LOS TRABAJADORES DE TVB (Ex Jabón Federal) DEBEN Y PUEDEN TRIUNFAR

Desde el 28 de julio, los obreros de la ex Jabón Federal, en La Matanza, están en lucha en defensa de 38 compañeros despedidos. Estos despidos son la respuesta de la patronal a la demanda de los obreros de reconocimiento de su comisión interna y frente a la verdadera rebelión que recorre las bases obreras contra las paritarias de hambre y busca imponer la discusión del convenio, para conseguir aumentos, etc. Es que el techo del 19% de aumento salarial en cuotas, firmado a espaldas de los trabajadores por el gobierno, la patronal y la burocracia sindical no alcanza para nada. Mucho menos cuando los precios suben todos los días, y cuando han empezado los tarifazos, como lo anuncian los aumentos en el transporte.
Al reclamo obrero, como en decenas de fábricas y establecimientos, la patronal, con la complicidad de los traidores de la burocracia sindical, respondió con el despido de un compañero. Los trabajadores retrucaron paralizando la planta durante seis días. Para quebrar la voluntad obrera, el ministerio de trabajo, en complicidad con la patronal y la burocracia del gremio, se negaban a reconocer que existía un conflicto. Luego de seis días de paro, se vieron obligados a reconocerlo y decretaron la conciliación obligatoria. La patronal desconoció la medida y echó a 37 compañeros más.
El plan patronal estaba a la vista. Mantener a los despedidos entretenidos en marchas a los escritorios ministeriales, mientras adentro intentaban quebrar aplicando una política de terror y persecución: citaban a los obreros a las oficinas para decirles que estaban dispuestos a seguir despidiendo y hasta a cerrar la fábrica. Mientras tanto, los supervisores, como verdaderos capangas, perseguían y apretaban a todo el mundo, máquina por máquina y sector por sector para que hicieran más producción, amenazando con sanciones. ¡Y hasta tratan de imponer doce horas obligatorias para liquidar un turno!
El objetivo era quebrar la unidad que se había dado entre los despedidos y los de adentro en el paro de 6 días. Si lo lograban, la derrota estaba asegurada, porque mientras la fábrica seguía produciendo, sólo les quedaba esperar el desgaste de los despedidos, en marchas, festivales y carpas, solos, aislados y abandonados a su suerte. La patronal aprendió de lo sucedido en Tango Meat y en otros tantos conflictos donde al romperse la unidad entre los que estaban produciendo y los despedidos y no parar la producción, la derrota fue cuestión de tiempo.

EL JUEVES 10, UN DIA BISAGRA: LA BRONCA ESTALLÓ, Y LOS OBREROS DIJERON “¡BASTA!”

El jueves 10, luego de varias movilizaciones de los obreros despedidos y la Comisión Interna al ministerio -que hace la vista gorda y no reconoce a los representantes de los obreros en lucha-, y mientras a los de adentro los apretaban con ritmos infernales, amenazas, etc., los trabajadores dijeron basta. Ya un sector de activistas venía haciéndose oír y diciendo que no se conseguía nada con el ministerio. Ya los obreros de adentro venían juntando bronca contra los aprietes, las persecuciones y el látigo al que estaban sometidos, pidiendo asambleas para volver a unirse y parar. Y PARARON. Y no sólo eso: salieron comisiones de obreros en huelga a las otras fábricas de la zona –como Sabó, Lucas Indiel, etc.-, a difundir su lucha y a buscar apoyo para la misma.
Al grito de “al ministerio lo vamos a quemar... vos sos amigo de la patronal” y “a la burocracia, la vamos a reventar, la vamos a reventar”, volvió a soldarse la unidad de los de adentro y los despedidos, y se paró la producción.
Esta es una primera gran conclusión para todos los trabajadores argentinos:
Las luchas no se ganan en los escritorios de los ministerios, con los recursos de los abogados, ni con las conciliaciones obligatorias; tampoco es suficiente con festivales para aplaudir a los despedidos, marchas, ni carpas que se perpetúan en el tiempo desgastando a los que luchan. Se ganan poniendo en pie organizaciones obreras para luchar, que garanticen la unidad obrera y pararle la producción a la patronal, que es lo que más le duele. Se ganan rompiendo el aislamiento y buscando la coordinación para luchar.
Si no hacemos esto, lo que nos espera es la esclavitud, el terror y la persecución adentro de las fábricas, como ya estaba intentando imponer la patronal de TVB, y como están imponiendo en cada fábrica donde despiden al activismo y derrotan a los que quedan trabajando. Como les pasó a los obreros de Terrabusi, Stani, Pepsico y otras alimenticias, donde los patrones despidieron a todo el activismo –con la ayuda de la burocracia-, y cada una de ellas fue llevada separada al ministerio de trabajo y a la conciliación obligatoria. El resultado: los mejores activistas quedaron afuera, y se rompió la unidad entre efectivos y contratados. Y atrás vinieron el apriete y el terror para imponer la esclavitud y salarios de miseria, mientras las amenazas de despidos siguen pendientes.

COMITÉ DE HUELGA PARA SOLDAR LA UNIDAD CONSEGUIDA, PONERLE FECHA AL PARO Y GARANTIZARLO

Por eso, ahora que los trabajadores de la ex-Jabón Federal decidieron parar nuevamente, es fundamental soldar la unidad impuesta por los trabajadores el jueves, organizando un Comité de Huelga donde esté integrada la interna junto con los 38 compañeros despedidos y delegados de cada sector que, junto a las asambleas, suelde la unidad conquistada en la lucha, le ponga fecha al paro y lo garantice, y para defender a la Comisión Interna que es una enorme conquista que los obreros, con su lucha, les arrancaron a la patronal y a los traidores de la burocracia sindical.
Esta también tiene que ser una gran conclusión para todos los trabajadores de este conflicto y del movimiento obrero argentino: para luchar, para unir las filas obreras, hay que lograr más democracia obrera, superando las trabas que nos ponen los “estatutos” y los “cuerpos orgánicos” de la burocracia.

La lucha de Jabón Federal no puede quedar aislada
PARA TRIUNFAR: COORDINAR Y UNIR A LOS QUE LUCHAN

Los trabajadores de Jabón Federal enfrentan el mismo problema que los portuarios de Bactssa, y otras fábricas y empresas, donde patronal responde con despidos a las rebeliones contra las paritarias miserables del 19% de los patrones, el gobierno y la burocracia sindical. Y si los trabajadores paran, el ministerio decreta la conciliación obligatoria y la discusión pasan a ser los despedidos y no los salarios. Es que está prohibido hablar de aumento de salarios y mejores condiciones de trabajo; está prohibido cuestionar las paritarias de hambre que firmaron entre el gobierno, 50 empresarios y 500 burócratas sindicales millonarios, pagados por los patrones y el estado, verdaderos guardiacárceles de la clase obrera argentina. Y para sostenerlas y profundizarlas, quieren imponer una verdadera dictadura del terror dentro de las fábricas para someternos a la esclavitud.
A esta situación nos han llevado a los trabajadores, después de que derrotaron la lucha de Las Heras. Allí no dudaron en entrar con la gendarmería, la policía, los matones y los parapoliciales, a secuestrar, torturar y encarcelar, para derrotar a los trabajadores petroleros y de la UOCRA, que al grito de “somos todos petroleros”, exigían el pase a planta permanente, aumento de salarios y basta de impuestos al salario, cuestionando así el pacto social del gobierno, la patronal y la burocracia. Si la lucha de Las Heras triunfaba, no se hubieran podido firmar las paritarias del hambre. Por eso, la patronal y el gobierno –con el apoyo de la burocracia sindical- no dudaron en dar ese golpe con la gendarmería, la policía y los servicios entrando como tropas de ocupación, al estilo de la más nefasta tradición videlista.
Las Heras quedó aislada y con 6 compañeros que siguen presos como rehenes de la Repsol y Kirchner,  por la traición de la burocracia sindical y porque las más de 300 organizaciones que expresaron su solidaridad fueron incapaces de garantizar un Comité de Lucha Nacional que coordinara a los que ya estaban luchando,  que levantara un pliego único de reclamos, que organizara la lucha para arrancar a nuestros compañeros de la cárcel, por el triunfo de Las Heras y por todos los reclamos. ¡Así derrotaron Las Heras, y abrieron el camino a la imposición de las paritarias del hambre!
Así, después de estos dos golpes contra la clase obrera, ese verdadero comando del terror  de los patrones, el gobierno y la burocracia sindical, centralizaron sus fuerzas, mientras que dispersaron las fuerzas de los trabajadores. El enemigo golpea de forma perfectamente centralizada y concentrada contra cada lucha, mientras los trabajadores estamos dispersos, peleando fábrica por fábrica, en dura resistencia. Los monopolios y la patronal esclavista –con el apoyo abierto de la burocracia que ha transformado a los sindicatos en apéndices del estado patronal- redoblan el ataque, echan a todos los activistas, profundizan la superexplotación, porque necesitan contar con mano de obra esclava y regalada, para poder competir en el mercado mundial, y seguir exportando al Mercosur y a China, y garantizándose fabulosas ganancias.  ¡Y cuando esta es la situación, la izquierda reformista nos sigue diciendo que las luchas se ganan negociando en los despachos del ministerio de trabajo, es decir, en el cuartel general en donde se concentran las fuerzas del enemigo! ¡Basta!
Si hoy derrotan a los portuarios de Bactssa, a los obreros de Jabón Federal, y demás luchas de resistencia, después vendrán por todas y cada una de las conquistas obreras que les hemos arrancado a la patronal y a la burocracia, como son el cuerpo de delegados del Subte, la interna del Garraham y demás internas combativas, etc. Hay que mirarse en el espejo de Las Heras: ¡ese es el objetivo de la patronal, el gobierno y los traidores de la burocracia sindical!

EL DIA DEL PARO EN JABÓN FEDERAL: TODOS AL CAMINO DE CINTURA A CORTAR LA RUTA Y A PONER EN PIE UN COMITÉ NACIONAL DE LUCHA Y COORDINACIÓN

¡En Jabón Federal no puede pasar lo mismo! Tenemos una nueva oportunidad de atalonar la resistencia alrededor de esta lucha. Los obreros, en asamblea, votaron un paro para la semana que viene. Ese día, los movimientos piqueteros que vienen de movilizarse por trabajo genuino –la CCC, el Polo, el TV, FTC, etc.- tienen que volver a cortar la ruta  -esa que D´Elía y los carneros sirvientes de Kirchner abandonaron a cambio de puestos en los ministerios y secretarías- frente a Jabón Federal.
Hay que transformar ese día en una jornada de lucha de todas las organizaciones obreras en lucha y combativas, que tienen que mandar sus delegados con mandato para hacer todos juntos –trabajadores de Jabón Federal, piqueteros y organizaciones combativas y en lucha- una gran asamblea y poner en pie   un Comité Nacional de Lucha y Coordinación para terminar con la dispersión que nos impusieron y dejar de pelear separados. El cuerpo de delegados del Subte, los obreros portuarios de Bactssa, la comisión de Mujeres en lucha de Las Heras, los piqueteros del Norte de Salta que empezaron ya la lucha por el pase a planta permanente y salarios dignos para los trabajadores de los microemprendimientos, la interna del Garrahan, los trabajadores en lucha del Hospital francés, los obreros de Zanón que proponen un encuentro obrero, los docentes cordobeses, los compañeros de Sabó que derrotaron a la patronal; los de Acindar, que saben que se vencen los contratos y necesitan luchar contra la precarización; los de ENFER que ya sufrieron un primer despido; los de Lucas Indiel; los de Atento que tienen la amenaza constante del cierre y necesitan pasar a planta permanente; los contratados de la ciudad de Buenos Aires que tuvieron que tomar la sede de gobierno para ser escuchados, y todos los que están luchando y resistiendo, tienen que mandar delegados con mandato ese día. Hay que poner en pie ese Comité Nacional de Lucha y Coordinación, para que triunfe Jabón Federal, para que se unifique su lucha con la de los portuarios de Bactssa, para impulsar una lucha nacional por arrancar de la cárcel a los compañeros presos de Las Heras, que organice piquetes y comités de autodefensa para defenderse de los matones y pistoleros a sueldo de la burocracia que, como en la UTA de Córdoba o en Coca Cola, agreden salvajemente a los trabajadores en lucha. Un Comité de Lucha y Coordinación para que nadie más pelee aislado y que luchas como la de Jabón Federal hoy y la de Sabó ayer se multipliquen como un reguero de pólvora en todo el país. Para que sea un ariete para enfrentar a la burocracia sindical que a cada paso nos traiciona, y abrir el camino a conquistar la III Asamblea Nacional piquetera de trabajadores ocupados y desocupados que organice una lucha decisiva por todas las demandas obreras.

¡Viva la lucha de los obreros de Jabón Federal!
¡Basta de pelear separados!
¡Comité nacional de lucha y coordinación!
¡Libertad a todos los presos por luchar!
¡Fuera el Ministerio de Trabajo y sus conciliaciones obligatorias! ¡Abajo la burocracia sindical!

ULTIMO MOMENTO

Antes de entrar a imprenta este suplemento especial de Democracia Obrera, nos informan que los trabajadores de TVB (ex-Jabón Federal, reunidos en asamblea el día domingo 13 de agosto, votaron volver al paro el día martes 15 de agosto.
¡Viva la lucha de los obreros de Jabón Federal!
El 15 de agosto, día en que paran los tabajadores de Jabón Federal, ¡Todos al camino de Cintura a cortar la ruta y a  poner en pie un Comité Nacional de Lucha y Coordinación!

¡ABAJO EL SECRETO COMERCIAL Y BANCARIO!
QUE SE ABRAN LOS LIBROS CONTABLES Y CUENTAS BANCARIAS DE LAS EMPRESAS

La excusa del gobierno y la patronal para aplicar las paritarias de hambre del 19 %, es que no se podía superar ese porcentaje de aumento salarial sin poner en peligro la “rentabilidad” de las empresas. Es una verdadera santa alianza antiobrera para seguir con la “dictadura de la patronal” como cantan los trabajadores de la ex Jabón Federal. Para aumentar la “rentabilidad”, siguen apretando adentro de las empresas, exigiendo más productividad, mayor cantidad de horas trabajadas, etc.
Todo reclamo obrero sobre mejoras en el convenio para conseguir alguna elevación salarial, choca contra el argumento de la caída de la “rentabilidad”. Todo reclamo sobre los infernales ritmos de producción que causan centenares de accidentes todos los días, en los que los trabajadores sufren quemaduras, laceraciones, mutilaciones, cuando no termina con la muerte, tienen la misma respuesta por parte de la patronal: la “rentabilidad”. El ataque a las conquistas obreras y la exigencia de trabajar 12 horas sin cobrar extras, como exigen en las PYMES, también.
Los aumentos de precios en los artículos más necesarios y de tarifas que se están implementando en los transportes, los subsidios que se les otorgan a los trenes, subtes y colectivos y que salen de nuestros bolsillos, también están justificados, según los empresarios, por la caída de la rentabilidad empresaria.
Entre la patronal y los traidores de la burocracia sindical se pasaron días discutiendo en el consejo del salario, para terminar arreglando $800 rasposos de salario mínimo que no cubren ni la canasta básica, en nombre de la sacrosanta “rentabilidad”, y para lavarse la cara, el ministro De Vido sale a pedirle a los patrones que tengan una “rentabilidad razonable”. Lo razonable para los empresarios es chuparnos la sangre cada vez más para aumentar sus fabulosas superganancias.
¡Basta! Los obreros no comemos vidrio, ni somos estúpidos. Vemos todos los días cómo con el “crecimiento” se la están llevando con pala. Compran nuevas fábricas, cambian maquinaria, renuevan los autos cero kilómetro. Les pagan a sus gerentes salarios fabulosos para que nos hagan producir cada vez más y nos persigan en las fábricas. Los diarios burgueses informaron que son $ 60.000 por mes lo que gana un gerente en una empresa promedio: es decir, más de 700 sueldos mínimos.
¡Basta! Los trabajadores del puerto saben que Bactssa, cobró siempre en dólares, y que a pesar de las devaluaciones, que bajaron tremendamente la masa salarial, se niega a dar aumentos y encima despide. La ex Jabón Federal, cuyos productos aparecen en las góndolas de varios países de Latinoamérica, también exporta y cobra en dólares, y también aprieta y despide.
Para eso, cuentan con la protección del gobierno que habla mucho pero siempre se detiene ante el “secreto comercial y bancario” como ante un lugar sagrado que no puede profanarse. Entre los patrones saben muy bien cuánto gana cada uno. El secreto comercial es para que los trabajadores no sepamos de sus fabulosas superganancias, y para eso, cuentan con la ayuda de los traidores de la burocracia sindical que les defienden los bolsillos porque de esas fabulosas superganancias reciben su cometa. Con la firma de cada convenio, el sindicato recibe una suma fabulosa de dinero, y ante cada problema que le paran a la patronal, les agradecen en sumas contantes y sonantes.
¡Basta! Queremos saber cuánto ganan las empresas. Queremos conocer todas las tramoyas de facturación y subfacturación. Queremos saber cuánto tienen en los bancos y en sus cuentas en el exterior. Queremos saber cuánto giran a las casas matrices en el extranjero. Queremos analizar los costos de producción y el precio final del producto. Con esos números, demostraremos cuánto nos están robando, cómo los precios son elevadísimos, cómo los salarios están por el suelo y cómo se la pasan haciendo maniobras especulativas contra las masas trabajadoras.
Nos dirán que no se puede porque existe el “secreto comercial y bancario”,: ¡fuera con él! ¡Abajo el secreto comercial y bancario! ¡Que se abran los libros de contabilidad y las cuentas bancarias! Ellos saben muy bien lo que ganamos los trabajadores. Tienen toda nuestra vida contabilizada: ¡queremos el mismo derecho! Queremos poner las cuentas patronales bajo una lente de aumento, para que toda la sociedad conozca sus fabulosas ganancias y vean cómo nos estafan.