Argentina - 27 de mayo de 2020 Desde Villa Azul, el barrio obrero convertido en gueto por Fernandez-Kicillof, entrevista a Lorena, vecina pasaje 7: "La respuesta del gobierno fue enrejarnos, imponer autoridad antes que ayuda" Lo primero que queríamos saber es que nos cuentes de la situación que se vive en el barrio desde que se conoció el brote de coronavirus La situación que se vive en el barrio bastante tensa, bastante fea, bastante mala, con mucho miedo, con mucha angustia, con mucha incertidumbre, con mucha necesidad de todo porque nosotros, al no tener ningún infectado, andábamos todos en la calle como si nada en cuanto sabíamos muy bien que estaba la posibilidad y de pronto, no se cuidó como se tenía que haber cuidado. Las cosas empeoraron y el municipio no tomó medidas cuando las tenía que haber tomado. Acá es un lugar donde habitan muchas personas y sabían que tenían que tener un poco más de control. ¿Cuál fue la primera reacción del gobierno cuando supo del brote? Lo primero fue enrejarnos. Puso 300 policías alrededor de la villa. No dejarte salir a comprar pan. Ver un montón de cosas que no se veían desde hace un montón de tiempo atrás: los militares en la calle, los camiones, la gente que se pelea por comida. Eso trajeron, porque no trajeron tranquilidad. Primero pusieron autoridad antes que poner ayuda. ¿Cómo están en cuanto a provisiones de alimentos y elementos de higiene? El municipio vino el lunes y nos dio un bolsón con un pollo, con un par de fideos, un azúcar, un aceite y un par de verduras. Y después no aparecieron hasta hoy que nosotros, principalmente, en el pasaje 7… Es que del lado de Ramón Franco para adelante, por donde están ustedes, para el lado del Polideportivo, la gente tiene más atención. Pasando el Polideportivo, hay dos tiras más de viviendas, que ahí estamos viviendo las 27 personas que somos de pasaje 6 y pasaje 7, que no recibimos asistencia y nadie nos venía ni siquiera a mirar. Supimos que hoy llamaban a una reunión de vecinos para que ver cómo tomaban la solución de lo que estaba pasando. ¿Pudieron hacer algo? Sí, a las 4 de la tarde nosotros, los vecinos del pasaje 6 y del pasaje 7, nos juntamos para hacer una reunión, a la cual fuimos porque nos enteramos por un comentario de las casas de adelante, que estaba el intendente. Nos juntamos nosotros para hacer una reunión en la cuadra del pasaje 7. Nos dijeron que estaba el intendente y lo fuimos a buscar al intendente. El intendente dijo que iba a venir. Lo estuvimos esperando. No pudo venir el intendente pero vino la señora Magdalena que es la mujer del intendente. Y Magdalena habló con todos los vecinos y nos preguntó qué necesitábamos. Y nosotros le dijimos, principalmente atención, un termómetro para que nos podamos la temperatura, un estudio a una familia que tenemos que puede ser portadora porque estuvo con gente que la llevaron porque estaba contagiada. Acá en esta cuadra del pasaje 6 y del pasaje 7 ni siquiera habían desinfectado. Ahora mandaron para desinfectar. Magdalena dio la palabra y ahora está cumpliendo. Pero si querés te cuento lo que pasamos para poder llegar hasta acá. Nosotros queremos una atención del municipio, que es la gente que nos tiene que dar una solución. Vinieron y nos dieron una palabra. Pero esto va a corto plazo, porque si nosotros pedimos un termómetro, pedimos desinfección y pedimos cosas de higiene, no nos las pueden traer de acá a 72 horas. Las tienen que traer ahora porque por algo las estamos pidiendo. Si para mañana esto llega a cambiar, yo voy a ser la primera en salir a decir que las cosas están cambiando y que las personas que nos tienen que contener y asistir no están presentes. Yo en estos momentos, desde el pasaje 6, pasaje 7 y Lincoln nosotros hicimos un pedido y armamos un petitorio para que nos den bolilla porque a nosotros no nos venían ni a ver. Hoy por lo menos se acordaron que existimos. Y hasta ahora las cosas se están cumpliendo. Si mañana la situación se pone al revés, ustedes van a ser los primeros en enterarse que las cosas están mal. Pero ponele a mí me dijo: “te voy a mandar termómetro” y me mandó. Mandó a desinfectar las puertas de las casas. Están cumpliendo con lo que estamos necesitando. Antes no nos escuchaban. Bueno, ahora nos escuchó y está cumpliendo. La vez que no nos cumplan van a tener mi opinión y la de todos los vecinos que vamos a estar dando nuestro testimonio para ustedes, para que nos ayuden a nosotros.