Sudáfrica - 29 de abril de 2018

Primeros apuntes sobre la huelga general del 25/4 convocada por el NUMSA y el SAFTU

CIENTOS DE MILES GANARON LAS CALLES
EN TODA SUDAFRICA CONTRA EL GOBIERNO DEL CNA…
Demostrando el odio de los explotados contra el gobierno y el régimen infame

LOS BUROCRATAS DE LA COSATU CARNEREARON LA HUELGA PORQUE SON LOS IMPULSORES DE LA REFORMA LABORAL

¡Fuera los agentes de la Angloamerican
y la burguesía negra del movimiento obrero!

Para preparar los próximos y superiores combates:
¡Hay que echar a los traidores, conquistar la unidad de los que luchan y un pliego único de reclamos!
CONGRESO DE TRABAJADORES OCUPADOS, DESOCUPADOS, DE ESTUDIANTES COMBATIVOS,
DE INMIGRANTES Y DE LOS QUE LUCHAN POR EL AGUA Y LAS DEMANDAS DEL PUEBLO POBRE

¡Abajo Ramaphosa y el régimen de la reconciliación!

¡Abajo la reforma laboral! ¡Salario de 12.500 Rands como pedían los mineros de Marikana! ¡Reducción de la jornada laboral! ¡Trabajo digno para todos! ¡Agua gratuita para todo el pueblo pobre!

¡Expropiación sin pago y bajo control obrero de todas las propiedades y tierras de las transnacionales y los banqueros imperialistas y sus socios de la burguesía local!

Este 25 de abril se realizó una nueva y enorme demostración de fuerzas de la combativa clase obrera sudafricana. Decenas de miles de trabajadores, a pesar y en contra de la burocracia del COSATU, ganaron las calles exigiendo la suba del salario mínimo y demostrando su repudio total a las propuestas de cambio en la ley sobre huelgas, que viene a ponerle un mayor cepo estatal (superior al que ya existe) para controlar y mitigar las acciones de lucha de la clase obrera.

Desde las primeras horas de la mañana se fue desarrollando la Huelga General; impulsada y convocada por el NUMSA (Sindicato Metalúrgico) y la SAFTU (Federación Sudafricana de Sindicatos), que además contó con adhesión y participación de la Unión General de los Trabajadores Industriales del África del Sur (GIWUSA), la Unión Nacional de Servicio Público y Trabajadores Afines (NUPSAW), el Sindicato de los Trabajadores del Sector Público Liberado del África del Sur (SALIPSWU), la Unión de Comunicación y Tecnología de la Información (ICTU), y el Foro de Trabajadores Simunye.

Hubo marchas, piquetes, concentraciones y cortes rutas en las principales ciudades del país, como Ciudad del Cabo, Johannesburgo o Pretoria. Movilizaciones a la casa de gobierno y al parlamento, y a las municipalidades de varias ciudades. En Johannesburgo, los trabajadores marcharon desde el distrito de Newtown hasta la oficina del presidente Cyril Ramaphosa y el Departamento de Trabajo y Desarrollo Social de Gauteng.

Esta huelga coincidió con la séptima jornada de paro nacional de los conductores de autobuses, que se encuentran en conflicto con la patronal por aumentos de salarios. Y se realizó en momentos que sube la tensión en la provincia Noroeste de Sudáfrica, donde la semana pasada hubo saqueos y violentas manifestaciones contra el jefe del Gobierno local, el oficialista Supra Mahumapelo, acusado de “ineficiencia y corrupción”. Cuestión que obligó a Ramaphosa a interrumpir su viaje al Reino Unido donde debía “rendir cuentas” a sus amos imperialistas.

Si la huelga general no logró por el momento sus objetivos, fue por la traición de la burocracia del COSATU, quienes abiertamente carnereó la lucha puesto que impulsa y defiende la reforma laboral que lleva adelante el CNA, al servicio de las transnacionales y sus “socios menores” de la burguesía negra. La burocracia del COSATU impidió que los trabajadores con la huelga general y sus combates en las calles le inflijan una derrota al gobierno y al régimen infame de la reconciliación.

Lamentablemente, al igual que sucediera con la huelga general del mes de octubre de 2017, la dirección del NUMSA y la SAFTU no llamó a las organizaciones obreras a romper con la burguesía y a la base obrera a conquistar asambleas en las fábricas y establecimiento y votar sus propios delegados a un Comité de Lucha Nacional que sea el que organice y dirija la lucha contra Ramaphosa, los políticos corruptos, los saqueadores imperialistas y el conjuntos de los verdugos del pueblo. Al no impulsar esta política de organismos autodeterminación y democracia directa, los sindicatos combativos quedaron impotentes para disputarle la base de los obreros que los traidores de la COSATU oprimen y manipulan para mantener divididos a los trabajadores y ponerlos de rodillas ante la burguesía. Como tampoco ayudo para que los aguerridos mineros de Marikana, puedan desatarse las manos de la dirección del ANCU (sindicato minero) que llamó a no parar, en momentos que cientos de miles de obreros enfrentaban a Ramaphosa y podrían hacer justica con ese asesino que tiene sus manos manchadas con la sangre de los mineros de Marikana.

La burocracia del COSATU ya no puede hablar más en nombre de los trabajadores. Cada vez queda más claro su rol de agente de la burguesía. Pero ella no se ira ni caerá sola, tiene mucha plata que defender por los servicios prestados a los enemigos de los trabajadores. Es la clase obrera conquistando su propia democracia quien debe barrer con los dirigentes sirvientes, cómplices y ejecutores de los planes esclavistas de los capitalistas. Solo así los trabajadores podrán conquistar la tan ansiada y anhelada unidad de sus filas. Solo así y con esta lucha, surgirán las fuerzas necesarias para poner en pie el “Partido de Trabajadores Revolucionarios” al que viene llamando a construir la dirección del NUMSA.

 ¡Abajo la burocracia colaboracionista! ¡Fuera el Ministerio de Trabajo, el estado, la patronal y sus políticos de nuestras organizaciones! ¡Fuera los estatutos y cuerpos orgánicos de la burocracia y sus sindicatos estatizados! ¡Que los delegados pasen a cobrar la cuota sindical por los puestos de trabajo en las fábricas y establecimientos! ¡Por dirigentes y delegados revocables en asamblea de base, cuando esta así lo decida o crea necesario! ¡Que los dirigentes una vez terminado su mandato vuelvan a trabajar!

La tarea inmediata no es otra que poner en pie un Congreso de Trabajadores ocupados, desocupados, de estudiantes combativos, para votar un plan de lucha que ponga a la orden del día la caída del gobierno y el desmantelamiento del aparato político y militar de este régimen infame de las transnacionales y los banqueros imperialistas. Que participen de este congreso los comités de desocupados, de inmigrantes y de aquellos que luchan por agua para el pueblo, se torna decisivo para levantar un pliego de demandas único de la clase obrera y los explotados. Los resultados de huelga general del 25/4 demuestran una vez más que se ha vuelto urgente y fundamental unir a todos los que luchan, porque para conseguir nuestras demandas, por más pequeñas que estas sean (como aumento del salario mínimo), hay que ponerle fin al gobierno de Ramaphosa, que no fue votado por nadie… solo por ese parlamento fantoche donde se conspira a espalda y contra el pueblo pobre y se votan todas las leyes contra los trabajadores, que previamente acordaron en las embajadas de las potencias dominantes los CEOS de la Angloamerican y demás pandillas imperialistas y de la burguesía local. 

¡Hay que conquistar un programa de acción revolucionario para unificar las filas obreras y preparar un combate superior contra Ramaphosa, el CNA, los piratas imperialistas y el régimen infame de los capitalistas!
Contra el poder de los de arriba, hay que poner en pie el poder de los explotados. Las demandas que nos unifican son las que se sintieron en cada una de las movilizaciones que sacudieron Sudáfrica este 25/4. Llego la hora de unirlas en un pliego único de reclamos y de organizar y preparar una lucha superior a la que ya vinimos protagonizando. Se trata de fortalecer y mostrarles un camino hacia la victoria, a todas esas enormes energías desplegada por los explotados en todos estos años de combates contra la burguesía y el estado de los opresores.

¡Abajo la reforma laboral! ¡Agua gratuita para todo el pueblo pobre! ¡12.500 Rands de salario mínimo, vital y móvil! ¡Trabajo para todos los desocupados! ¡Basta de obreros contratados! ¡A igual trabajo, igual salario! ¡Todos a planta permanente y con salario bajo convenio! ¡Apertura de los libros de contabilidad de todas las empresas! ¡Por el control obrero de la industria minera, con directorio obrero de las empresas del Estado, de la minería, y todas las ramas claves de la economía!

Para conquistar el pan, el trabajo, el salario, la tierra, la vivienda, el crédito barato para las clases medias arruinadas: ¡Fuera el imperialismo! ¡Ni un solo peso al FMI! ¡Expropiación sin pago y bajo control obrero de las trasnacionales, la Angloamerican, las minas, la tierra y los bancos! ¡Banca estatal única bajo control de los trabajadores y monopolio del comercio exterior! ¡Allí está la plata para otorgar créditos baratos a los pequeños comerciantes y campesinos arruinados! ¡Allí está el dinero para educación y salud, pública, gratuita y de alta calidad! ¡Allí está el dinero para construir vivienda y un plan de obras públicas! ¡Condonación de todas las deudas para el pueblo pobre!

Solamente la clase obrera expropiando al imperialismo y a la nueva burguesía negra puede garantizar un plan obrero de emergencia y así sacar a las masas de sus padecimientos. Para hacerlo, deberá armarse, poner en pie los Consejos Obreros y Populares, los comités de soldados rasos, las milicias obreras y populares, para expropiar a la burguesía y destruir su poder. ¡Fuera Ramaphosa y el CNA! ¡Abajo el régimen de la reconciliación! ¡Abajo la casta de oficiales del ejército de Pretoria! ¡Fuera los piratas imperialistas de Sudáfrica! ¡Gobierno de las organizaciones obreras y populares, basado en los organismos de autodeterminación y armamento de las masas en lucha!  ¡Por una Republica Negra Obrera y Socialista!