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Venezuela - 17/08/15

La estafa de la “Revolución Bolivariana”: Millones de dólares para el FMI y Wall Street y balas para el pueblo hambreado.

¡LAS MASAS IRRUMPEN BUSCANDO EL PAN QUE EL CHAVISMO Y LA MUD LES NIEGAN!

La situación de los trabajadores y el pueblo pobre en Venezuela es desesperante, con 80% de ellos devengando salario mínimo de 7.420 bolívares que -al tipo de cambio real de 690 Bs por dólar- equivale a miserables 11 dólares por mes, con 60% de desabastecimiento de alimentos, con 48% de pobreza absoluta, sin salud pública ni medicamentos y la inflación anual más alta del mundo –por ahora más de 160%- cuando Venezuela es la primera reserva mundial petróleo.El chavismo le ofreció el paraíso a las masas y lo que hizo fue meterlas en un infierno. Son intolerables los niveles de barbarie a los que nos somete esta burguesía. Por un lado Maduro, como agente directo de la banca imperialista, aplica el plan de ajuste contra las masas, mientras que por otro lado el sector de la burguesía organizado en la MUD y liderados por Caprilessostienen al gobierno y a las instituciones del régimen de la Constitución Bolivariana para que Maduro pueda llevar adelante este ataque. De esta manera, la burguesía de la MUD se queda como reserva para terminar de aplicar el plan si es que Maduro no lo logra llevarlo hasta el final, en esto estriba el pacto Maduro-Capriles, sacando a las masas de la pequeña burguesía de las calles, cuando las bases de Maduro enfrentan el plan, desviado el foco hacia las elecciones y marchas pacíficas a la vez que López queda fortalecido como supuesta víctima del régimen para hacerlo pasar como mártir en caso de que Capriles quede como limón exprimido.¡Ni Capriles, ni López, ni la Boliburguesía! ¡Son todos representantes del FMI!

Ya no se aguanta el hambre, la desocupación, los salarios de miseria y ahora la represión. Más de 60 saqueos y 70 intentos fallidos no son vandalismo, es el pueblo usando su legítimo derecho a la supervivencia. Como consecuencia de esta situación, el viernes 31 de julio los trabajadores y el pueblo pobre de San Félix, Ciudad Guayana, protagonizaron una revuelta en la que, de a miles, salieron a las calles a buscar el pan que les es negado a sus hijos día a día en los mercados y centros de abastecimiento. En medio de este intento, fue asesinado por las balas de la Guardia Nacional Bolivariana el joven obrero albañil Gustavo Patíñez, de 21 años, dejando huérfana a una pequeña hija de 4 meses. También hubo casi un centenar de heridos y decenasde detenidos, como ha sucedido en otras regiones. Ellos no son de la burguesía, ni agenciados por la derecha y el imperialismo como los calumnia Maduro con el mismo discurso usado por su amigo Al Assad para justificar la masacre en Siria.¡No mientan más! Ellos son el pueblo que está hambriento mientras el gobierno Bolivariano se prepara para pagar 11 mil millones de dólares en intereses de la fraudulenta deuda externa que ya está rozando los 200mil millones de dólares y que ya entregó el petróleo a las transnacionales imperialistas con sus empresas mixtas.
Las masas venezolanas ya enfrentaron un plan semejante al de Maduro en 1989 con el famoso Caracazo, marcando el inicio de una gran lucha antiimperialista que continuó con la derrota del Golpe de la Oligarquía y el Imperialismo en 2002. Sobre esta lucha antiimperialista se montó la burguesía Chavista para expropiarla, regatear unamayor tajada de la renta y acabar como agentes directos del imperialismoreprimiendo y matando en las calles a los mismos trabajadores que le apoyaron.Los oficiales asesinos del Caracazo, hoy son los mismos generales que ocupan cargos y posiciones clave en el gobierno. ¡No más garrote y tiros contra las masas hambreadas para cumplirle los planes al imperialismo! ¡Basta de represión de la policía, las Fuerzas Armadas y sus bandas paramilitares!
¡LA REBELIÓN DE LOS ESCLAVOS HAMBRIENTOS NO ES DELITO, ES JUSTICIA!

Liga Comunista de los Trabajadores de Venezuela


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