Ucrania - 15 de noviembre de 2024

Ucrania, saqueada por el imperialismo y los negocios de la reconstrucción que se preparan: la guerra es el gran negocio de la época imperialista

Ucrania está destrozada por la guerra y los padecimientos de las masas son inauditos. La infraestructura de Ucrania está en ruinas: miles de colegios, hospitales, edificios residenciales han sido destruidos o dañados gravemente, inclusive más del 20% de las tierras agrícolas han quedado inutilizadas. Y próximos a un duro invierno, apenas funciona el 50% de la energía.
Ucrania está asfixiada con la deuda. La deuda externa alcanzó en 2024 los 170000 millones de dólares (96% de su PBI), y otros 40000 millones en bonos locales. Desde que inicio la invasión rusa, la deuda casi se ha duplicado, debido a que cerca del 70% de toda la ayuda financiera internacional a Ucrania se otorga en forma de préstamos, con intereses que debe pagar el Estado. El FMI es uno de sus acreedores principales, junto con la UE. Y muchos inversores privados han adquirido deuda ucraniana, entre ellos BlackRock, Amundi (el mayor gestor de activos de Europa) y Pimco (el principal fondo de bonos a nivel mundial).
Mientras tanto, los piratas imperialistas se relamen los labios pensando en los jugosos negocios de la reconstrucción ucraniana, hoy con Trump y sus empresas constructoras a la cabeza. Según el Banco Mundial, las pérdidas de Ucrania por la guerra ascienden a 500 mil millones de dólares y calcula que en los próximos 10 años el negocio de la reconstrucción de Ucrania representará unos 486 billones de dólares. Solo para reparar las pérdidas más necesarias e inmediatas del año, Ucrania necesitó 15 mil millones de dólares. La UE ya ha metido la cola en este negocio con la empresa Davos Baukultur (una alianza de gobiernos y constructoras europeas).
Está claro que el imperialismo se juega a quedarse con la mayor parte de los despojos y las riquezas de una Ucrania aplastada, si no triunfa una revolución para llevar a la victoria de la guerra de liberación nacional.