27 de febrero de 2018 Bajo las órdenes de las petroleras imperialistas, las empresas forestales y los terratenientes, los gobiernos de Bachelet y Macri siguen incrementando coordinadamente la represión, persecución y encarcelamiento en contra las comunidades mapuches que luchan por la tierra ¡Basta de ataques a las comunidades mapuche en Chile y Argentina! ¡Libertad a Facundo Jones Huala en Argentina! ¡No a su extradición a Chile! ¡Libertad a Celestino Córdova, en huelga de hambre y liquida, y a los 26 presos políticos mapuche encarcelados por la justicia chilena! En estos últimos días de febrero los estados argentino y chileno han comenzado a través de sus tribunales, una verdadera inquisición contra varios comuneros mapuche que representan la justa lucha por tierra de las comunidades a uno y al otro lado de la frontera. Esta persecución que se coordinaba entre Bachelet y Macri en junio de 2017 en la Casa de la Moneda se acentúa día a día. Los que les dictaron la orden son conocidos: las petroleras imperialistas que explotan Vaca Muerta en Argentina, como Chevron, la Royal Dutch Shell, Exxon Mobil; las empresas forestales en Chile, como Mininco, Arauco, Bosques Cautin, Magasa, entre otras, y los terratenientes de Temuco (sur de Chile) como los Matte, Angelini, Luchsinger, etc., y de la Patagonia argentina. Ninguno quiere que se les toque ni un centímetro de su propiedad. Desde el lunes 26 en los tribunales de Temuco se dio inicio al juicio nuevamente del  “Caso Luchsinger-Mackay” el cual en el mes de noviembre ya había sido resuelto. E inclusive los 11 mapuche acusados por estos malditos tribunales habían sido absueltos de todos los cargos que estos les inculpaban por falta de pruebas. Iniciada la reapertura del caso, Celestino Córdova (el único sentenciado de este caso a 18 años de cárcel) encabeza desde el pasado 13 de Enero una dura huelga de hambre y líquida en lucha por conseguir su libertad y reestablecer su derecho a practicar su cultura. Sumado a lo anterior hoy martes 27, en los mismos tribunales de Temuco, se da inicio al juicio del denominado “Caso Iglesias” el cual acusa a 4 comuneros (Ariel, Benito y Pablo Trangol, y Alfredo Trancal) de la quema de un iglesia evangélica en la región de la Araucanía. Este hecho ocurrió en el transcurso del año 2016, inclusive estos comuneros en el año 2017 también encabezaron una dura huelga de hambre la cual llego a cumplir 114 días, luchando en contra de que se les juzgara con la Ley Antiterrorista. Esta acción de lucha repercutió en sus estados de salud, pero por sobre todo en el de Ariel Trangol, que luego de finalizada la huelga y hasta el día de hoy no puede reestablecer su salud a la normalidad. Ha tenido problemas tanto físicos como mentales, sufriendo un deterioro en su sistema digestivo, que no le permite comer alimentos sólidos. En cuanto a salud mental, la situación del compañero es peor, ya que hace unos meses intentó quitarse la vida producto de las pésimas condiciones que padece en las mazmorras que administra el gobierno de la carcelera Bachelet. En paralelo a este juicio, también se desarrolla la continuidad del “Caso Huracán”, el cual comenzó el 23 de septiembre de 2017 con la detención de 8 dirigentes de la comunidades mapuche de Chile acusados por asociación ilícita y la quema de camiones en la región de la Araucanía, quedando al descubierto que las pruebas presentadas eran falsas o como dijo el tribunal “insuficientes”, a fines de Octubre salen en libertad y para el 9 de febrero son sobreseídos de la causa. No obstante el gobierno de Bachelet, pidió la apelación ante esta acción y hoy 27 de febrero, se les han reabierto esta maldita causa a los compañeros Héctor Llaitul, Héctor Llaitul Pezoa, Fidel Trañamil, David Cid Aedo, Claudio Leiva Rivera, Martín Curiche Cariqueo, Jaime Huenchullán Cayul y Rodrigo Huenchullán Cayul. Y como si fuera poco para el miércoles 28, en los tribunales de Bariloche (Argentina) se dará inicio al segundo juicio en contra de Facundo Jones Huala para su extradición a Chile y que sea juzgado por los jueces de Pinochet de la quema de un predio en las cercanías de Valdivia en el año 2013. Pero esta es sólo una excusa para justificar la persecución del gobierno de Macri a este dirigente por llamar a luchar contra las transnacionales imperialistas que saquean la Patagonia. Como parte del hostigamiento del gobierno de Macri a las familias mapuche fueron asesinados Santiago Maldonado y Rafael Nahuel.  ¡Basta! Es momento de que los trabajadores y explotados de Chile y Argentina se unan en una lucha común, todos los organismos de DD.HH, organizaciones obreras, sindicales, estudiantiles y de lucha de los explotados. ¡Libertad inmediata a Facundo Jones Huala y todos los presos políticos argentinos! ¡Libertad para Celestino Córdova, Ariel, Benito y Pablo Trangol, y Alfredo Trancal  y todos los presos políticos chilenos! ¡Desprocesamiento inmediato de los 8 dirigentes mapuche acusados del “Caso Huracán” y los acusados del “Caso Luchsinger-Mackay” y de todos los luchadores obreros y populares de todo el continente americano! ¡Juicio y castigo para los asesinos de  Rafael Nahuel, Santiago Maldonado, Matías Catrileo, Alex Lemun y todos nuestros mártires por luchar! ¡Absolución de los petroleros de Las Heras! ¡Libertad a todos los presos políticos del mundo!