SIRIA
Columna de opinión
09/12/2016
Obama se retira... Allí, al lado de su sicario Putin, se sentará Trump
EEUU y sus petroleras imperialistas tienen un nuevo gendarme en Medio Oriente que les hace el trabajo sucio: la Rusia blanca contrarrevolucionaria de Putin |
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Antes del 2011 ese trabajo sucio lo podía cumplir plenamente EL SIONISMO, pero Siria fue el punto más lejos a donde llegaron las revoluciones de Túnez, Egipto, Libia, Marruecos, Yemen... Es por ello que el imperialismo guardó al sionismo y no pudo usarlo, pues si lo hacía, terminaba unificando en un solo acto a todas las revoluciones del Magreb y Medio Oriente.
Por eso al estado sionista-fascista de Israel lo dejó, por ahora, para que aplaste y controle al pueblo palestina y a la Gaza cercada.
Entonces EEUU y la OTAN trajeron a Rusia... y encontraron fuerzas contrarrevolucionarias en la burguesía chiita, a la que cooptó a sus negocios en el Líbano y en la reconversión económica de Irán. Es decir, encontró mercenarios.
Estas fuerzas contrarrevolucionarias son las que estrangulan la revolución siria... mientras Arabia Saudí aglutina las fuerzas que masacran a Yemen y Bahréin.
TURQUIA busca entrar… necesita zonas de influencia. Hace bien sus deberes: envió a los generales del ESL a controlar y entregar desde adentro la revolución, como vemos en Aleppo y tantas ciudades que fueron entregadas en Siria.
EEUU mandó al ISIS a cuidarle sus oleoductos en Irak y Siria, socavando y derrotando los procesos revolucionarios en el Levante.
Estamos viendo cómo en todo el Magreb y Medio Oriente el imperialismo vuelve a levantar nuevos dispositivos contrarrevolucionarios para controlar las rutas del petróleo, saqueando los países oprimidos de la región.
Los dispositivos contrarrevolucionarios que había, como los pactos de Camp David, el sionismo, la ex URSS dirigida por el stalinismo y su política de coexistencia pacífica, ya no pueden jugar ese rol.
Es el momento de nuevos actores contrarrevolucionarios para parar la revolución socialista en una de las regiones donde las potencias imperialistas imponen uno de los mayores saqueos, explotación y destrucción.
Pero estos dispositivos se estabilizarán si logran aplastar la revolución en toda la región. Eso está por verse. El último acto se va a definir con la intervención de la clase obrera europea y de EEUU.
Vamos a ver si ésta le deja las manos libres a la bestia imperialista para terminar su obra contrarrevolucionaria.
Lo que sí sabemos y estamos seguros es que los marxistas o los que hablen en su nombre que no están en la trinchera correcta frente a los golpes del fascismo en Siria, no será creíbles... No podrán hablar jamás en nombre de la revolución... Están sosteniendo el sable del verdugo de los explotados... Irán a parar al basurero de la historia, pues las leyes de ésta son más fuertes que cualquier aparato.
Iván León