volver al índice del Organizador Obrero Internacional Nº 15
¡LA LUCHA POR LA EDUCACIÓN GRATUITA ES DE TODA LA CLASE OBRERA Y LOS EXPLOTADOS!
Ya lo mocionó el combativo movimiento estudiantil: ¡Ninguna negociación con nuestros verdugos!
Ya derrotamos la trampa de la mesa de negociación, y ahora nos quieren imponer “plebiscitos” y nuevas trampas “democráticas”. Pero ningún parlamentario “democrático” de la Concertación y el PC, ningún “plebiscito vinculante” emanado de este régimen pinochetista nos dará la educación gratuita:
¡Ninguna confianza en los parlamentarios de la Concertación ni el PC!
¡Abajo el parlamento pinochetista! ¡Congreso Nacional del movimiento obrero, estudiantil y del campesinado pobre para imponer un plan de lucha y conquistar todas nuestras demandas! ¡Fuera las direcciones traidoras del movimiento obrero y estudiantil!
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Para conseguir la educación gratuita, es decir, para defender el salario de los trabajadores, hay que demostrarle a la burguesía quien es el verdadero dueño de la nación, si los parásitos capitalistas, o quienes producimos todas las riquezas. ¡Hay que ponerle el pie en el pecho a los explotadores!
¡Huelga general revolucionaria! ¡Fuera Piñera!
¡Abajo el régimen pinochetista de la Constitución del 80!
Para conseguir nuestras demandas, la plata sobra:
¡Renacionalización del cobre, sin pago y bajo control de los trabajadores! ¡Fuera las Transnacionales imperialistas!
¡Abajo el TLC!
Mientras las direcciones colaboracionistas negocian con nuestros verdugos, decenas de compañeros están presos en las cárceles de este régimen nauseabundo y hay miles de procesados por luchar:
¡Libertad inmediata e incondicional a todos los presos políticos del movimiento estudiantil y a todos los luchadores obreros y populares perseguidos por la justicia pinochetista!
Después de cinco meses de heroica lucha contra el régimen cívico militar de la Constitución del ´80 (de la derecha, la Concertación y el PC) y el gobierno de Piñera, el movimiento estudiantil chileno permanece de pie. Aún son cientos y cientos de colegios y universidades que permanecen tomados o en paralización de actividades académicas, demandando la educación gratuita para todos.
Si bien la mesa de negociación establecida entre la dirección del CONFECH, la CONES, la ACES, los Liceos Técnico Profesionales, el Colegio de Profesores y el gobierno de Piñera, momentáneamente (mientras duró) contribuyó en la división entre el movimiento estudiantil y el movimiento obrero –división garantizada por la burocracia sindical- y durante algunas semanas provocó un relativo retroceso a la lucha, reflejado en una disminución de la asistencias a las movilizaciones y el regreso a clases de amplios sectores, aquel plan de la burguesía rápidamente fue desbaratado por la juventud revolucionaria, quien le impuso a sus direcciones conciliadoras la ruptura de la mesa, protagonizando en centenares de colegios y universidades feroces luchas, incluso físicas, contra los pacos rojos del PC y contra la Concertación.
Así, el 5 de octubre la mesa fue pateada por la juventud revolucionaria que sacó lúcidas lecciones de la trampa impuesta el 2006. Con esto, la lucha de la juventud ha tomado nuevos aires. Es que Piñera dijo lo que todo joven de vanguardia sabía que diría: no habrá educación gratuita bajo su gobierno. Ante eso, una ola de retomas en colegios y universidades sacuden Chile, y la burocracia de la CONFECH se vio obligada a llamar a un nuevo paro nacional para el pasado 18 y 19 de octubre, llamado al que adhirió también la dirección de la CUT, quien, al final, no llamó a paralizar la producción a la clase obrera, y solo los trabajadores portuarios de Valparaíso, una vez más, paralizaron junto a los estudiantes.
Hoy, la Concertación, junto a sus fieles aliado del PC, intenta montarse sobre la lucha del movimiento estudiantil. Ante los últimos sucesos, estos demagogos de inmediato salieron a presentarse como una “dura oposición” a Piñera y los “portavoces de la educación gratuita” en el Congreso, (inclusive con ridículas acciones efectistas como los empujones e insultos con los parlamentarios de la Coalición durante una marcha en Valparaíso). A su vez, salieron a demandar una reforma tributaria para conseguir más fondos para la educación, volvieron a sacar a la palestra su plan de reformas electorales e iniciaron un proceso de reconfiguración de su conglomerado. Todo ello constituye una trampa (como con la que desviaron nuestra lucha en 2006) para expropiar el combate de la juventud pro-obrera que hoy ha tomado nuevos bríos, y así ser ellos quienes canalicen este proceso desviándolo al parlamento de los enemigos del pueblo, mediante nuevas auto reformas que apliquen cambios cosméticos al régimen pinochetista y perpetúen los fundamental de éste.
Esos tránsfugas buscan evitar que se profundice aún más la radicalización de las masas, que el movimiento obrero conquiste plena independencia política expresada en organismos de autodeterminación y democracia directa, y una acción histórica e independiente de masas que barra con el gobierno y el régimen pinochetista y de inicio a la revolución obrera y socialista. Por ello, junto al Partido Comunista intentan hoy descomprimir la lucha para llevarla a los pies del parlamento pinochetista, proclamando la urgencia de una reforma que permita un “plebiscito vinculante”, desde donde se vote la educación gratuita. Para eso fue que usaron la acción de la toma temporal del ex Congreso Nacional el pasado jueves 20 de octubre. Sin embargo, por más que quieran pintar de “democrático” al régimen pinochetista, al que se le pueden exigir e imponer medidas extremas de democracia, Piñera ha demostrado que no está dispuesto a entregar la educación gratuita. No lo ha hecho después de 39 movilizaciones nacionales, después de centenares de tomas, de poderosas huelgas obreras, combates de barricadas, etc. ¡Y ahora nos quieren hacer creer que la educación gratuita que no hemos obtenido aún con nuestra heroica lucha, la obtendremos de esa cueva de bandidos que es el parlamento pinochetista, de senadores designados, empresarios y políticos patronales!
Los que nos quieren llevar a esa trampa, son los mismos que en 1989 llevaron a toda las masas explotadas a la trampa del plebiscito para sacar a Pinochet, que terminó siendo una transición pactada a la “democracia”, que impuso un régimen cívico-militar que, por más auto-reformas cosméticas que se hizo, mantuvo hasta hoy su carácter bonapartista y antiobrero.
¡Basta de trampas! ¡La Concertación durante el gobierno de Bachelet defendió con uñas y dientes la pinochetista LOCE y luego le aplicó reformas cosméticas imponiendo la LGE que conservó lo principal de ella! ¡Sus gobiernos fueron los mejores administradores del régimen de Pinochet legitimando y profundizando la entrega de la nación al imperialismo con los TLCs, las leyes anti-obreras como la subcontratación, dejando decenas de muertos en el camino y llenando las cárceles de presos políticos!
El combate del movimiento estudiantil:
caja de resonancia de un profundo proceso de movilización de masas
La lucha del movimiento estudiantil es la avanzada de un proceso revolucionario que se abrió en Chile a mediados de mayo del presente año. La juventud nuevamente ha actuado como caja de resonancia de un profundo proceso de movilización de masas contra el gobierno y el régimen pinochetista. Contra todo lo que dice la izquierda reformista, sobre que en este proceso supuestamente no habría participado la clase obrera, la realidad muestra todo lo contrario. Este proceso surgió con múltiples combates revolucionarios generalizados, con poderosas huelgas obreras en todas las minas del país demandando la renacionalización del cobre, con duras luchas de los trabajadores portuarios, con los explotados de Dichato demandando vivienda digna, huelgas de los trabajadores de la salud, huelgas bancarias, cacerolazos de las clases medias arruinadas, cientos de miles de estudiantes tomando los colegios, universidades y enfrentando a la policía en grandiosos combates de barricadas, etc. Y además, lo que niegan quienes acusan la ausencia de la clase obrera en el combate, ocultan cínicamente que los estudiantes secundarios de los liceos técnicos profesionales, sector de avanzada del movimiento estudiantil, es parte de la juventud obrera que incluso, bajo la cobertura de las prácticas laborales, trabaja decenas de horas semanales gratis para la patronal.
Además, los reformistas niegan una verdad evidente. Si las cientos y cientos de tomas, paros y movilizaciones estudiantiles permanecen de pie, ha sido gracias al abnegado e incondicional apoyo de cientos de miles de familias obreras y de las clases medias arruinadas, que ven en la lucha de sus hijos la defensa de sus propias condiciones de vida, la defensa de su salario que es carcomido por el robo de la educación, la salud y el transporte privatizados. Eso, incluso, ha impedido también que la burguesía se sienta con suficiente fuerza para largar una ofensiva decisiva y desalojar, con el uso de las fuerzas de orden pinochetistas, todos los colegios y universidades tomados por lo estudiantes.
Entonces, la clase obrera y los explotados pelean codo a codo con sus hijos por la educación gratuita, es decir, por defender el salario de los explotados. Lo hace peleando en las peores condiciones, puesto que la burocracia sindical de la CUT se ha esmerado en impedir que la clase obrera sostenga la lucha por la educación gratuita con sus propias organizaciones de lucha y con sus propios métodos, es decir, con la huelga general, comités de fábricas, etc. Quien divide a la clase obrera de la juventud combativa no es más que la burocracia sindical de la CUT, quien no centraliza las fuerzas de los explotados para ponerlas al servicio de parar la producción.
Así, fue la burocracia sindical y estudiantil la que hizo de todo para impedir la centralización de estos combates. Es que la burguesía comprendió que de profundizarse la unidad obrero estudiantil que comenzaba a forjarse en las calles de Rancagua, Santiago y Antofagasta, todo su dominio y propiedad serían seriamente amenazados. Los capitalistas sintieron terror ante la perspectiva de volver a enfrentarse a una revolución como la de los gloriosos cordones industriales de principios de los ’70. Y fue así, viendo la inminente amenaza a su propiedad y su dominio que se vio en la obligación de entregar ciertas concesiones (miserables, por cierto) a sectores claves del proletariado para impedir que encabezaran esta lucha, mientras aplicó duras derrotas a otros (como El Teniente), y la abrumadora mayoría de los explotados sigue viviendo en la peor de las miserias.
De esta forma, hoy, este proceso de combate revolucionario de las masas explotadas chilenas tiene, por responsabilidad de las direcciones traidoras, al movimiento estudiantil peleando solo.
Así, las direcciones reformistas han sido quienes han logrado, por ahora, dividir la lucha del movimiento estudiantil de la de la clase obrera. Han ocultado cínicamente que la lucha por la educación gratuita no es sólo una demanda del movimiento estudiantil, sino que es una lucha de toda la clase obrera, porque el robo de la educación es un robo al salario obrero; porque la lucha por la educación es en defensa del bolsillo de millones de explotados, a quienes les roban el 50% de su salario en transporte, salud y educación. Ocultan que los cientos de miles de estudiantes secundarios y universitarios que sostienen las tomas y las barricadas, son hijos de la clase obrera y los explotados, y que sus familias sostienen y apoyan incondicionalmente su lucha.
Es que, más allá de las migajas que entregó el gobierno y la burguesía a algunos sectores de la clase obrera, lo cierto es que los explotados seguirán viendo su salario usurpado, mes a mes, por los piratas de la educación. Por eso la clase obrera mantiene su apoyo a la lucha de sus hijos, su propia lucha, y es quien debe encabezar este combate, en defensa de su salario.
Por eso, más fuerte fue nuestro combate cuando planteó, junto al combativo movimiento minero: “¡el cobre de Chile para la educación gratuita y el salario digno!”
Y, justamente, lo que esconden hoy todas las direcciones reformitas del movimiento obrero y estudiantil es lo que la vanguardia ya había comprendido: sin cobre, es decir, sin enfrentar y expropiar al imperialismo, con el proletariado minero a la cabeza, no habrá ni educación gratuita, ni salarios dignos, ni ninguna de nuestras demandas. Es decir, sin tocarles la propiedad a los capitalistas, la educación gratuita será una utopía.
La tarea del momento: unir las filas del movimiento estudiantil con las de la clase obrera. ¡Una sola clase, una sola lucha de toda la clase obrera, la juventud y los explotados!
Los enormes combates de la clase obrera, los estudiantes y los explotados de Chile claman con urgencia por una gran acción independiente de masas, que supere la política de múltiples acciones aisladas que impulsa el reformismo, que ponga en cuestión quién es el verdadero dueño de la nación, si los que producimos todas las riquezas o los parásitos capitalistas. Así le pondremos el pie en el pecho a los explotadores, peleando por todo, y estaremos más cerca de conseguir la educación gratuita para todos los hijos de los explotados. Es que la burguesía sólo dará algo si ve el conjunto de su propiedad y dominio amenazados. En plena crisis mundial, las pandillas burguesas no están dispuestas a entregar nada a las masas, todo lo contrario, están quitando las conquistas de decenas de años de los explotados del mundo. Por eso, a este gobierno y este régimen no se le puede enfrentar separados, sector por sector, sino que hay que preparar una gran ofensiva política de masas. ¡Basta de dividir las filas de los explotados! Por eso, hay que coordinar ya mismo todas las barricadas. Hay que largar ya la ¡HUELGA GENERAL REVOLUCIONARIA para poner en jaque a todos los asesinos del pueblo chileno y entregadores de la nación al imperialismo! ¡Fuera Piñera! ¡Hay que tumbar al gobierno lacayo del imperialismo, represor y asesino de los obreros y la juventud! ¡Abajo el régimen cívico militar de los milicos asesinos pinochetistas, la derecha, la Concertación y el Partido Comunista! ¡Abajo la Constitución pinochetista del ´80! ¡Abajo el TLC!
¡La lucha que hoy libra el aguerrido movimiento estudiantil es una lucha de toda la clase obrera y los explotados! ¡Basta de robo al salario obrero!
¡Educación, salud y vivienda gratuita y aumento de salarios para todos los explotados! ¡Que la crisis la paguen los que la provocaron!
La burguesía ya comienza a chantajear con la crisis económica mundial y el descenso del precio del cobre, que se derrumba en cadena con los precios de los commodities en todo el mundo. Pero son los mismos bancos parásitos que originaron la crisis, y que hacen subir ficticiamente el precio de los commodities los que hoy los hacen bajar. Quieren chantajear a la clase obrera diciendo que no hay plata, que la crisis es profunda, que no se puede repartir ni dar ninguna demanda, alertando sobre el inminente crack chino (destino del 40% de la exportación del cobre chileno) ¡Pero cuando hubo “crecimiento” sólo repartieron represión, miseria y privatizaciones! ¡Que la crisis la paguen los que la provocaron! Nosotros debemos gritar junto a los indignados españoles: ¡Nos han robado mucho y ahora lo queremos todo! ¡Que ellos paguen su crisis! ¡La plata para nuestras demandas está: sobra! ¡Las transnacionales se roban 35.000 millones de dólares anuales del cobre, y sólo pagan 5.000 millones de dólares en impuestos! ¡Basta de robo! ¡Expropiación sin pago del cobre y todos los sectores de la economía!
Ha sido a pesar y en contra de todas las direcciones reformistas, sostenedoras del gobierno de Piñera y el régimen pinochetista, que los explotados comienzan a autoorganizarse, imponiendo la unidad en las calles. La combativa juventud chilena debe acudir ya, no a los lujosos despachos de los ministros pinochetistas en La Moneda, sino, como hiciera la heroica juventud francesa en el mayo del ’68, a las minas, puertos, fábricas y centros de trabajo para hacer un llamado urgente a todo el movimiento obrero a librar juntos la pelea no sólo por la educación, sino también por derrotar la esclavizadora Ley de Subcontratación, por poner fin a los sueldos de hambre y terminar con el flagelo de la cesantía.
¡Hay que paralizar las minas, fábricas, puertos y todo el país! ¡Hay que atacar las ganancias y la propiedad privada de los explotadores para pegarles donde más les duele! ¡Hay que sublevar a toda la clase obrera para alzarla como caudillo de los explotados en su lucha e imponer la ruptura de todas las organizaciones obreras y estudiantiles con la burguesía, su régimen y su gobierno! ¡El robo de la educación es un robo al salario obrero! Los que se toman los colegios y universidades, los que pierden el año escolar, los que se defienden de la represión asesina con combates de barricadas… ¡Son los hijos de la clase obrera! Por eso: ¡La clase obrera debe encabezar este histórico y decisivo combate!
¡Que las tomas de colegios y universidades se conviertan en centros para reagrupar las filas obreras! ¡Que los 3.200 mineros despedidos de Rancagua peleen por su reincorporación inmediata junto al movimiento estudiantil! ¡Que toda huelga obrera tenga en sus demandas la educación gratuita para sus hijos! ¡Esa es la mejor defensa del salario!
¡Los que luchamos somos los que decidimos!
¡Por la democracia directa del movimiento obrero y estudiantil!
Como ya lo han mocionado amplios sectores en colegios y universidades: ¡Fuera el PC y la Concertación de nuestras organizaciones! ¡Los pacos de rojo son los peligrosos!
Ellos nos quieren someter a “plebiscitos” y trampas “democráticas. ¡Basta! ¡El parlamento burgués es enemigo de la clase obrera y la juventud explotada!¡Abajo el parlamento pinochetista de los senadores designados! ¡Hay que poner en pie un parlamento obrero: CONGRESO NACIONAL DE DELEGADOS DE BASE DEL MOVIMIENTO MINERO, Y TODA LA CLASE OBRERA, JUNTO A LOS ESTUDIANTES COMBATIVOS Y EL CAMPESINADO POBRE con un delegado cada 100 trabajadores y cada 500 estudiantes, para recuperar las organizaciones de lucha del movimiento obrero y la juventud, sin “pacos rojos” ni direcciones colaboracionistas!
Para fortalecer la lucha por un congreso nacional obrero: ¡Por Comités de fábrica en cada mina, industria y centro de trabajo para, junto a comités de desocupados, refundar el movimiento obrero chileno de abajo hacia arriba! ¡Por comités de lucha que por ciudad, región y nacionalmente agrupen a los sectores en conflicto!
Hoy más que nunca es necesario recuperar la CUT y todas las organizaciones de la clase obrera, los estudiantes y los campesinos pobres para ponerlas al servicio de este histórico combate y organizar ya el plan de lucha.
¡Basta de sostener a la burocracia sindical de la CUT y estudiantil de la Confech que entregan nuestra lucha a cambio de nuevos maquillajes al régimen! ¡Fuera las manos del estado de nuestras organizaciones! ¡Todas las organizaciones que hablan en nombre de la clase obrera tienen que romper con sus políticas de presión sobre el gobierno de Piñera, que sólo entrega represión, cárcel, despidos, hambre y miseria! ¡Que la dirección de todas las organizaciones obreras y estudiantiles como SITECO y el sindicalismo independiente, la ACES, las federaciones y bloques universitarios disidentes de la dirección de la CONFECH, y las corrientes que se revindican de la clase obrera y enemigas del gobierno, como el FEL, el FPMR, el MIR, el PTR (ex Clase contra Clase) rompan su subordinación al régimen y pongan todas sus fuerzas e influencia a disposición de estas tareas!
Para conquistar todas nuestras demandas: ¡Hay que expropiar a los expropiadores! ¡Renacionalización del cobre, sin indemnización y bajo control de los trabajadores! ¡Expropiación sin pago y bajo control obrero de toda la banca usurera, las transnacionales y la patronal esclavista!
La clase obrera y la juventud, cuando comenzaba este proceso, a mediados de mayo, planteó con claridad que para conseguir hasta la más mínima de sus demandas, era necesario unir sus filas, e intentó hacerlo, muy perspicazmente, levantando la demanda de la renacionalización del cobre bajo control de los trabajadores. Es que, en medio de la profunda crisis social que atraviesa, no solo a Chile sino a todo el mundo, solo es posible, incluso, obligar a los capitalistas a entregar las más mínimas concesiones, quebrando su voluntad, cuestión que puede lograrse a condición de largar una ofensiva revolucionaria. Y esto podrá conquistarse volviendo a levantar la demanda que tendió a unificar a los mineros, a toda la clase obrera y, en general, a todos los explotados, para conseguir hasta la más mínima de sus demandas.
¡Hay que volver a pelear por el cobre! Ahí está la plata para conquistar la educación pública, gratuita y laica en todos los niveles, el salario nivelado según el costo de la vida ¡700 mil pesos YA! ¡Abajo la ley de subcontratación! ¡Todos a planta permanente! ¡Todas las manos disponibles a producir: reducción de la jornada laboral a seis horas para imponer un turno más en todas las fábricas y centros de trabajo! ¡Reincorporación incondicional de los obreros despedidos en huelga y los estudiantes expulsados de sus colegios y universidades! ¡Abajo el código laboral! ¡Transporte público y gratuito para todos! ¡Por un Plan de obras públicas bajo el control de las organizaciones obreras para reconstruir Chile con la más alta tecnología antisísmica y darle la vivienda a todos los explotados! ¡Tierra para los campesinos pobres! ¡Desconocimiento de la deuda de todas las familias chilenas con la banca usurera! ¡No al pago de la deuda externa! ¡Expropiación de los banqueros imperialistas y establecimiento de una banca estatal única bajo control de los trabajadores! ¡Basta del robo de las AFPs a las jubilaciones de los trabajadores: Expropiación sin pago de todos los bancos que roban nuestras jubilaciones!
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Las direcciones reformistas: nuevamente intentan imponer la trampa de la “vía pacífica”, esta vez para conseguir la educación gratuita
Una Santa Alianza se ha conformado para sostener al gobierno de Piñera e impedir que la lucha en Chile avance para triunfar. El Foro Social Mundial (FSM), mediante el PC y la Concertación, actúan como rompehuelgas del movimiento estudiantil y lo dividen de la clase obrera, que ha dado muestras de enorme disposición al combate. Desde Cuba, el castrismo ha dado órdenes expresas al PC para impedir que en Chile se abra la segunda revolución chilena. La vanguardia esto lo sabe y ya lo grita en las marchas: “¡La Jota, la Jota, la Jota al paredón…educación gratuita sin negociación!”
Pero el ala izquierda del FSM, el ELAC, ha venido también a contener lo que, por izquierda se le escapa al PC, y sostener al gobierno de Piñera. Todos juntos han generado la ilusión en las masas de que esté gobierno antiobrero, es presionable, y que puede dar concesiones democráticas a las masas, cuando la crisis mundial ha demostrado que los parásitos capitalistas, lejos de dar reformas, atacan las conquistas y las condiciones de vida de los explotados en todo el mundo. Dicen que sin que la clase obrera amenace la propiedad y dominio de los capitalistas, sin una huelga general revolucionaria, la burguesía dará pacíficamente la educación gratuita. |
Las organizaciones obreras y estudiantiles deben encabezar la lucha por liberar a nuestros presos de las garras de la represión pinochetista:
¡Libertad inmediata e incondicional a los presos políticos!
¡Tribunales obreros y populares para juzgar y castigar a los asesinos de Manuel Gutiérrez y a los milicos y políticos patronales asesinos de ayer y de hoy! ¡Abajo la justicia militar! ¡Disolución inmediata de los pacos asesinos y de todas las fuerzas represoras del régimen: reemplacémoslas por comités de autodefensa y vigilancia obreros y populares! ¡Libertad incondicional e inmediata a todos los presos políticos y desprocesamiento de todos los luchadores perseguidos! ¡Abajo la pinochetista ley antiterrorista! ¡Libertad inmediata e incondicional a todos los presos políticos!
Todo obrero, cesante, joven y estudiante tiene el más absoluto derecho a rebelarse contra el yugo capitalista y defenderse de los pacos asesinos y atacar la propiedad de los capitalistas. La burguesía ya comienza a organizar bandas semi-fascistas para atacar de noche los colegios en toma y amedrentar a los luchadores: ¡Comités de autodefensa de todas las organizaciones obreras, estudiantiles y campesinas para defendernos de la represión de los pacos y milicos asesinos!
Este régimen asesino, lacayo del imperialismo, no dudará, si es necesario, en sacar a la calle a los milicos como en el ´73 para aplastar en un baño de sangre la revolución. Ante eso, como lo han hecho las masas revolucionarias en Egipto y en Libia, hay que llamar a la base del ejército, obreros y campesinos bajo armas, a romper con la oficialidad asesina y pasarse a las filas de los explotados. ¡Hay que destruir a la casta de oficiales pinochetistas que se roban el 10% del cobre! ¡Abajo el presupuesto militar y la ley reservada del cobre! La oficialidad del ejército no dudará, si es que ve que la propiedad de sus amos imperialistas es amenazada por la lucha de las masas, en ahogar el combate en un baño de sangre. ¡Hay que impedirlo! ¡Hay que poner en pie comités de soldados rasos que combatan junto a la clase obrera y el pueblo chileno!
Sobre los escombros del régimen pinochetista pro imperialista y la casta de oficiales asesina hay que imponer un:
¡Gobierno provisional revolucionario de los obreros y el campesinado pobre, basado en las organizaciones de combate de los explotados, para expulsar y expropiar al imperialismo que saquea y desangra la nación! ¡Por un Chile obrero y socialista sin transnacionales ni bancos imperialistas, sin políticos patronales de la Concertación y el pinochetismo y sin generales genocidas! ¡Por un Chile de los Cordones Industriales triunfantes!
PARTIDO OBRERO INTERNACIONALISTA - CUARTA INTERNACIONAL (POI-CI)
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