Columna de Opinión - 09 de febrero de 2022

Argentina

Una vez más:
El camino para aplastar las bandas fascistas y parapoliciales

Con fecha 9 de febrero de 2022, La Izquierda Diario escribe un artículo titulado “Complicidad Política. Muy grave: zona liberada para atacar la movilización contra el FMI en Córdoba.

La izquierda parlamentaria del frente popular ante el ataque de bandas fascistas a la marcha contra el FMI en Córdoba (ellos dicen solamente "grupos de ultraderecha que se envalentonan" Ceprodh) sólo atinan a repudiar lo que verdaderamente “constituyen hechos gravísimos de violencia política” como definen en la nota citada, agregando a este programa la exigencia del “inmediato esclarecimiento”. Preguntamos como concretamos la exigencia. Cri cri. Cri cri.
La posición de La Izquierda Diario,  con lamentables farfulleos, pone el grito en el cielo porque se “liberó la zona para atacar la movilización y curiosamente no había presencia policial”, dando una absoluta muestra que estamos ante gente que perdió la brújula para orientarse con un mínimo de sensatez comunista para enfrentar los ataques de “la ultraderecha envalentonada” como definen a estos grupos.

¿Cómo que se liberó la zona?
¿Cómo es que curiosamente no había presencia policial?
“Abogades” del Ceprodh, redactores de Izquierda Diario, y demases dirigentes del PTS, ¿creen realmente que “el estado nos cuida”? ¡¡El desbarranco de ustedes es total!! Han transformado el PTS gramsciano, en un PT… Albertista tardío en el que se les pega por todos los poros la campaña peronista del Frente de Todos y la pandemia. Parecería que los libros de Lenin que imprimieron hace unos años, entre ellos “El Estado y la Revolución”, que rápidamente pondría las cosas en su lugar, se les está llenando de telas de araña. No haría mal abrirlos de vez en cuando para no caer en el ridículo sobre todo si pretenden seguir hablando con terminología marxista, cosa que dudamos mucho.

Al revés de lo sostenido por ID, decimos que esto que pasó en Córdoba forma parte de “un grupo de tareas”, de un equipo fascista de la policía provincial, que sale a entrenarse y hacer gimnasia contrarrevolucionaria para aplicar golpes con patrullas móviles y disolver las columnas de manifestantes. Un típico accionar de la provocación fascista que se suma a la desplegada un tiempo atrás en Trelew y los entrenamientos de las escuadras policiales con un claro contenido anti obrero.
Como revolucionarios marxistas ante tanta impostura, nos vemos en la obligación y en el deber de poner fin a esta política servil de la izquierda reformista.

Una vez más alertamos a la clase obrera y  a la juventud combativa  que “la agudización de la lucha del proletariado  supone la agudización de los métodos de contraataque del capital”… y que en ellos “la burguesía no se conforma en ninguna parte con la policía oficial y el ejército”… “incluso en épocas pacificas  la burguesía mantiene batallones militarizados de rompehuelgas  y grupos armados de asesinos en las fábricas” y ante el menor indicio de peligro la burguesía moviliza  “destacamentos fascistas semilegales e ilegales”… “porque se da perfectamente cuenta que en la época actual la lucha de clases tiende irresistiblemente a transformarse  en guerra civil” como sostiene  el Programa de Fundación de la IV Internacional en 1938.

De comités de autodefensas, piquetes obreros, milicias obreras, frente único obrero para aplastarlas, darles su merecido, su escarmiento, y que no asomen cabeza, para enfrentar al fascismo o a los “grupos de ultraderecha envalentonados”, de todo eso ni hablar. No vaya a ser que con el programa marxista, que por otra parte les quema las manos, espanten a sus aliados del campo Nacional, democrático y progresistas contra el campo de la reacción. Fiel a su orientación de colaboración de clases copian los gestos y adoptan el programa del Estalinismo entregador.

Reniegan incluso de las lecciones de la lucha contra el fascismo en Latinoamérica en los años 30.  Parece que esas lecciones solo sirven para dar charlas o escribir artículo para la izquierda diario, pero no para la vida misma.

PTS y demás... ¡¡Al precipicio!!
La lucha de clases no perdona la cobardía.

Rogelio Romero