Ante el brutal asesinato de la docente Vanesa Castillo en Santa Fe
¡BASTA DE MATAR A LOS DOCENTES! ¡EL ESTADO Y EL GOBIERNO DE LIFSCHITZ SON LOS RESPONSIBLE!

Vanesa Soledad Castillo era maestra y madre de una niña de 11 años. Hacía tres años que trabajaba en la escuela N° 533 “Victoriano Montes”, de Alto Verde, en Santa Fe. Vanesa, además, cursaba el segundo año del Profesorado en Historia en el Instituto Superior Nº 8 Almirante Guillermo Brown.
El jueves 15 de febrero salió de la escuela y fue asesinada cobardemente por un hombre que ella habría denunciado por abuso a una menor. Este hecho despertó la indignacion de la comunidad que buscó justicia intentando linchar al asesino pero la policía la detuvo.
Los docentes ante tanta desolación a la que son expuestos todos los días estallaron de bronca y se movilizaron por justicia y llevaron a cabo un paro docente provincial masivo cuando el gremio mayoritario AMSAFE, atinó a llamar a un paro por duelo. La familia de Vanesa sintió la solidaridad docente y el acompañamiento multitudinario en la despedida de sus restos.
Al día siguiente se realizó una gran movilización hacia la Casa del Maestro del gremio de Amsafé. La mayoría de los maestros vestían remeras negras y pancartas con frases como “Nos duele el guardapolvo”, “Nos falta una seño” y “Justicia por Vanesa”
Las compañeras de trabajo de Vanesa señalaron que estaba a punto de titularizar en su cargo y reclaman ahora que Educación efectivice la medida y le otorgue el beneficio a su hija.
El gobierno y demás funcionarios provinciales hacen uso de grandes dosis de cinismo y se muestran acongojados como si ellos no fueran los principales responsables de la muerte de Vanesa, por las condiciones laborales y el desamparo que sufren los docentes ante la situación de mendicidad, desocupación y descomposicón en la que han dejado a la juvenud y a la familia obrera, en una provincia donde las grandes cerealeras se llevan miles de millones de pesos, explotando nuestra tierra y saqueando nuestros recursos.
Los docentes como la mayoria de los trabajadores vivimos con salarios de miseria, si tenemos la suerte de trabajar, sin obra social, recargandonos de trabajo para poder mantener a nuestros hijos y velar por nuestros alumnos, hijos de familias obreras, del que somos responsables. Los docentes intervenimos frente a hechos de violencia y abuso sobre nuestros pibes en muchos casos sin gabinete de asistente social o con los insuficientes que ya están totalmente saturados de las problemáticas que este sistema perverso engendra. Pero debemos actuar sin ningún resguardo, siguiendo protocolos ridiculos, que terminan poniendo en juego nuestro trabajo y nuestra vida y la de los alumnos, como en el caso de Vanesa o como en el caso de las maestras jardineras de Flores, que por actuar fueron separadas de sus cargos tras la muerte de su alumno Agustín, el niño que fuera asesinado cuando las docentes, sin profesionales ni gabinete social, habían denunciado que el niño era golpeado, esto en el año 2015.
No podemos cerrar los ojos ante tanta descomposición social que generan los gobiernos y sus políticas de hambre, que terminamos pagando los docentes y nuestros estudiantes con la vida. El Estado nos deja en banda, nos hacen “operar” con las manos vacías, en la mayoria de los casos sin ayuda y apoyo profesional ante el desastre social que provocan y mientras esto pasa los dirigentes sindicales hacen poco y nada convirtiéndose en cómplices de lo que sufrimos como trabajadores de la educación y lo que sufren nuestros alumnos y sus familias.
¡Hay que decir basta!
¡Basta de que nos maten por intervenir por el bienestar de nuestros pibes!
¡Basta de manoseo y de basurear nuestro trabajo desde el gobierno y el estado!
¡Queremos recuperar nuestra dignidad y la de nuestros pibes!
¡Basta de familias obreras sin educación de calidad! ¡Basta de escuelas destruidas!
¡Basta de salarios de hambre! ¡Basta de despidos!
¡Salarios y trabajo digno para la familia obrera!
¡Impuestos a las grandes fortunas para obtener mayor presupuesto para educación!
¡Nacionalización sin pago de las cerealeras y bajo control obreo! ¡Ahí están los recursos para asegurar la educación, la salud y el trabajo para los explotados!