Tribuna Socialista - 17 de enero de 2025
A propósito del acuerdo del alto el fuego entre el sionismo y Gaza
El PTS y la lucha nacional: Un ejemplo de su antileninismo
La Izquierda Diario acaba de escribir una nota sobre los acuerdos de paz y el alto el fuego entre Hamas y el sionismo. Nota que en sí misma configura una total ruptura con los principios más elementales del leninismo en lo que respecta a la cuestión nacional, en el combate entre opresores y oprimidos.
En la nota que sigue planteamos la defensa de la política Leninista respecto a esta cuestión esencial del combate Revolucionario en la época Imperialista contra la tergiversación de los liquidadores de la IV Internacional.
Bajo una nauseabunda tergiversación de términos, LID vocero digital del PTS en la fracción Trotskista (FT) adopta el punto de vista de un pacifismo burgués o de un humanismo pseudo socialista (en el mejor de los casos). Hasta aquí nada nuevo en lo que nos ofrece este afluente del conjunto de renegados y liquidadores del Trotskismo que lleva al gran manantial del partido único con restos del estalinismo.
La nota en cuestión "Hamas e Israel alcanzan un acuerdo para un alto el fuego en Gaza" gira en torno a los términos de un probable acuerdo ¿de paz? en la guerra de exterminio que el sionismo lleva adelante contra el pueblo y la nación Palestina.
Ya en el desarrollo mismo se la nota queda establecida cual es la verdadera posición de esta corriente traidora cuando habla de rehenes, por el lado de aquellos que fueron capturados en la acción militar del año 2023, y de prisioneros, por el lado de aquellos combatientes de la resistencia Palestina en poder del sionismo. Esa diferenciación constituye toda una declaración y ubicación de estos sesudos teóricos de la guerra, pero de la cual poco y nada comprenden. Ya nos hemos ocupado de este tema SERIO en varias ocasiones. No nos extenderemos al respecto.
¿Rehenes? ¡Las pelotas! Estamos ante ocupantes y colonia sionistas, que desde el año 1948, año que significó la participación del territorio histórico de Palestina, llevan adelante una guerra de exterminio y un genocidio contra la nación oprimida.
Bajo el auspicio de los EEUU y con Qatar como mediador, se busca un alto el fuego, un acuerdo bilateral en la que una de las partes, la nación Palestina, se encuentra bajo escombros, con centenares de miles de muertos, heridos, con la infraestructura destruida, con cifras de por si alarmantes que dan cuenta del genocidio, y que en términos reales de vida no obliga en nada al opresor y le impone al pueblo oprimido una serie de condiciones a cumplir a riesgo de continuar la masacre. Una paz de los cementerios bajo la suerte de un "tratado de Versalles" (salvando la distancia).
¿Rehenes y Prisioneros?
La distinción de la llamada Fracción Trotskista, en este caso concreto no se reduce a una simple cuestión terminológica, ya que la misma significa dos cosas. En primer lugar el reconocimiento explícito del derecho a la existencia de la entidad sionista llamada "estado de Israel", el cual ejerce su "legítimo derecho a la defensa" frente a un ataque que con "métodos terroristas" llevó adelante el grupo Hamas, vulnerando la integridad territorial y la seguridad de sus habitantes. Bajo esta premisa el sionismo genocida justifica su accionar contrarrevolucionario en una región atravesada por enormes combates revolucionarios, y de la cual la FT con el PTS a la cabeza se hace eco como quedó demostrado el debate presidencial de fines de 2023 dónde la señora Bergman condenaba a Hamas y decía apoyar la lucha contra el sionismo. Lágrimas de cocodrilo decimos nosotros.
Hacerse eco de la denuncia a los métodos de Hamas, implica desconocer el derecho inalienable que tiene un pueblo oprimido, con la totalidad de su territorio histórico ocupado, de enfrentar la misma, expulsar y aniquilar al invasor por las vías, los métodos y la forma que sea necesaria para cumplir dicha tarea. No se derrota con buenos modales un enemigo asentado en el poder de fuego que le otorga el Imperialismo.
Izquierda Diario en su manía de pegarse a cuanta moda reformista existe, se hace vocero del sionismo fascista y usurpador, el cual vía la existencia de millones de mujeres y hombres armados hasta los dientes constituye una de las más grandes bases militares Imperialistas en el Oriente medio, cuya función es garantizar el saqueo de sus riquezas naturales como gas y petróleo y el aplastamiento contrarrevolucionario de las masas en la lucha por su liberación que llevan adelante además contra la legión lacayuna de burguesías nativas.
No plantear la destrucción del enemigo opresor en estos casos, el reconocimiento tácito de la entidad sionista como estado, el papel que está desempeña en la región (aunque de vez en cuando pretendan lavarse la ropa sucia con un tibio apoyo a la causa Palestina), significa en los hechos renegar y desertar de la lucha por la liberación nacional, de la conquista libre, laica, democrática y no racista, bajo las cenizas del sionismo, recuperando la totalidad de su territorio histórico, desde el Jordán al mediterráneo, significa abandonar el combate Revolucionario contra el Imperialismo, las burguesías locales y la lucha por la revolución, desnudando el verdadero carácter de estás corrientes oportunistas, que de vez en cuando encubren sus traiciones bajo un cúmulo de "palabrejas marxistas" cómo alertara Lenin.
Que no nos vendan mentiras.
Que no se engañe al pueblo palestino.
La paz solo vendrá con la destrucción del estado sionista de Israel, con una Palestina libre, laica, democrática y no racista.
La paz vendrá con el triunfo de la revolución que imponga una federación de estados obreros y campesinos en Medio Oriente.
Rogelio Romero |