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En medio del crac de la economía mundial capitalista y como parte del
ataque generalizado al proletariado mundial…

En Argentina los parásitos imperialistas realizan enormes
superganancias redoblando la súper-explotación obrera y
el saqueo salvaje de las riquezas nacionales

En la Argentina de los monopolios imperialistas y su sirvienta la Kirchner, cada día aumentan más las penurias de la clase obrera y las masas explotadas.
Lejos de “estar aquí mejor que en Europa”, como le gusta afirmar a la gorila de la Kirchner, la verdad es que estamos en una Argentina convertida por las transnacionales en un terreno de feroz saqueo y expoliación de la nación.

Pero lo real es que la reconfiguración de una transnacional imperialista, puede producir cambios bruscos de un día para otro. Así fue que, de la noche a la mañana, una guerra civil en el campo por la tierra se desata abiertamente en Paraguay y comienza a desarrollarse en Bolivia y Perú, debido a que la Cargill, la Monsanto y demás transnacionales cerealeras han despojado a miles de campesinos pobres de sus pequeñas parcelas de tierra de subsistencia, para así pode realizar plantaciones de soja a gran escala. Incluso, han reconfigurado las fronteras nacionales de acuerdo a sus negocios. Y ya vimos a fines de 2010 y principios de 2011 cómo el alza en los precios de los alimentos de hasta un 500 %, producido por la especulación del capital financiero en los mercados a futuro de los commodities, fue el motor de las heroicas revoluciones por el pan que se iniciaron en Túnez, Egipto, Libia, Siria y todo el Norte de África y Medio Oriente, enfrentando a los gobiernos y regímenes antiobreros sirvientes del imperialismo en la región.

Estas son las condiciones que a fuego cada vez más rápido, están moldeando y configurando la actual situación en Argentina, y para lo cual el gobierno y la burguesía ya comienzan a prepararse contra el movimiento obrero para continuar garantizándole los negocios a sus amos imperialistas.

Al igual que todos los gobiernos del continente…

Cristina Kirchner blande su látigo contra la clase obrera y las masas explotadas al servicio de las superganancias de las transnacionales imperialistas

Es el gobierno “nacional y popular” de la Kirchner, esa banda de lacayos del imperialismo, el que le garantiza sus enormes superganancias a las transnacionales, y al servicio de éstos comanda un furibundo ataque contra la clase obrera y las masas explotadas de la nación.
Las transnacionales fugan fortunas millonarias del país, y lo único que dejan para los explotados es una inflación anual del más del 50 %, una terrible carestía de la vida y salarios en pesos devaluados, con el 70% de los obreros produciendo en negro, como contratados o tercerizados, ganando miserables $2.500. Millones de obreros desocupados viven con míseros planes sociales o están esclavizados en las cooperativas del plan “Argentina trabaja” de los Kirchner. Mientras, a 2 millones de obreros sindicalizados les roban un tercio de su salario con el “impuesto a las ganancias”, y a otros 2,5 millones de trabajadores les quitaron las asignaciones familiares. Y a esto hay que sumarle lo que están obligados a pagar por consumir el conjunto de los explotados, con el 21 % del IVA. ¡Todo suma más de U$S 100.000 millones por año que se apropian los capitalistas parásitos para financiar su estado!
¡No sólo se roban todos los recursos naturales de la nación! ¡Están saqueando en masa también los magros salarios obreros! Y esto incluye, el robo de las cajas de las jubilaciones –el salario diferido de los trabajadores- por parte de los Kirchner, para cubrir los “baches” de deuda del estado; mientras que en las provincias donde las cajas estatales fueron quebradas por los parásitos de la patronal, hacen que esto lo paguen los trabajadores con el desdoblamiento del aguinaldo, como sucede en la provincia de Buenos Aires.

El gobierno de la Kirchner, cumpliendo las órdenes de sus amos imperialistas, ha conquistado una verdadera Argentina “maquila” al servicio de todos los explotadores, donde la clase obrera es obligada a trabajar en las peores condiciones de esclavitud, súper-explotación y con ritmos de producción infernales, con las fábricas convertidas en verdaderos centros de enfermedades, mutilaciones y muertes obreras. Y como si fuera poco, ya han comenzado a despedir y suspender a miles de trabajadores en la industria automotriz, metalúrgica y de la construcción. ¡Esta es la receta patronal que deben profundizar para que continúe la fiesta de los enormes negocios de los capitalistas en base a la esclavitud obrera y un saqueo cada vez más impune de la nación!

Esta es la Argentina de la Kirchner, la de la ruina y la decadencia de la nación, con millones de explotados que no tienen siquiera una vivienda digna; donde se viaja como ganado en el transporte público, vaciado por los patrones esclavistas amigos de los Kirchner, que reciben millonarios subsidios sacados de la plata de la clase obrera y el pueblo, los mismos patrones que se han cobrado la vida de 51 explotados que murieron en la masacre del ferrocarril Sarmiento; donde los hijos de los obreros estudian en escuelas que se caen a pedazos; donde las familias obreras y de las masas explotadas no cuenta siquiera con una atención médica básica porque los hospitales públicos se encuentran sin insumos y están totalmente colapsados; donde hay un millón de jóvenes que no tienen futuro, que no pueden trabajar ni estudiar, a quienes el estado burgués los disciplina con una política de exterminio a manos de sus perros de la policía que con su “gatillo fácil” asesinan a un joven por día o descomponen a la juventud metiendo el “paco” y las drogas en los barrios obreros.

El kirchnerismo multiplica y redobla su ataque para profundizar las condiciones de esta Argentina “maquila” y para ello la Kirchner persigue, reprime, encarcela y masacra al movimiento obrero, y militariza sus huelgas, tal como lo hicieran los gorilas de “La Libertadora” de Aramburu y Rojas (1955-1958), y Frondizi (1958-1962) quien aplicó el “Plan Conintes” para que las Fuerzas Armadas, ante el ascenso de luchas obreras, le cuiden la propiedad a los capitalistas y el imperialismo.
Bajo las órdenes de Obama y demás jefes imperialistas, la Kirchner así descarga sin piedad todo su ataque contra el movimiento obrero y los explotados para garantizarle al imperialismo, sus bancos y trasnacionales, sus enormes superganancias y un redoblado saqueo de la nación, para que se sigan robando la renta agraria, el petróleo, los minerales, las riquezas marítimas y demás recursos naturales.

Estamos ante un ataque generalizado contra todas las capas y sectores de la clase obrera y las masas explotadas, como parte del ataque generalizado de los monopolios imperialistas contra el proletariado mundial.

Es el mismo ataque que están imponiendo todos los gobiernos bolivarianos de la región como Chávez, Morales, Dilma, Correa y también los hermanos Castro que han dejado en la calle a 400.000 obreros cubanos y aceleran a cada paso la restauración del capitalismo en la isla. Todos ellos demuestran ser tan gorilas, lacayos del imperialismo y enemigos de la clase obrera, como todos los gobiernos pro-imperialistas del TLC.

Un plan para fragmentar al movimiento obrero
6 “corrientes político-sindicales” sometidas a los partidos patronales, su régimen infame y el estado burgués, para mantener dividida y maniatada a la clase obrera

Para imponer el más brutal ajuste y saqueo de la nación el gobierno de la Kirchner tiene que doblegar a la clase obrera, dividir y fragmentar sus filas. Para ello debe desorganizar al movimiento obrero y a sus organizaciones.
Ayer, el régimen burgués en argentina, luego de que fuera expropiada la revolución del 2001, se basó en un “Pacto Social” entre el gobierno de los Kirchner, las transnacionales imperialistas, la patronal esclavista y la burocracia sindical con sus pistoleros como una fuerza de choque contra el movimiento obrero. Es decir, el régimen se asentaba en la estatización extrema de los sindicatos, en los hombros de la CGT y la CTA, donde burócratas como Moyano eran verdaderos “ministros sin cartera” del gobierno (mientras las corrientes de la izquierda reformista se ubicaban como “pata izquierda” del “Pacto Social” con su política de llevar cada lucha de la clase obrera de los últimos años a los pies de las instituciones del régimen como el Ministerio de Trabajo y la justicia patronal, y también de la burocracia de los sindicatos).
La burocracia sindical allanó el camino para este plan traicionando cada combate de los trabajadores y dividiendo al movimiento obrero entre desocupados y ocupados; entre efectivos, contratados, inmigrantes y en negro.
Hoy, al calor de la crisis mundial, el régimen comandado por Cristina debe dejar atrás todo elemento de “coqueteo” con las masas, no permitir que pese el movimiento obrero en la vida política nacional –ni siquiera de forma distorsionada a través de los burócratas que usufructúan la dirección de sus organizaciones- e imponer un bonapartismo no asentado en la estatización de los sindicatos, sino en las clases medias y la cachiporra.  
Por ello le soltó la mano a la burocracia sindical y el plan burgués es avanzar en fragmentar aún más las filas obreras, dividiendo los sindicatos por industria para así intentar asegurarse que la clase obrera no irrumpa con el método de la huelga general, es decir, en una acción centralizada del conjunto del movimiento obrero contra el gobierno, las transnacionales y la patronal esclavista.

Moyano en el acto de camioneros de Plaza de Mayo		Ahora tenemos 6 corrientes político-sindicales, todas a los pies de algún patrón, del régimen infame y sirvientes del estado burgués. Veamos. En primer lugar, la CGT de Moyano con Scioli, que viene de realizar un paro de camioneros y un acto en Plaza de Mayo el 27/06 donde todo el eje del discurso de Moyano –levantando una verdadera política de conciliación de clases y de sometimiento de los trabajadores a la burguesía- fue pedirle a la Kirchner que vuelva al viejo “Pacto Social” (mientras las corrientes de la izquierda reformista se subordinaban al programa y la política de Moyano) Luego le sigue la CGT de los “Gordos” con la gorila Cristina; la CGT “de los argentinos” con Duhalde; la CTA de Yasky con el gobierno; la CTA de Michelli con el sojero Binner; los movimientos piqueteros con D’elía y el gobierno o con Sabatella; por último el FIT como corriente de presión sobre el régimen, sus instituciones y las distintas pandillas de la burocracia sindical que responden a distintas pandillas patronales. Esta es la tragedia del movimiento obrero, al que le han impuesto la más profunda división de sus filas para que el gobierno pro-imperialista de la Kirchner profundice su ataque.

¡Basta ya! El estado maneja a su antojo las organizaciones de la clase obrera. Ayer las estatizaba al extremo de forma centralizada y hoy las fragmenta para dispersar aún más las filas de los trabajadores. ¡Fuera las manos del estado de los sindicatos y todas las organizaciones obreras! ¡Fuera las manos del gobierno y la patronal de las obras sociales y las cajas de jubilaciones de la clase obrera! ¡Fuera el Ministerio de Trabajo y sus conciliaciones obligatorias! ¡Abajo la ley de asociaciones profesionales! ¡Los trabajadores nos organizamos como queremos! ¡Hay que imponer la ruptura de todas las organizaciones obreras con la patronal, el estado y sus instituciones! ¡Abajo la burocracia sindical de la CGT y la CTA!

¡Hay que conquistar un programa para unir las filas obreras que unifique todos nuestros reclamos! Esto sólo lo podemos hacer atacando la propiedad de los capitalistas, levantando un pliego único de reclamos y recuperando las asambleas, y las comisiones internas y cuerpos de delegados vendidos a la patronal!
El plan de la patronal y el gobierno es dividir nuestras luchas para derrotarnos sector por sector. Por ello pudo llegar tan lejos en su ataque a la clase obrera. ¡Basta ya! ¡Hay que coordinar a los que luchan a nivel regional y nacional! ¡Hay que imponer la voluntad de la amplia mayoría de la clase obrera por sobre una ínfima minoría de burócratas privilegiados y amigos del poder!

¡Que el movimiento piquetero rompa con su subordinación al Ministerio de Acción Social y a las municipalidades, y se vuelvan a llenar las rutas de piquetes, se bloqueen las plantas petroleras y se ponga de pie el movimiento de desocupados que atacaba la propiedad de los capitalistas como en Mosconi! ¡Los obreros desocupados no somos mendigos! ¡Comités de desocupados que ingresen a las paritarias con la demanda mínima de “trabajo para todos”!

La burocracia sindical traiciona y ataca con sus matones a los que luchan
y la izquierda reformista se une para juntar votos y dividir a la vanguardia obrera

Al servicio del plan del gobierno y el estado patronal, la burocracia sindical en sus diferentes variantes y sus pistoleros continúan jugando su rol de carneros rompehuelgas, pero no ya de forma centralizada bajo la tutela del gobierno, sino al servicio directo de cada patronal, en cada fábrica y establecimiento, atacando a todo obrero que sale a luchar. Así hace unos meses vimos en Neuquén a la burocracia sindical atacar con sus matones a los trabajadores de Acualiq. Días atrás una patota de la burocracia de la UOCRA atacó a los trabajadores de una obra en Capital Federal (que pararon peleando por el cobro de los salarios adeudados y contra el trabajo en negro), dejando un saldo de compañeros detenidos y muchos heridos. A su vez, los matones de la burocracia del sindicato de la carne intentaron amedrentar a las comisiones internas combativas del gremio, como la de Paty, que recorren los distintos frigoríficos y plantas buscando la unidad de los trabajadores para la lucha.

Ante esta situación, ¿la izquierda reformista del FIT que propone? Luego de las elecciones presidenciales y provinciales, luego de las elecciones en los sindicatos respetando los estatutos de la burocracia y el Ministerio de Trabajo… es decir luego de llamar a los trabajadores siempre a votar y no a luchar, ahora cada corriente del FIT está armando su propio tinglado.
Por ejemplo, tanto el PTS como el PO vienen de realizar, cada uno por separado, encuentros y plenarios de trabajadores, con sus comisiones internas, cuerpos de delegados y centros de estudiantes, todos bien separados entre sí. ¡Estas corrientes ni siquiera se dignaron a hacer plenarios comunes para unificar a los distintos sectores de la vanguardia obrera que ellos dirigen! Es que ello hubiera demostrado la verdad: que sobran condiciones para conquistar un gran Frente de los Trabajadores en Lucha para reagrupar las filas de los sectores que están peleando y de la vanguardia combativa para romper el aislamiento de las luchas obreras y enfrentar como un solo puño el ataque centralizado del gobierno, el imperialismo y la patronal negrera.

Pero nada está dicho definitivamente. Lo que la burocracia sindical y la izquierda reformista dividen a cada paso, el látigo del capital tiende a unirlo en su ataque. Por delante vienen choques decisivos de la clase obrera con el gobierno y las transnacionales. Hay que preparar a la clase obrera para conquistar las condiciones de la victoria.

En Cerro Dragón, Indiel, Sabó y la vanguardia combativa de los frigoríficos…
un nuevo movimiento obrero se está poniendo de pie

Enfrentando esta delicada situación, está surgiendo una nueva vanguardia obrera que con su lucha y en los hechos enfrenta el ataque de la Kirchner y también el plan de sus agentes al interior del movimiento obrero, la burocracia sindical; y se subleva contra la feroz división de las filas obreras y le demuestra al conjunto de los trabajadores cómo pelear. Así, fogueado por los combates revolucionarios de la clase obrera del Norte de África y Medio Oriente, por las enormes luchas de los trabajadores y la juventud de Grecia, por los levantamientos del proletariado y los estudiantes de Chile; y desde la profundidad de esta Argentina de la “maquila” y el saqueo, se está forjando un nuevo movimiento obrero, tal como en los ’90 surgía un movimiento obrero peleando contra el “menemato” que terminó protagonizando la heroica revolución en 2001 del “¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!”.

Hemos visto en el mes de enero que ante el chantaje del cierre y los despidos en Indiel en La Matanza, los obreros ocuparon la planta y la pusieron a producir a pesar y en contra de la burocracia sindical de la UOM. ¡Así se lucha!

En Sabó, también en La Matanza y como parte y continuidad de la lucha de Indiel, los trabajadores salieron a luchar por el salario con la asamblea, el piquete, la paralización de la producción y levantaron un pliego de reclamos para todo el movimiento obrero buscando la coordinación efectiva con el resto de las fábricas de la zona: “multiplicidad; la re-categorización; los tickets; que los sábados después de las 13 hs se pague al 100%; comedor digno; estufas; ropa de trabajo” y “a igual trabajo, igual salario”, “todos a planta permanente” y por el “control y dirección de toda fábrica que suspenda, despida o cierre”; mocionando a toda la base obrera “paro general de la UOM para conquistar el pliego único de reclamos” y con este programa llamaron a “urgente a todos los trabajadores, a las organizaciones obreras, estudiantiles y de desocupados de todo el país” ¡Un ejemplo de programa obrero para unir las filas de los trabajadores!

Luego estalló el combate de Cerro Dragón en la Patagonia, donde los trabajadores para imponer sus demandas salieron a enfrentar a las transnacionales petroleras, las mismas que bombardean el mundo, e impusieron paros, ocupaciones de plantas, cortes de ruta y asambleas enfrentándose al feroz ataque de “Varela” Kirchner para aplastar a los trabajadores.

Mientras, la vanguardia combativa de distintos frigoríficos, encabezada por los obreros de Paty, con sus asambleas de base, paros, movilizaciones y peleando sistemáticamente por coordinar a los que luchan, son un gran ejemplo de cómo pelear por unir las filas obreras para luchar contra el ataque despiadado del gobierno y la patronal, y para enfrentar a la burocracia carnera.

Estos duros combates, verdaderas luchas testigo de la clase obrera, demostraron cómo pelear: con el piquete y la asamblea, que funcionaban como verdaderos comités de lucha donde los trabajadores tomaban la solución de sus problemas en sus manos, levantando además un programa para toda la clase obrera argentina.

También estos combates tuvieron en común el más profundo aislamiento y cerco por parte de la burocracia y también de la izquierda reformista del FIT que nada tuvo que ver con estas heroicas luchas. Lamentable.

Sacar las lecciones de estas gestas de la clase obrera, es preparar las condiciones de la victoria en los combates que están por venir. En esta edición de Democracia Obrera presentamos las primeras conclusiones de estos duros combates.

¡Hay que pararle la mano al gobierno de la Kirchner, agente de las transnacionales, los banqueros y la patronal esclavista!  Por un programa para unir las filas obreras, imponer un plan de lucha y preparar la Huelga General

El gobierno de Cristina, las transnacionales y la patronal esclavista atacan nuestro salario, nosotros debemos atacar sus ganancias ¡Son ellos o nosotros! Hay que hacer realidad el grito de los obreros y campesinos bolivianos: ¡Fuera Gringos! ¡Fuera las transnacionales!

¡Ningún impuesto a los que viven de su salario! ¡Que paguen las mineras que están desintegrando la Cordillera y que están exentas de pagar impuestos! ¡Que paguen los patrones y los banqueros! ¡Que lo pague la Kirchner y sus millonarios plazos fijos, con sus tierras y hoteles de lujo en la Patagonia!
¡Abajo el “impuesto a las ganancias” que le aplican al salario obrero! ¡Eliminación inmediata del IVA que pagan todos los explotados! ¡Asignaciones familiares para todos!

¡Impuestos progresivos a las grandes fortunas! ¡Expropiación sin pago y bajo control obrero de todas las fábricas, bancos, propiedades y bienes de las transnacionales imperialistas y la patronal esclavista! ¡Expropiación de las 2000 familias que controlan el 80% de la tierra más rica de Argentina! ¡Nacionalización sin pago y bajo control obrero del transporte público y todas las privatizadas!

¡Ni un solo peso para el FMI y para el pago de los Boden! ¡Basta de pagar la fraudulenta deuda externa  contraída por los capitalistas y pagada con el hambre y la miseria de los explotados!

Este debe ser el grito de guerra de los trabajadores para pelear y doblegar a este gobierno y a los piratas capitalistas porque ahí está el dinero para conquistar todas las justas demandas de la clase obrera. Por ello hay que atacar la propiedad y las ganancias de las transnacionales y la patronal. ¡El camino lo marcan los obreros petroleros de Cerro Dragón en Chubut, que durante 4 días ocuparon la planta de la Pan American Energy angloyanqui peleando por sus demandas! ¡Así se lucha!

¿Por qué nos vamos a contentar entonces con el 18%, el 23% ó el 25,5% de aumento de salario, cuando la inflación  anual es del 50%? ¡Ningún tope salarial! ¡Abajo las paritarias truchas! ¡Salario mínimo, vital y móvil de $7.500 YA, indexado con cláusula gatillo de acuerdo a la inflación y la carestía de la vida, medida por las organizaciones obreras! ¡Abajo los tarifazos!

¡Ningún desocupado más! ¡Trabajo digno y bajo convenio para los contratados, tercerizados, en negro y desocupados! ¡Reducción de la jornada laboral y reparto de las horas de trabajo entre todos los brazos disponibles! ¡A igual trabajo, igual salario! ¡Todos a planta permanente!
¡Abajo la esclavitud laboral de los Kirchner y su plan “Argentina Trabaja”! ¡Reincorporación de todos los despedidos y suspendidos! ¡Estatización sin pago y bajo control obrero de toda fábrica que cierre, suspenda o despida!

¡Triplicación inmediata del presupuesto de la salud y educación públicas! ¡4 horas de estudio y 4 horas de trabajo para la juventud obrera, garantizadas por la patronal y el estado!

¡Por un plan único de transporte controlado por una comisión de trabajadores, usuarios y familiares de los compañeros asesinados en el Sarmiento!
¡Por un plan de obras públicas bajo control de los trabajadores para garantizarle vivienda, escuelas y hospitales a todos los explotados!

¡Libertad inmediata a Tapia, Claros y todos los presos políticos! ¡Desprocesamiento inmediato de los más de 6.000 luchadores obreros y populares perseguidos! ¡Basta de juicios contra los delegados obreros!
Y contra esta justicia patronal que garantiza la impunidad de los asesinos de Kostequi, Santillán, Aníbal Verón, Fuentealba, los trabajadores masacrados en el Parque Indoamericano y en Jujuy, y demás mártires obreros: ¡Tribunales obreros y populares para juzgar y castigar a todos los asesinos de hoy y de ayer! ¡Comité único de autodefensa de todas las organizaciones obreras para defendernos de la represión del gobierno y de los pistoleros de la burocracia!

¡Por asambleas de base y una Coordinadora Nacional para unir a todos los que luchan!

¡Por un gran congreso obrero de delegados de base de trabajadores ocupados y desocupados!
¡Hay que imponer un plan de lucha nacional y la Huelga General!

Caro han pagado los trabajadores de Sabó y Cerro Dragón la profunda división de las filas obreras. Más caro lo pagaremos los trabajadores que nos veremos obligados a salir a luchar. No podemos permitirlo un minuto más. Desde las comisiones internas y los cuerpos de delegados arrancados a la burocracia, como de los Kraft, el INTI, Emfer, Arcor, Pepsico, Interpack, Alicorp, Zanón, la Línea 60, el frigorífico Rioplatense, la BOSCH, el cuerpo de delegados del ferrocarril Sarmiento y el Subte; desde los distintos sectores que han salido a lucha marcando el camino como los trabajadores de Indiel, Sabó, Paty y Cerro Dragón debemos llamar a poner en pie una gran Congreso Obrero de delegados de base de los trabajadores ocupados, desocupados, en negro, tercerizados, contratados, obreros inmigrantes, para que junto a los estudiantes combativos, los explotados que luchan en Famatina y demás ciudades contra el saqueo imperialista y demás sectores de las masas combativas, unificar los reclamos del conjunto de los trabajadores y avanzar en imponer un plan de lucha nacional y la HUELGA GENERAL para pararle la mano a la Kirchner y poner de rodillas a las transnacionales y la patronal esclavista.

Este es el camino para retomar el combate revolucionario del 2001 para “¡que se vayan todos y no quede ni uno solo!”

Para triunfar, la clase obrera necesita una nueva dirección revolucionaria internacionalista

León Trotsky, fundador de la IV internacional

¡Hay que refundar al trotskismo argentino como parte del combate por refundar la IV Internacional! Con las direcciones actuales no se puede luchar y mucho menos triunfar. Hace falta una dirección revolucionaria e internacionalista de la clase obrera para conquistar las condiciones de la victoria. Por ello los trotskistas de la FLTI, luchamos por un reagrupamiento internacionalista y revolucionario del proletariado mundial para poner en pie una dirección revolucionaria para aplastar al imperialismo con la revolución socialista: esa dirección es la IV Internacional que será refundada aplicándole durísimas derrotas a las direcciones reformistas del proletariado.

Esas mismas direcciones ya ha hace rato han abandonado el combate por el triunfo de la revolución proletaria. Son partidos enfermeros del capitalismo en bancarrota, que se niegan a decirle la verdad a la clase obrera: que ya no se puede pelear más país por país para enfrentar al capital financiero internacional que domina la economía mundial y somete al conjunto de los trabajadores a los peores padecimientos para hacerles pagar todos los costos de su crisis; y que el camino para enfrentar el ataque de los capitalistas es el que marcan los obreros y explotados del Norte de África y Medio Oriente que se han sublevado en heroicas revoluciones por el pan.
Es que justamente, el rol de estas direcciones es someter a la clase obrera país por país a su propia burguesía, dividiéndola del resto del proletariado mundial.
Son las mismas corrientes que en Argentina hace años rompieron con el trotskismo para abrazarse al régimen burgués reeditando viejas políticas de la socialdemocracia, del estalinismo y sus epopeyas, de Gramsci y demás traidores del proletariado mundial. Para poder pelear y triunfar, hay que poner en pie una fracción internacional de la clase obrera argentina, bajo las banderas de la IV Internacional. ¡La tarea de refundar al trotskismo argentino ha quedado en manos de los trotskistas de la FLTI! A dar juntos este combate llamamos a los obreros y jóvenes avanzados de la vanguardia argentina.

Comité Redactor