A 13 años de los combates de octubre del 2003 que dieron paso a la grandiosa revolución boliviana:
Bajen o suban los precios del petróleo y de los minerales, el gobierno pro yanqui de Morales sigue garantizando el pago de la deuda externa a los bancos imperialistas y las jugosas ganancias a las transnacionales saqueadoras de la nación a costa de dejarnos en el hambre y la miseria
Para derrotar el ataque de Morales, un gobierno de la Banca Morgan y de Wall Street
y de las transnacionales imperialistas:
¡HAY QUE RETOMAR EL CAMINO DE LA REVOLUCIÓN OBRERA Y CAMPESINA DEL 2003-2005!
¡Fuera la burocracia colaboracionista de la COB y la FSTMB!
Recuperemos la COB: ¡Por un Congreso Nacional de la COB!
Con delegados de base con mandato revocable, sin burócratas colaboracionistas, ni ministros ni senadores “obreros”
Así como fuera en el 2003, con la alianza obrera y campesina, debe volver a tronar el grito de la revolución boliviana, ahora contra el gringo de Morales:
“¡Fusil, Metralla, Bolivia no se calla!”, “¡Fuera gringos de Bolivia!” y
“¡El gas para los bolivianos!”
Han pasado 13 años del inicio de la heroica revolución obrera y campesina del 2003 como eslabón de la revolución latinoamericana y los combates antiimperialistas de la clase obrera en todo el continente en respuesta a la ofensiva imperialista.
En aquellos días, desde febrero a octubre del 2003, las masas pugnaban por abrirse paso contra las direcciones reformistas y conciliadoras de sus organizaciones. El gobierno de Goni sostenido por las treguas de los dirigentes de la COB, había lanzado el “impuestazo”, un ataque brutal a las condiciones de vida de la clase obrera y de las masas explotadas, para tirarle la crisis de los capitalistas sobre sus espaldas. Los obreros y campesinos pobres respondieron librándose del control de las direcciones burocráticas. Del 12 al 16 de octubre, fueron cinco días de feroces combates con La Paz cercada, con barricadas, con la huelga general revolucionaria, bloqueo de caminos. Más de 100 muertos y cerca de 500 heridos dejaron los obreros y los campesinos pobres –sobre todo de los explotados de El Alto y mineros en Ventilla- en esas heroicas jornadas. El 17 de octubre, la jornada revolucionaria se convirtió en una fabulosa acción independiente de masas que irrumpió e hizo saltar la tregua de los dirigentes conciliadores por los aires, abriendo una enorme crisis revolucionaria en las alturas. El gobierno asesino de Goni era derrocado por las masas y con la intervención decisiva de los mineros, que con dinamita en mano, marchaban hacia la ciudadela del poder de la burguesía y su gobierno, enfrentándose a la casta de oficiales del ejército asesino. A la clase obrera boliviana se le planteaba así la cuestión candente del poder que estaba allí al alcance de la mano.
Fue en el parlamento desprestigiado y odiado por las masas, convocado entre bambalinas, que le dieron el poder a Carlos Mesa, con el voto directo de los diputados del MIP de Felipe Quispe y del MAS de Evo Morales; Jaime Solares de la COB; Roberto de la Cruz de la COR de El Alto entre otros, fueron los que transformaron el enorme triunfo de la caída de Goni y la perspectiva revolucionaria que este proceso abría, en un verdadero salvataje del régimen burgués de conjunto.
La revolución del 2003 puso al orden del día que se ponga en pie las milicias obreras de la COB como en el ‘52 y que la clase obrera se hiciese del poder imponiendo un gobierno provisional revolucionario de obreros y campesinos pobres que resolviera todas las demandas de las masas explotadas. Esta revolución, que fue tan solo un eslabón de la revolución latinoamericana, fue expropiada por el gobierno de frente popular de Morales y por los bolivarianos y su farsa de “revolución bolivariana”.
Desde entonces, la burguesía con sus sirvientes de la burocracia colaboracionista de la COB se encargó de que nunca más los mineros acaudillaran al conjunto de los obreros y los explotados, y salieran de las calles y la lucha.
Así, cuando los mineros salían a la lucha en el 2006-2007 por trabajo digno para todos, los burócratas de la COB los dejaban solos y separados del conjunto de los trabajadores para que Morales los reprimiera, humillara y asesinara a sus compañeros, como en Caihuasi del 2008. Cuando los trabajadores salían a combatir los ataques de Morales como en el 2010 con el gasolinazo, el 2011 atacando a los TIPNIS, entre otros, la burocracia garantizaba que los mineros no salieran a la lucha y los aislaba en los centros mineros con falsas promesas de que con Evo conseguiríamos la nacionalización de las minas. Y no hubo nacionalización, solo un brutal ataque a sus conquistas que aún siguen pagando.
Y finalmente, durante la huelga de mayo del 2013, la burocracia Ronald Colque –dirigida por el POR- , termina entregando a los mineros desarmados en los bloqueos de Caihuasi, donde fueron brutalmente reprimidos, detenidos. Mientras la burocracia de Trujillo desde la COB, entregaba en negociaciones la huelga y las demandas de jubilación digna al gobierno de Morales. Con los mineros derrotados y dejados a su suerte en las calles de La Paz, la burocracia logra derrotar la huelga. Solo así pudieron meses más tarde, disolver la COB en el MAS transformándolo en apéndice de este. Así estrangularon la revolución del 2003-2005. Y solo luego de esto pudieron, los bolivarianos y los nuevos ricos del PC cubano a la cabeza de los Castro, entregar la revolución cubana – una de las más grandes conquistas del proletariado mundial- a las transnacionales, Cargill, Coca Cola y al imperialismo con la restauración capitalista en Cuba.
Hoy cuando vuelven los obreros fabriles al grito de: “¡Evo y Goni la misma porquería!”, “¡Ya va a caer, ya va a caer, este gobierno represor…ya va a subir la clase obrera al poder!”, enfrentando por segunda vez al gobierno lacayo de Morales y los burócratas de la COB. Cuando vuelven los explotados de El Alto combativo y el proletariado busca ponerse de pie para enfrentar los ataques del gringo Morales, la crisis es que los mineros no están porque fueron derrotados y entregados por las direcciones burocráticas que estuvieron al frente de la FSTMB y la COB, sostenidos por el POR.
Toda la burocracia de la COB y la FSTMB logró sacar a los mineros de escena propinándoles durísimas derrotas y traiciones a su lucha, por ello hoy ante la caída de los minerales le han impuesto un brutal chantaje del cual la burocracia colaboracionista es garante y son cómplices de la súper explotación y el ataque brutal a los mineros. Gracias a los burócratas colaboracionistas, miles de mineros súper explotados en las cooperativas son perseguidos y cazados como animales por el gobierno, luego de haber sido usados como carne de cañón por los patrones cooperativistas que negociaban el reparto de la renta minera a costa de los muertos que los mineros de base dejaban en los bloqueos de principios de septiembre. ¡Una verdadera tragedia!
¡Basta de derramar sangre minera! ¡Los mineros deben volver a ponerse de pie! ¡Congreso Nacional minero para recuperar todas nuestras conquistas, el salario, el trabajo y la jubilación digna!
Luego de haber hipotecado los recursos naturales y endeudar Bolivia con Wall Street con una deuda externa fraudulenta que ya suma hasta el mes de agosto, $us 6.853,8 millones, (representa el 19,4% del PIB). Morales ahora revienta las conquistas obreras, hambrea a los trabajadores y campesinos pobres e impone recortes presupuestarios en salud, educación, etc. para garantizar el pago a la Banca Morgan y a los parásitos de Wall Street. ¡Morales es un gobierno de la Banca Morgan y a Wall Street! ¡Hay que derrotar el ataque de las transnacionales y el gobierno lacayo de Morales!
¡Basta de hambre, miseria y súper explotación! Los obreros fabriles marcan el camino de lucha al conjunto de los trabajadores porque llaman a recuperar la COB, a derrotar al soberbio de Evo y a conquistar un gobierno y campesino. Profundicemos el camino de lucha de los fabriles llamando a los mineros para pelear en común, levantando las banderas de lucha por la: ¡Nacionalización de la minería y de los hidrocarburos sin pago y bajo control de los obreros! ¡Por una minería única estatal!
Los campesinos pobres tienen dos alternativas: o siguen atados al gobierno anti obrero de Morales, que no les dio la tierra, ni el pan y más al contrario, más del 80% de las mejores tierras fértiles se las entregó a la oligarquía terrateniente de la Media Luna Fascista, de eso se trató el pacto de Morales con la Media Luna y su constitución reaccionaria. O están con la clase obrera luchando por la nacionalización de los hidrocarburos, la tierra para los campesinos pobres, como en el 2003-2005 al grito de: “¡Ni 30 ni 50 %, nacionalización Ya!” ¡Fuera gringos! Solo la clase obrera puede garantizarle la tierra a los campesinos pobres y créditos baratos expropiando a la banca imperialista y las transnacionales. Hay que soldar nuevamente en las calles la alianza revolucionaria de obreros y campesinos pobres. ¡Ni olvido ni perdón por nuestros caídos en la revolución boliviana del 2003-2005!
¡Libertad inmediata a los comuneros de Ayo Ayo! ¡Desprocesamiento a todos los obreros fabriles! ¡Libertad inmediata a los estudiantes por luchar, a Boris Arancibia! ¡Libertad inmediata de los mineros super explotados en las cooperativas! ¡Libertad a todos los presos políticos por luchar!
¡Paso a la clase obrera! Recuperemos la COB de manos de la burocracia colaboracionista. ¡Congreso Nacional de la COB!
Desde allí la clase obrera junto a los fabriles debe tomar nuevamente en sus manos la lucha por la:
¡Nacionalización sin pago y bajo control obrero de la minería y los hidrocarburos!
Allí está la plata para la estabilidad laboral, el salario y la jubilación dignas, los hospitales y escuelas gratuitas y de calidad
No al pago de la fraudulenta deuda externa
¡Fuera Wall Street de Bolivia y América Latina! ¡Bolivia será socialista o será colonia de los yanquis!
Reproducimos aquí, en homenaje a los mineros de Huanuni y de Bolivia, las resoluciones revolucionarias que se votaron en la COR de El Alto, por decenas de mineros, organizaciones obreras y de los campesinos pobres, declararon a El Alto, como el “Cuartel General de la revolución boliviana”. Nos roban el salario, nos roban el pan y el trabajo y la tierra a los campesinos pobres. ¿No quieren robar la revolución? ¡Basta Ya! ¡Viva el programa revolucionario de la COR de El Alto! Este es el programa que necesitamos para derrotar al gobierno lacayo de la Banca Morgan y las transnacionales
Resoluciones de la COR de El Alto del 8 de junio del 2005:
El 8 de junio, reunido el ampliado de la COR –El Alto junto a los mineros asalariados, las juntas vecinales, las organizaciones campesinas, y la COB, resolvieron:
- Se declara a El Alto como cuartel general de la revolución boliviana.
- Se ratifica la constitución de La ASAMBLEA POPULAR nacional originaria como instrumento del poder nacional, quedando la dirección en manos de la COR-El Alto, COB, FEJUVE, CSUTCB, CONFEDERACIÓN DE GREMIALES Y FSTMB.
- La Asamblea Popular Nacional Originaria debe fortalecerse con delegados de base elegidos en asambleas y cabildos, así como con la constitución de asambleas populares departamentales y locales. Esta tarea queda en manos de las respectivas CODs. Y CORs.
- Se instruye la constitución de Comités de Autodefensa, de Autoabastecimiento, de organización política y prensa, los dos primeros deben desarrollarse en cada distrito, en cada junta de vecinos y en cada sector movilizado.
- Se ratifica la lucha por la nacionalización e industrialización de los hidrocarburos manteniéndose la huelga general indefinida y el bloqueo nacional de caminos.
- Rechazan todas las trampas burguesas de sucesión constitucional y elecciones adelantadas.
8 de junio del 2005 |