Ecos del 1º de Mayo: Chile

El acto del gobierno de la Bachelet y los “socialistas” de los generales pinochetistas, sus ministros burgueses, los golpistas de la DC y los burócratas de la CUT:  una trampa para someter a los trabajadores a los pies de sus verdugos

Una vez más, fue la burocracia de la CUT la encargada de organizar el acto oficial del gobierno de la Bachelet este 1° de Mayo, bajo el programa de “Reforma Laboral, Más Democracia. Nueva Constitución, Mejor Chile” que fue el que encabezó la movilización por La Alameda y luego el acto central. Es decir, con el programa de apoyo a las trampas de las “reformas” del gobierno, con el cual buscan terminar de sacar de las calles a la clase obrera, los estudiantes combativos y las masas oprimidas; para que nunca más se luche por “la educación pública y gratuita financiada con la renacionalización sin pago y bajo control obrero del cobre” contra las transnacionales imperialistas, y así fortalecer al régimen cívico-militar pinochetista al servicio de Obama y los piratas de Wall Street.

Por eso no faltaron en esta oportunidad los ministros burgueses del gobierno agente del imperialismo. Tal como sucediera el 1° de Mayo del año pasado, esta vez volvieron a participar Javiera Blanco, Ministra del Trabajo, ligada a los golpistas de la DC, quien fuera “Subsecretaria de Carabineros” desde el 2006-2010, siendo responsable de toda la represión desatada durante el anterior gobierno de la Bachelet contra la clase obrera y los explotados, y del asesinato de los compañeros Rodrigo Cisternas y Matías Catrileo. También se hicieron presentes nuevamente Álvaro Elizalde, el Ministro de la Secretaría General de Gobierno, del PS, y Claudia Pascual del PC, del Servicio Nacional de la Mujer. Todos estos, ministros del actual gabinete del gobierno.

En este acto del régimen cívico-militar pinochetista de la Derecha, la Concertación y el PC, como no podía ser de otra manera, también participaron las fuerzas de la Democracia Cristiana, esos golpistas contrarrevolucionarios que junto al chacal Pinochet bañaron en sangre a la clase obrera de los ’70. Junto con éstos desfilaron las fuerzas del resto de los partidos de la Concertación, del PPD, el PS, el PC y sus simpatizantes del PRO.

Los burócratas rompehuelgas de la CUT, que no representa a la clase obrera chilena, junto a ex burócratas estudiantiles, verdaderos carreristas políticos que fueron los máximos entregadores de la lucha de la juventud, como Camila Vallejos, buscaron con esta acción continuar sometiendo y subordinando a la clase obrera y las masas explotadas a los pies de los verdugos de los trabajadores, de este gobierno de los “socialistas” de los generales pinochetistas y de las transnacionales que saquean el cobre, que es el encargado de comandar los peores ataques contra las masas al servicio de Obama y de atar con dobles y triples cadenas la nación al imperialismo con los TLC y el Pacto del Transpacífico.

Junto a todos ellos, grupos de los renegados del trotskismo como el PTR (grupo satélite del PTS de Argentina) y el MST (UIT-CI, Izquierda Socialista de Argentina) marcharon con pequeñas delegaciones junto al gobierno de colaboración de clases de la Bachelet y los traidores del Partido Comunista.
El PTR ha salido a acusar a los sindicatos y organizaciones obreras del Comité Iniciativa por la Unidad Sindical (CIUS) que no se sometieron a la burocracia de la CUT y que este 1° de Mayo realizaron una marcha independiente del gobierno, de “dividir a los trabajadores de base”. El PTR condena a todo aquel que “le hace paralelismo a la CUT” y lo responsabiliza de dividir las filas obreras. Una verdadera infamia, cuando han sido los burócratas de la CUT los principales encargados de dividir a la clase obrera, de entregar y traicionar sus luchas, de salvarle la vida una y otra vez al régimen cívico-militar y sus gobiernos, y a las transnacionales imperialistas que saquean el cobre.
El PTR es un apéndice declarado del PC chileno, que en pos de “no hacerle paralelismo a la CUT” le hace paralelismo a la clase obrera y marcha un Día internacional de los Trabajadores” con el gobierno, sus ministros burgueses y sus partidos sirvientes de las transnacionales, tal como lo hicieran el 1° de Mayo del 2014. Como en aquella oportunidad, estas corrientes deberán hacerse responsable de todas las medidas que tome “su” gobierno.
No nos extraña su accionar. Ellos no tienen problemas en marchar con los “socialistas” del pinochetismo que mantienen encarcelados a decenas de campesinos de origen étnico mapuche, porque apoyan a Syriza, que está en el gobierno de un país imperialista como Grecia, que son los carceleros de la juventud rebelde. Y que también este 1° de Mayo marcharon en Atenas con sus ministros como Yanis Varufakis, el Ministro de Finanzas, encargado de acordar con los piratas del Bundesbank, las transnacionales de Wall Street y el FMI el ataque contra los trabajadores y explotados griegos.
Ni mucho menos tienen problema en marchar con los “pacos de rojo” del PC y la columna de los castristas del MIR oficial que también se hizo presente, cuyo acto oficial fue el encabezado por Castro y Maduro en La Habana, donde se celebró la entrega definitiva de Cuba a las garras de la Cargill y la Coca Cola, rindiéndole honores al carnicero Obama.

Desde el POI-CI / FLTI, este 1° de Mayo llamamos a marchar y participamos de la convocatoria realizada por el CIUS, donde se congregaron decenas de organizaciones obreras buscando una alternativa, al grito de “abajo la reforma laboral” y “hay que unir a la clase trabajadora”, que ni siquiera llegaron a realizar su acto porque concentró la furia del gobierno y toda su represión que fue descargada sin piedad mediante los pacos y las Fuerzas Especiales asesinas apenas la movilización llegaba al palco.
Desde esa trinchera peleamos por nuestro programa de unir las filas obreras y coordinar a los que luchan, para retomar el combate revolucionario del 2011 por la educación publica y gratuita y la renacionalización sin pago y bajo control obrero del cobre, por preparar y organizar la Huelga General para derrotar a las fuerzas que se concentraron en el acto del gobierno y el régimen pinochetista y que hoy descargan su ataque contra los trabajadores, para refundar al movimiento obrero de abajo hacia arriba sin burócratas de la CUT lacayos del régimen cívico-militar con los comités de fábrica como fueran los Cordones Industriales de los ’70, porque los trabajadores nos organizamos como queremos, y así derrotar al Código del Trabajo pinochetista y la “reforma laboral” hecha al molde de las transnacionales de Wall Street. En este camino es que peleamos porque las organizaciones obreras que componen el CIUS no pueden sólo ser la unidad de las direcciones sindicales y que la base obrera continúe dividida, sino que, garantizando asambleas de base de cada organización, el CIUS debe convocar a un Congreso Obrero Nacional con delegados de base del movimiento obrero junto a los estudiantes combativos y los campesinos pobres para volver a poner de pie a los explotados de Chile.

Este 1° de Mayo, en Chile no hizo más que expresarse como en todo el mundo, las dos trincheras que existen dentro del proletariado mundial. De un lado, la “nueva izquierda” del Foro Social Mundial con los verdugos del proletariado. Del otro lado, los que en este “Día internacional de los Trabajadores” levantamos la bandera por la revolución socialista y la unidad de la clase obrera internacional, por que el proletariado chileno y su heroica juventud recuperen el combate revolucionario que le robaron sus direcciones y se pongan de pie junto a los trabajadores afroamericanos y el proletariado de EE.UU. que al interior de la bestia imperialista enfrentan a Obama, junto a los heroicos obreros cubanos, junto a la juventud griega que pelea contra Syriza, junto a los mineros del Donbass de Ucrania, junto a la resistencia siria y de todo el Magreb y Medio Oriente. Es en esos combates donde realmente flamean las limpias banderas de la IV Internacional, que los destructores del trotskismo buscaron poner a los pies de los “socialistas” de los generales pinochetistas en Chile, como lo hacen con Syriza, Castro y su jefe Obama.  

Corresponsal del POI-CI de Chile