya osado levantarse.
Mandaron a la guardia republicana iraní y a Hezbollah a sostener a Al Assad cuando estaba cercado en Damasco, para que no caiga.

Mandaron a la burguesía kurda en el norte de Irak a imponer un pacto con el gobierno del protectorado yanqui y en Siria a pactar con el perro Bashar y romper el frente de batalla contra Al Assad. Así, con estos pactos, han atado con dobles cadenas de esclavitud a la nación kurda dentro y fuera de Turquía, un vigilante silencioso, presto a actuar en cualquier momento ante el desborde de la revolución.
Tanta campaña contra el terrorismo es porque miles de luchadores obreros antiimperialistas hierven de odio por tanta masacre y contrarrevolución, y cruzan las fronteras de las naciones para enfrentar a EEUU y sus lacayos en toda la región.
El ISIS también es una excusa para reprimir brutalmente a todo luchador antiimperialista que quiera combatir junto a sus hermanos en todos los focos de resistencia en la región.

¡Hay que multiplicar la solidaridad con la resistencia palestina, siria, libia y la revolución yemení!
¡Los verdaderos terroristas son los imperialistas y sus tropas terrestres de mercenarios en todo el Magreb y Medio Oriente!
¡Hay que romper todo sometimiento al FSM, que pone al movimiento obrero como furgón de cola de la burguesía y el imperialismo y sus distintas pandillas regionales!
¡Hay que poner en pie comités de apoyo a las masas sirias, a las milicias rebeldes de Libia, a la revolución yemení, a las masas palestinas contra el ocupante sionista en todas las organizaciones obreras del mundo!
¡Hay que coordinar y centralizar toda la solidaridad con los trabajadores y los pueblos oprimidos del Magreb y Medio Oriente! ¡Medicamentos, alimentos y brigadas obreras internacionales para combatir junto a la resistencia palestina en Yarmouk, en Gaza, junto a las masas sirias y de toda la región!
¡Hay que liberar Yarmouk! ¡Hay que aplastar al genocida Bashar en Damasco!
 
Un gran aliado de las masas palestinas se puso de pie en el corazón de la bestia imperialista. La clase obrera norteamericana está en lucha contra su propia burguesía imperialista. Los obreros petroleros llevan adelante una gran huelga contra la Exxon, Chevron y British Petroleum. Cuando el sionismo atacó a Gaza en julio/agosto de 2014, decenas y decenas de miles ganaron las calles de todo EEUU al grito de “Obama financia al terrorismo de Israel”. Los obreros portuarios de la costa oeste se negaron a descargar y cargar buques que vayan o provengan de Israel. ¡Así se defiende a las masas palestinas de Yarmouk y Siria! ¡Este es el camino para pelear contra las petroleras imperialistas! ¡Hay que volver a esas acciones para parar la mano genocida de Al Assad, el ISIS y el plan de ocupación de la nación palestina con colonos sionistas que está en curso!

En Siria se resiste en Aleppo y se retoma Idlib. La hambruna y la miseria de los millones de explotados que están en campos de refugiados y dentro de las ciudades de Siria no se aguanta más. La forma de romper el asedio a Aleppo e Idlib que impone el chacal Al Assad y -por la espalda- el ISIS es expropiar a la burguesía en las “zonas liberadas” e imponer una economía de guerra, es decir, que los fondos, los alimentos, la producción pase a manos de los trabajadores y sus milicias; se incauten los bancos a manos de las masas y se pongan los fondos para comprar armas y alimentos, y darle de comer dignamente al pueblo.

Esto actuaría como el misil más fuerte de la resistencia, capaz de sublevar a las masas en Siria y en toda la región. Expropiar a la burguesía es chocar con los generales burgueses de Jabhat Al Nusra y el Ejército Sirio Libre, que vienen a expropiar la revolución. Es el camino para volver a sublevar a las masas de Damasco, de Homs y de todos los campamentos de refugiados. Es el camino a la victoria. Es volver a poner en pie los comités de obreros, campesinos y soldados, es decir, los comités de coordinación.

El pan se conquistará y la guerra contra Bashar se ganará con la expropiación de los expropiadores y asesinos del pueblo. Ese es el camino para liberar Yarmouk, aplastar a Al Assad y marchar a Jerusalén. Se vence a los opresores con el programa de la revolución socialista de expropiación de los expropiadores. Ahí les duele: en sus bolsillos, más que en su carne.

¡Hay que parar la masacre en Yarmouk! ¡Basta de pactos y acuerdos en Egipto de la representación palestina de Gaza con el sionista invasor! ¡Ningún acuerdo puede ser hecho a espaldas del pueblo palestino y de sus mejores combatientes que por miles están en las prisiones y las mazmorras de los torturadores sionistas de la Mossad!

¡Ninguna negociación secreta de entrega de la nación palestina con el estado de ocupación sionista! ¡Ninguna neutralidad con los más grandes aliados del pueblo palestino, que son los trabajadores insurreccionados ayer en Túnez, en Libia, en Siria como hoy en Yemen!
En Gaza, Cisjordania, Líbano y Siria: ¡una sola batalla, un solo enemigo! ¡Por la destrucción del estado sionista-fascista de Israel!
¡Juicio y castigo al genocida Al Assad, que le defiende las fronteras al sionismo para que ocupe la nación palestina!

¡Viva la sublevación de los explotados yemeníes por el pan! Su grito de guerra es “¡Muerte a EEUU, muerte a Arabia Saudita, muerte a Israel!” ¡Paso a los Shoras! ¡Paso a los obreros y campesinos! Ellos deben tomar el poder para conqusitar el pan y transformar a Yemen en un bastión de una nueva contraofensiva de la revolución en la región.
Ellos son los aliados de las masas palestinas, de la resistencia siria y de los refugiados palestinos masacrados en Yarmouk. ¡Ellos son los verdaderos aliados en la lucha contra el ocupante sionista!
La lucha de las masas sirias, palestinas y yemeníes, como así también de todos los explotados del Magreb y Medio Oriente es una sola, que enfrenta a un mismo enemigo y todos sus agentes en toda la región.

¡Basta de hambre, miseria y robo de las riquezas de los trabajadores y los pueblos oprimidos del Magreb y Medio Oriente!
¡Que muera el imperialismo!
¡POR LA EXPROPIACIÓN SIN PAGO DE TODAS LAS EMPRESAS PETROLERAS IMPERIALISTAS Y SUS BANCOS, QUE SE LLEVAN EL ORO NEGRO DEL MAGREB Y MEDIO ORIENTE Y SOLO DEJAN SANGRE DE LOS OPRIMIDOS EN LAS CALLES!

¡Por la derrota militar de las tropas cipayas de las monarquías contrarrevolucionarios de la península arábiga, sirvientes de las petroleras imperialistas, bajo el mando de Obama y la OTAN, que hoy están atacando a las masas insurrectas de Yemen! ¡Mueran los generales mubarakistas egipcios, garantes del pacto de Camp Davild de sostenimiento del estado sionista, que hoy atacan a las milicias rebeldes de Libia y las masas insurrectas de Yemen!

¡Hay que aplastar el golpe de Heftar en Libia! ¡Hay que centralizar las milicias rebeldes! ¡Hay que coordinarlas con los piquetes de huelga de los obreros petroleros en toda Libia! De la mano de Obama, han vuelto Khadafy, sus generales y políticos asesinos del pueblo.

¡Hay que parar la masacre a la revolución y a la resistencia de las masas palestinas y sirias!
¡Abajo el gobierno y el régimen infame del protectorado yanqui en Irak! ¡Abajo sus guardias pretorianas y mercenarios al mando del ISIS, la burguesía sunnita y chiita! Ellos sostienen, encubren y defienden, contra las masas iraquíes sublevadas, los intereses de la Halliburton de Cheney, la British Petroleum, la Shell y demás saqueadores imperialistas.
En todo el Magreb y Medio Oriente, hay que preparar una contraofensiva. ¡Que el fuego de la revolución vuelva a incendiar toda la región! ¡Paso a la revolución!
¡El Medio Oriente y el Magreb serán Estados Unidos Socialistas, o colonias aplastadas por el fascismo bajo el mando del imperialismo!

Colectivo por la Refundación de la IV Internacional - FLTI