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20 de octubre de 2015
Centenares de miles de trabajadores y explotados que en el 2001 rompieron con los partidos patronales ya han votado al FIT, ahora millones deben hacerlo, pero si no luchamos no podremos conquistar ninguna de nuestras demandas. ¡Es hora que el FIT vote organizar una gran lucha!
Con el circo electoral, ya nos impusieron el ajuste con el pacto Cristina-Calo de 27,8% de tope salarial, y la entrega de la lucha y la huelga general que hizo Moyano y demás burocracia sindical socia de Macri y Massa Nos entretuvieron desde los meses de junio y julio con el circo electoral, mientras pasaba el robo al salario, 400.000 despidos, y el ataque de cierres de fábricas y persecución de los luchadores obreros, que por miles están procesados por la infame casta de jueces agente de los banqueros y la patronal. Lamentablemente, la dirección del FIT se ha prestado a este engaño. Denuncia que "el ajuste va a venir" cuando éste ya pasó, y se preparan nuevos ajustes y nuevos ataques, que no serán pacíficos. La crisis económica mundial ya está aquí. Los políticos patronales ya sueñan con mucha más policía, gendarmes e inclusive el ejército en las calles. Así se preparan ellos. La base del FIT, sus obreros combativos vienen luchando aguerridamente. Sin embargo, venimos de perder comisiones internas, de los que fueran los sectores más combativos de la clase obrera como en Kraft, Lear, Valeo y de duras derrotas y traiciones de la burocracia sindical como en Paty, docentes, Kronberg. Desde hace meses, la dirección del FIT viene diciendo que viene el ajuste... y el ajuste pasó. Nos prometen leyes para conseguir el salario al nivel de la canasta familiar... y los aceiteros conquistaron, en mayo/junio, 36% de aumento en una sola cuota, y se aproximaron a los $15.000 de la canasta básica. Ni con leyes, ni presionando al parlamento y ministerios de los explotadores y verdugos del pueblo, los trabajadores conquistamos nuestras demandas. Había que llamar a pelear junto y como los aceiteros que estuvieron 30 días en huelga, con piquetes, y cortando todos los puertos del aparato agroindustrial sojero de Argentina. ¿Qué no hubiéramos conseguido luchando como y junto a los aceiteros? El 9 de junio la, clase obrera, en repudio al pacto Cristina-Calo, le impuso a la burocracia sindical un paro general. Pero ésta enterró el camino a la huelga general de 36 horas. Moyano, Michelli y Barrionuevo, nuevamente se montaron a la cabeza de la clase obrera para desorganizar sus fuerzas y entregárselas a los políticos patronales y el gobierno. Estaba planteado centralizar las fuerzas de los trabajadores, coordinar con aceiteros, presentarle batalla a la burocracia sindical, enfrentar el ajuste y combatir por la huelga general de 36 horas para derrotar el ataque de los capitalistas y que éstos paguen la crisis, reagrupando a las filas de la clase obrera en un gran congreso obrero. Esta cuestión decisiva no estuvo en la agenda electoral del FIT y sus candidatos durante todo el año. La tarea que estaba planteada, para ser de izquierda consecuentemente, era utilizar la tribuna electoral como trinchera en el territorio del enemigo para organizar y generalizar la lucha de la clase obrera que la burocracia sindical entregó. Los trabajadores de la 60 y de Cresta Roja demostraron que aún aislados sobraban condiciones para duras luchas y poder torcerle el brazo al gobierno. Pero el FIT y sus partidos de izquierda se dedicaron a dividir el frente de lucha de los trabajadores. Con las PASO se disputaron cargos electorales, cuando ya habían disuelto todo intento de reagrupamiento de la vanguardia como el Encuentro de Atlanta, dejando a todos los dirigentes sindicales del FIT como candidatos individuales en sus listas. Se desorganizó el frente único para la lucha. El gobierno y la burocracia quedaron con las manos libres. Ya hace rato que por la Panamericana pasan los autos y no hay ningún corte. Ahora, todo se resuelve en los debates en televisión. Y se nos promete que con votos y proyectos de leyes se fortalece la lucha de los trabajadores. Esto no es así. Días antes de las elecciones honramos la memoria de Mariano Ferreyra. Acaba de morir, luego de una brutal represión por reclamar por una vivienda digna, el compañero Ángel Verón, un luchador de Chaco. En este país no hubo ataque ni ajuste a los trabajadores sin Fuentealba, sin Kostequi y Santillán asesinados. El FIT anuncia un gran ajuste, pero no prepara a los trabajadores para un gran combate para responder al brutal ataque de los capitalistas y sus partidos. Por ello, nuestro voto al FIT es crítico. Su cretinismo parlamentarista y pacifista no prepara a los trabajadores para la guerra que ya le declararon los explotadores.
¡Ni con el voto, ni en el parlamento burgués! La lucha de los trabajadores se fortalece en las calles coordinando sus fuerzas y sus luchas. ¿Las elecciones? Deben ser una tribuna al servicio de organizar y preparar la lucha Con el circo electoral, la patronal le provocó más de un 30% de robo al salario obrero solamente en este año. La devaluación ya es un hecho. Ya la pagamos los trabajadores, mientras millones de compañeros viven con trabajo en negro, precarización laboral y la limosna de los planes trabajar. Mientras tanto, la burguesía, con las elecciones, se apresta a legitimar todas sus instituciones, su parlamento, sus jueces, la presidencia con poderes monárquicos. Si luego de 12 años de gobierno de los Kirchner se impuso semejante ataque a los trabajadores, ¿qué no tendrán preparado los capitalistas para recuperar aún más sus ganancias y terminar de entregar la nación al imperialismo? Una nueva ronda de la crisis económica mundial ya está aquí. Brasil ya está en ruinas, saqueado y en recesión. Las bolsas chinas ya han estallado. El estancamiento ya reina allí, en esa superpotencia de cartón, que sólo sirve para esclavizar en maquilas a los trabajadores, a cuenta de las transnacionales. En estas elecciones, los capitalistas y sus partidos vendieron humo. La izquierda reformista se hizo la distraída. No enfrentó la trampa electoral. Los trabajadores fuimos sacados de la lucha y de las calles. Crearon las peores condiciones para enfrentar el ajuste de Massa, Scioli y Macri... ah y de la "progresista" de la Margarita, no menos gorila y proimperialista que los primeros. Por eso, desde Democracia Obrera, llamamos a votar al FIT críticamente. Porque los trabajadores votamos a partidos y frentes que se dicen y se proclaman de los trabajadores, pero no lo hacemos ni por su programa ni porque éste fuera capaz de organizar la lucha contra el ajuste. Lo votamos, pero críticamente porque llama a despertar ilusiones, como toda izquierda reformista, en los proyectos de leyes que prometen sacar, nada más y nada menos, de esta democracia para ricos y de este parlamento que es una verdadera escribanía de Wall Street. Llamamos a votar críticamente al FIT. Allí miles de obreros buscan una salida a su crisis. Pero a nuestros compañeros les decimos la verdad: hay que confiar en nuestras propias fuerzas, en nuestra unidad y en nuestra lucha. Hay que pelear como en aceiteros. Así se conquista el salario por la canasta básica. En ese camino derrotaremos, como lo hicieron ellos, a los traidores de la burocracia sindical. Llamamos a votar críticamente al FIT porque le decimos a la clase obrera que no hay que votar a los candidatos de los políticos patronales. Pero que hay que tomar en nuestras manos la unidad de los de abajo, de los que luchan, porque hay que reabrir el camino a la huelga general. Por más bancas de izquierda que hayan en el parlamento, si éstas no están al servicio de preparar una contraofensiva de la clase obrera y las masas explotadas; ni al servicio de reabrir el camino a la HUELGA GENERAL, la izquierda en el parlamento será una decoración folclórica de esa cueva de bandidos, que no es otra cosa que una escribanía de Wall Street y de la patronal esclavista. Una tarea sigue pendiente, y ésta se conseguirá en las calles, con la unidad de los que luchan. Esta es una deuda pendiente del FIT con los trabajadores, que por centenares de miles y por qué no millones, lo votaremos contra los políticos patronales. Su deuda pendiente es volver a unir a los que luchan -que abiertamente dividieron en actos, encuentros distintos, en peleas de los aparatos por las bancas- para centralizar las fuerzas de lo más aguerrido de la clase obrera, enfrentar a la burocracia sindical y para PREPARAR Y ORGANIZAR LA HUELGA GENERAL, que lamentablemente los candidatos del FIT silenciaron durante toda la campaña electoral. Enfrentar a Macri, Massa y Scioli es llamar a derrotar a los traidores de la burocracia sindical y sus pandillas, que garantizan someter a los trabajadores a sus verdugos, los candidatos de los capitalistas. Hay que votar al FIT el 25 de octubre. Pero con el voto no se para el ataque de los explotadores. Se lo hace desde las bases, desde las asambleas, desde las luchas....
Con el circo electoral, durante todo el 2015 los políticos patronales redoblaron el saqueo imperialista del país Se pagaron miles de millones de dólares de la deuda externa. Toda la burguesía festejaba los 7 mil millones de dólares del pago del Boden 2015 en el segundo semestre de este año. Ya le habían liquidado otro tanto en el primer semestre a los banqueros, que se robaron el ahorro y el salario de los trabajadores y el pueblo en el 2001. La burguesía discute si le paga o no a los fondos buitres centavos, mientras les paga miles de millones de dólares a los grandes banqueros y el imperialismo que se están cobrando 225 mil millones de dólares de la fraudulenta deuda externa argentina. Y encima, los caraduras hablan de "parar la inflación": si ésta no es más que el saqueo de los miles de millones de dólares del banco central por parte del imperialismo; los más de 6 mil millones de dólares de utilidades y royalties que retiran las transnacionales y los millones de dólares que, en negro, los capitalistas fugan del país. Del Caño y los candidatos del FIT llaman a no pagar a los fondos buitres, mientras se han negado a levantar sistemáticamente la lucha por el desconocimiento inmediato de toda la fraudulenta deuda externa y expropiar sin pago a todos los banqueros y capitalistas que saquearon la nación y la entregaron al imperialismo. Hablan de "nacionalizaciones" en general, como lo hizo Del Caño en el debate presidencial, pero sin aclarar que ésta es sin pago y a cuenta de todo lo que se robaron los imperialistas y los saqueadores de la nación argentina y del bolsillo de sus trabajadores. El programa de "nacionalizaciones" en general puede caer bien al sentido común nacionalista burgués. Pero eso ya lo hicieron algunos gobiernos burgueses, que indemnizaron a los capitalistas en crisis, financiándoles su bancarrota. Es el programa burgués de Pino Solanas o el de Chávez, que en Venezuela nacionalizó Sidor por el doble de su valor en 4.000 millones de dólares, mientras la Kirchner le entregó 5.000 millones de dólares a la Repsol, luego de que ésta se llevara en los '90 más de 220 mil millones de dólares de la renta petrolera argentina. ¡Nacionalización sin pago! ¡Expropiación de los expropiadores del pueblo! Sin la ruptura con el imperialismo y la expropiación sin pago de todos sus bienes; sin llamar a romper con los pactos colonizadores de la OEA, la ONU, el TIAR, el MERCOSUR y la estafa del UNASUR y demás tapaderas del saqueo imperialista de América Latina, impuesto por los impostores de la "revolución bolivariana" no habrá ni liberación nacional del imperialismo ni posibilidad de terminar con el saqueo y conseguir la más mínima de las demandas de la clase obrera. PARA QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS CAPITALISTAS, HAY QUE ROMPER CON EL IMPERIALISMO Y RECUPERAR LO QUE LAS TRANSNACIONALES Y LOS BANQUEROS LE HAN ROBADO AL PAÍS Y A LOS TRABAJADORES. Del Caño, sólo se ha animado a plantear que "luchaba por una Cuba, pero con democracia"... Pues ya ha llegado tarde. Ya no queda socialismo en Cuba, ni mucho menos democracia. Allí está la bandera yanqui, las maquilas imperialistas y el FIT lo ha callado. Por eso llamamos a votar al FIT críticamente, son socialistas vergonzantes. Defienden no tan solo el socialismo en un solo país como lo hacía Stalin, sino tan solo en una isla... y ahí están las consecuencias.
Los políticos del FIT, hace rato han abandonado la lucha por el socialismo Llamamos a votar al FIT por ser partidos de izquierda y no de los capitalistas. Pero lo hacemos críticamente, porque no coincidimos para nada con su programa reformista. Es que hay que romper con el imperialismo y terminar con los grandes capitalistas para que la clase obrera pueda comer. Esta no es una tarea que se vaya a resolver con proyectos de ley en el parlamento testaferro de Wall Street ni con jueces de los banqueros... Ellos tienen, si algo falla, a la casta de oficiales de las fuerzas armadas, todos de la promoción de Milani. Todos represores, asesinos y oficiales de Videla, Massera y Agosti. Ahora, los generales de la "democracia" de los Kirchner, los Scioli, Massa, Macri y la "progre" de la Margarita. Ya hablan de recurrir a ellos. Es que temen un nuevo 2001. Para eso se preparan. Del Caño y los candidatos de izquierda han planteado que el "socialismo es un salto al vacío" (Altamira, Clarín 16 de mayo de 2015). Hace rato que el PTS ha sacado de su vocabulario la lucha y el combate por el socialismo... Del Caño ha llamado y llama a luchar por una "democracia generosa, sin casta política, con elección de los jueces...y por un nuevo régimen más democrático". Llaman a mejorar esta podrida democracia para ricos, basada en la archirreaccionaria constitución de los gorilas de 1853. Esto es una falacia de la izquierda socialdemócrata. Un gobierno de los trabajadores con jueces electos, con "democracia generosa", con generales videlistas sólo administraría los negocios de los capitalistas como Syriza en Grecia, la Bachelet en Chile, o el PT de Lula en Brasil... el partido de los banqueros y el imperialismo. Sin revolución socialista no hay ni gobierno de los trabajadores, ni democracia generosa, ni derrota de las castas políticas, ni ningún verso, que sólo está para sacar a la clase obrera de la senda de la revolución socialista. El FIT ha jugado a las escondidas, nada más y nada menos, que con el estado de los opresores. Los revolucionarios insistimos en que no hay ninguna posibilidad de liberar a la nación del saqueo imperialista, de recuperar las tierras y la renta agraria, gasífera, petrolífera y minera de la Argentina sin expropiar sin pago a los ladrones del pueblo y la nación. Sin conquistar un gobierno revolucionario sobre la ruina de este estado semicolonial miserable, saqueado mil veces por el imperialismo. En el debate presidencial, de forma lamentable, cuando millones de trabajadores y explotados lo escuchaban, Del Caño calló y silenció que hay 7 mil procesados por luchar en Argentina y obreros de Las Heras condenados a cadena perpetua por luchar contra el impuesto al salario y contra la flexibilización laboral. Un silencio inadmisible. Es como ir a un debate presidencial con los mártires de Chicago prestos a ir a la horca y callarlo. Es indigno de un socialista. Es silenciarlo ante sus verdugos... y al gorila de Massa no se le caía la cara de vergüenza cuando hablaba y habla de llevar al ejército y su casta de oficiales asesina de la dictadura a reprimir a la clase obrera y sus luchas, como lo harán y lo hicieron siempre. Desde Democracia Obrera llamamos a votar al FIT, y lo hacemos críticamente. Lo hacemos diciéndole a nuestros compañeros que si la clase obrera no toma el poder, que sin llevar al triunfo las revoluciones inconclusas que se abrieron con el Cordobazo en el '69 y en el 2001, no habrá ninguna posibilidad de liberar a la nación del imperialismo ni terminar con la "casta" de políticos patronales, y con la verdadera casta contrarrevolucionaria que son los jueces y generales asesinos emergidos de la dictadura militar, mimados por todos los partidos burgueses que hoy se presentan a las elecciones. Llamamos a votar críticamente por el FIT y a multiplicar la campaña por la absolución de los compañeros de Las Heras. Ellos están libres por la lucha y la solidaridad de los trabajadores. Un ataque y un ajuste abierto contra los trabajadores significará el peligro de su detención inmediata, puesto que son rehenes de los explotadores para que no peleemos por nuestros derechos cuando nos atacan.
El FIT ha abandonado el internacionalismo proletario. ¡Paso al internacionalismo militante de la clase obrera! Con el circo electoral le quieren esconder a la clase obrera argentina que sin luchar junto a sus hermanos, los trabajadores de América Latina, el Magreb y Medio Oriente y de EEUU, Grecia y todo el Mundo se puede liberar a sí misma. MENTIRA. Los aliados de la clase obrera argentina no son ni Scioli, ni Massa, ni Macri, ni Margarita ni el parlamento de los ricos ni el régimen infame de los opresores. Los aliados de la clase obrera argentina son los que combaten en las calles de Chile por la educación gratuita, como la juventud que combate en Grecia contra la izquierda de Syriza, los “comerciantes de ilusiones” agentes de la Merkel y Maastricht. La mayoría absoluta del pueblo argentino ve la masacre y el genocidio al pueblo sirio y el apoyo de los Kirchner y el gobierno a la Syriza de la Merkel y la UE, y el apoyo a los hermanos Castro que han dicho que el socialismo ya no es posible ni en Cuba, mientras se abrazaban con el Papa y Obama. No se puede hablar de enfrentar el ajuste y no decirle a la clase obrera que, por sublevarse contra los planes del FMI en Ucrania, a los mineros del Donbass, la burguesía le envío a las bandas fascistas de Kiev a cuestas del imperialismo. Es inconcebible que haya dirigentes de la clase obrera que afirman que se viene el ajuste mientras llenan de ilusiones y pacifismo a los explotados, que son quienes sufren en carne propia los ataques de los capitalistas. El imperialismo, la burguesía, los capitalistas y sus partidos en todo el mundo aplastan a su clase obrera, la intimidan y la aterrorizan con las masacres y escarmientos que le dan a los explotados cuando salen a pelear. Y los engañan, les mienten y los desmoralizan cuando los traidores entregan las banderas de lucha por el socialismo y plantan la bandera yanqui, como hacen los hermanos Castro en La Habana. La burguesía, los capitalistas y sus partidos hincan sus dientes y sus garras sometiendo a la clase obrera, aterrorizándola con las condiciones internacionales sobre las que se van a montar para profundizar el ataque... y el FIT se hace el distraído y juega a las escondidas con la gloriosa resistencia de las masas explotadas del Magreb y Medio Oriente, con los combates de la clase obrera norteamericana, la más grande aliada de los obreros argentinos, con los que debemos luchar tomando su demanda de 15 dólares la hora para todos. Llamamos a votar al FIT contra los políticos y partidos patronales. Pero le decimos a los trabajadores que sus aliados y su fuerza no está en este parlamento podrido, escribanía del imperialismo ni en los partidos aliados al imperialismo, masacrador de los pueblos del mundo. Que la solución a la crisis de la clase obrera no está ni en la burocracia sindical argentina ni en la burocracia sindical del PT de Brasil, ni de Cuba -que ya hace rato se entrego al imperialismo-. La fuerza de los trabajadores y sus aliados son la clase obrera mundial, con la que hay que coordinar y luchar sin demoras. El axioma de "proletarios del mundo uníos" ante la bancarrota de Wall Street, ante la catástrofe del sistema imperialista mundial, se ha puesto de forma decisiva a la orden del día para parar el ajuste que ya está aquí y el que viene. El FIT le ha dado vuelta la espalda a la lucha por el internacionalismo militante en su campaña electoral. Aun la clase obrera de los grandes partidos socialdemócratas en el siglo pasado luchaba por la unidad internacional de la clase obrera y por las 8 horas, que se consiguieron con enormes combates de clase a nivel internacional. Y ahora nos quieren decir que con proyectos de leyes presentados junto a políticos burgueses, esto se puede conquistar. Hay que votar al FIT contra los políticos patronales. Pero hay que poner en pie un nuevo reagrupamiento obrero en lucha por la victoria de la revolución socialista y por el internacionalismo militante, para combatir y luchar junto a nuestros hermanos de América Latina y el mundo. Para preparar la intifada argentina, la resistencia siria, en todas las ciudades de Argentina. Para combatir por los 15 dólares como se hace en Chicago, Washington y Oakland, para hacerlo en Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y la Patagonia. Desde Democracia Obrera, adherente al Colectivo por la Refuncación de la IV Internacional – FLTI (Fracción Leninista Trotskista Internacional), luchamos por refundar la IV Internacional, el único partido que por su programa, estrategia y combate tendrá el honor de llamarse trotskista y luchar por la revolución socialista internacional. Es inadmisible que el FIT diga que se viene un ajuste y no llame a la clase obrera a prepararse para combatir como en el Cordobazo, como en el 2001, como en la intifada, como en la huelga general de Europa y los combates de la clase obrera norteamericana. Llamamos a los trabajadores del FIT y a los luchadores que van en sus listas a prepararse para esta perspectiva. En esa pelea, los trotskistas internacionalistas de Democracia Obrera solo pedimos estar en la primera línea de ese combate. El 25 de octubre, vote al FIT. Pero desde ya y sin perder tiempo, y sin un día más de charca electoral, hay que organizar a la clase obrera para la lucha. Hay que convocar ya mismo a un gran congreso de organizaciones obreras para preparar el combate, y el día del Ballotage, si llega a haberlo, debemos recibirlo con una gran jornada de lucha de toda la clase obrera argentina. ¿Preparan un nuevo ajuste?... Preparemos con asambleas, paros y piquetes una huelga general revolucionaria. Lia Obrera Internacionalista - Cuarta Internacional (Democracia Obrera),
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