Columna de opinión
La vieja receta reformista del NMAS y el FIT-U: conquistar la reducción de la jornada laboral por vía parlamentaria
Que alguien les diga a Manuela del NMAS y a los candidatos del FIT-U que para conquistar la distribución de las horas de trabajo entre todas las manos libres para producir y el salario mínimo de 100 mil pesos, hará falta algo más que una “marea verde”.
Díganles que la “vía pacífica al socialismo” no va y que sus “sororas”, las burguesas liberales de los partidos patronales, en este caso estarán con Milei y la yuta disparando al pueblo sublevado.
Parece mentira tener que decir esto cuando aún está fresco el recuerdo de los 40 mártires del 2001, y ni hablar del genocidio de Videla contra la sublevación de la clase obrera del Cordobazo, el Villazo y las Coordinadoras.
Atacar la propiedad de la tierra y al imperialismo solo se logrará con el método de la guerra civil de clases. De eso que estos candidatos no quieren ni nombrar que se llama revolución socialista.
Sean audaces… Un giro a la izquierda por la revolución. No vendan humo.
La jornada laboral de 8 horas se consiguió con huelgas generales revolucionarias mundiales... con la clase obrera dejando miles de muertos.
¿Cómo van a decir que se conquista con una lucha de presión parlamentaria?
Pero ni la socialdemocracia de principio del siglo XX se animó a semejante chamuyo...
Pero bueno… Quieren ser “tercera fuerza” y “renovar a la izquierda” con viejas recetas reformistas. Ahí está la consecuencia: han devenido en verdaderas fuerzas socialdemócratas.
Juan Gamarra
