20 de marzo de 2022
En el 11° aniversario de la revolución siria…
Jornada revolucionaria sobre la cuestión ucraniana
Desde Italia, intervención de los compañeros
de Avanzada Proletaria
Primero que todo quiere agradecer a la Fracción Leninista Trotskista Internacional la oportunidad de permitirme participar de esta reunión. Acompaño los aplausos que se les han dado a los camaradas de Siria y en este 11° aniversario dijo nuevamente “viva la revolución siria”.
Les hablo desde un país que, aunque no lo ha admitido públicamente, hoy está en guerra. Digo que está en guerra porque no solo ha mandado armas a Ucrania, sino que han aumentado el gasto militar de Italia en 13 mil millones de euros, incrementándolo de 25 mil millones de euros al año a 38 mil millones de euros al año. En el Parlamento solo han votado en contra de este incremento 19 diputados de un total de 630 miembros de la Cámara de Diputados, es decir, menos de la trigésima parte votó en contra.
Si bien todos los periódicos han estado en contra de la invasión rusa a Ucrania, a su vez han intentado buscar un apoyo militar más activo por parte de Italia, un movimiento del ejército italiano más activo.
En este momento hay 1.500 soldados en la frontera de Polonia y Ucrania y siguen mandando dotaciones de armas para suministrar al ejército. El Ministerio de Defensa ha emitido un alerta al ejército y a los generales por un posible despliegue de tropas.
Hace dos días, en el aeropuerto de Pisa, en Toscana, algunos trabajadores han bloqueado y parado el envío de armamento para Ucrania, que iban escondidos como ayuda humanitaria.
La izquierda italiana está dividida. Hay todo un sector que está a favor de la intervención de la OTAN. Y por otro lado hay otro sector que es el stalinismo, que divide al mundo en dos campos, Rusia contra EEUU, y está en contra de la intervención, ocultándose detrás de la política pacifista que llevan adelante.
El sindicato más grande de Italia, la CGIL, que es el equivalente a la CGT de Francia, no ha dicho absolutamente nada. Ni siquiera han hecho una hora de paro en contra de la guerra. Algunos sindicatos más pequeños sí han llamado a movilizaciones. Pero no hay unificación de los sindicatos y ninguno ha llamado a parar la producción ni el embarque de armas en ningún momento.
Un ejemplo, el 8 de marzo, que fue el Día Internacional de la Mujer, uno de los sindicatos que es pequeño pero que dice ser de los más combativos, dentro de sus puntos de reivindicación nombraban la cuestión de la guerra en Ucrania, pero estaba totalmente perdido y diluido junto a otros puntos que son propios del 8 de marzo como las cuestiones de género. Esto diluía la posición de ellos frente a la cuestión de Ucrania.
Incluso la izquierda campista, el stalinismo, primero cuando se inicia la revolución en Siria, estaban en contra, y cuando Putin intervino y empezó a bombardear, dejaron de directamente de hablar de eso.
Básicamente, esta es la situación en Italia. |