Huelga en la Escondida:
Se comienza a gestar un nuevo dique de contención para garantizar el aislamiento de la lucha
A dos semanas de iniciada la huelga de los trabajadores de planta de la mina de cobre más grande del mundo, operada por la multinacional minera BHP Billinton, junto a Rio Tinto y JECO (Mitsubishi), ésta está signada por el más absoluto hermetismo por parte de su dirección. A las puertas del yacimiento, a 3100 metros de altura, en el que acampan los huelguistas -que se encuentra a unos 200 Km de la ciudad de Antofagasta- se encuentran apostados los mineros que mantienen paralizado el 7% de la producción del cobre mundial.
Pero no sólo el aislamiento viene de la dirección del sindicato N°1 de la Mina La Escondida que dirige el FTM (Frente de Trabajadores Mineros), -que a su vez dirige gran parte de los sindicatos de planta de la minería privada en la segunda y tercera regiones de Chile- sino del conjunto de las direcciones de la izquierda y el movimiento obrero, que, salvo casos particulares, no han emitido ni siquiera una declaración al respecto.
Así, el día miércoles apareció en internet una convocatoria relámpago a una protesta en las puertas de las oficinas de BHP Billinton en Santiago para el día jueves 24 a las 11 de la mañana firmada por el Comité de Iniciativa de Unidad Sindical (CIUS), Alternativa Obrera (la colateral “obrera” del PTR), y el CTT (Comité de Trabajadores de El Teniente).
En la concentración (cuya convocatoria fue realizada a última hora y por internet) no asistió ningún sector independiente, ya sea de trabajadores o estudiantes. Sólo estuvieron presentes dirigentes de los aparatos que convocaban, los que no sumaban más de 20 personas.
Se dio inicio al evento desplegando lienzos del CIUS, un afiche de CTT/CIUS que demandaba “A igual pega, igual paga” (a igual trabajo, igual salario) y la bandera de Alternativa Obrera. Luego de unos canticos, tomó la palabra un representante del CIUS que leyó una declaración que hablaba contra la reforma laboral, por abajo el subcontrato (la tercerización) y de apoyo a la huelga de los trabajadores de La Escondida. A continuación, tomó la palabra Edward Gallardo del PTR por Alterativa Obrera, como parte del “Frente Nelson Quichillao”, quien demandó solidaridad efectiva para los huelguistas de parte de todas las direcciones sindicales ¡Incluida la de la burocracia rompehuelgas de la CUT!, lo siguió Francisco Flores (PTR) por la vicepresidencia de la FECH, quien habló de la solidaridad del movimiento estudiantil hacía la huelga. Después tomó la palabra Yuri Sandoval del CTT, que se refirió al estado en el que se encuentra el sector contratista (tercerizado). La actividad no duro más de 20 minutos luego de los cuales escuetamente se disolvió.
La que si tuvo una asistencia nutrida e importante fue la prensa burguesa. Se hicieron presentes para cubrir el evento CNN, C13, Telesur, Radio Biobío, cooperativa, TVN, EFE, Reuters, el mostrador entre otros. Los que, entre fotógrafos, camarógrafos y noteros sumaban más personas que las que convocaron a la protesta.
Reasignación al PTR junto al CIUS: Montar un dique para contener posibles desbordes del sector contratista.
La FTC (Federación de Trabajadores del Cobre) siguiendo los pasos del Colegio de profesores, dejó la CUT. Ésta última, una verdadera oficina de asuntos laborales del gobierno, que no representa ni a su familia, ha quedado más que desprestigiada para cumplir su función de engañar y contener a los trabajadores. Pero no podemos encontrar sólo en este hecho el reacomodo del PTR respecto de esta central sindical. Este pequeño grupo declaró en su prensa digital, a propósito del alejamiento de la Federación de la CUT, que éste se debía a desacuerdos de burócratas del PC y el PS (en medio de la huelga de La Escondida), y no por la necesidad que ve la burguesía de controlar posibles irrupciones, con nuevos diques de contención, el sector contratista al calor de la huelga. A estos últimos la patronal los ha recibido durante los últimos 18 meses con un brutal ataque, que a punta de traiciones y un muerto en la represión criminal de los pacos, ha impuesto más de 50 mil despidos, aumentos brutales en los ritmos de producción, incrementos siderales en las tasas de “accidentes” fatales en las faenas. Encima sin ajustes salariales y bonos de miseria.
Ante esto el PTR debería responder la pregunta ¿Que hace junto a los que le hacen “paralelismo a la CUT”? (Como ellos denominaban a quienes correctamente se oponían a ésta burocracia traidora). La defensa de esta odiada central, que tiene nutrido y probado prontuario de traiciones a la lucha de los trabajadores, signado por su nula representatividad -menos del 5% de la clase obrera- ha sido la política histórica de este grupo ante el movimiento obrero chileno, más allá del cinismo con el que hable de los Cordones industriales. Condenar de “paralelismo a la CUT” ha sido la critica que ha dirigido a todo aquel que se levantase contra la CUT.
Por otro lado, el CIUS, desaparecido públicamente hasta la marcha aniversario por el asesinato de Juan Pablo Jiménez, en la que todos callaron la huelga de La Escondida y su consigna “Igual pega, igual paga”, debería responder: ¿Qué hace junto a los que hasta ayer los acusaban de “dividir a la clase obrera, haciéndole paralelismo a la CUT”, defendiendo a ésta del odio de los trabajadores, a los que llamaba a “incidir” en la reforma laboral de Bachelet y que el CIUS denunciaba y llamaba a derrotar?
Es evidente que hay un reacomodo de viejos aparatos para impedir que este combativo y castigado sector de la clase obrera se ponga a la cabeza de los mineros de planta de La Escondida.
Para esto, dado el alto desprestigio que justamente ganaron los que pusieron en pie el Frente Nelson Quichillao, en el periodo previo, para salvar a la dirección del Partido Comunista al frente de la CTC (Confederación de Trabajadores del Cobre) usurpando el nombre del mártir para contener el odio de la base, permitiendo que esta dirección imponga la amarga derrota que viven los contratistas, es que viene a jugar un rol clave el CTT.
Una consigna vacía: la solidaridad
El PTR repite el mantra de la solidaridad. Más en este caso ¿Qué significa solidaridad? ¿Qué “Teletón” puede servir a la huelga en estos días? Lo cierto es que la clave de esta huelga es el aislamiento que le impone su dirección y al que asiste toda la izquierda. Callan que los mineros de La Escondida tienen la llave del fin a la reforma laboral y el subcontrato, que si bien sus dirigentes se cuidan muy bien de mantener por fuera de ésta a los contratistas de la minera en sí misma la lucha encierra este asunto. La única solidaridad que puede servir a la huelga, es la unificación de los reclamos, la unidad, la coordinación de la lucha, avanzar a la Huelga general. Con la “solidaridad” simbólica que vienen recibiendo los huelguistas, lo único que conseguirá la clase obrera será sumar otra derrota.
POI-CI de Chile - Adherente a la FLTI |
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