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31-07-2012

INTERVENCIÓN DE LA FLTI EN la 50° Asamblea Internacional Anti-Guerra de Japón

A la 50° Asamblea Internacional Anti-Guerra
A la Asociación Autogobernada de Federaciones de Todos los Estudiantes de Japón (Zengakuren)
Al Comité Juvenil Anti-Guerra
A la Liga Comunista Revolucionaria de Japón (Fracción Marxista Revolucionaria) – JRCL-RMF

Queridos camaradas:

Venimos como delegados de la FLTI y  saludamos a esta asamblea con el puño en alto de centenares de obreros y jóvenes revolucionarios; desde Chile, donde se han sublevado miles de obreros y estudiantes contra las transnacionales; desde la Bolivia minera y campesina; desde Venezuela donde enfrentamos a  Chávez, el gran aliado del asesino Al Assad; desde la heroica y combativa clase obrera de Argentina y Brasil; y desde el Perú obrero y campesino. Venimos a traerles la voz desde el país mas pobre del mundo, de los obreros revolucionarios de Zimbabwe.
En nombre de todos ellos, y sostenidos con el saludo de nuestros combatientes de Libia, cuyos brigadistas más jóvenes y audaces hoy combaten y resisten con las martirizadas masas de Siria. Hoy venimos a estar nuevamente presentes con ustedes porque la clase obrera necesita la coordinación y la unidad internacional para pelear, en momentos que se desarrolla y profundiza una brutal crisis del putrefacto sistema capitalista imperialista mundial.

Camaradas, no podemos permitir que el asesino Al Assad, haciendo el “trabajo sucio” a cuenta de las potencias imperialistas, del sionismo y de las burguesías esclavistas de Medio Oriente, y armado hasta los dientes por Putin y Hu Jintao termine de aplastar a las masas de Siria. Allí quieren enterrar a la heroica cadena de revoluciones que desde Túnez a Libia y desde Egipto a la Palestina sublevada, se desarrollaron durante todo el 2011.
El imperialismo y la burguesía saben muy bien que la batalla de Siria se define  con la insurrección de las masas palestinas tomando Jerusalén y aplastando el estado sionista contrarrevolucionario, al que Al Assad le cuida muy bien sus fronteras.

Una enorme conspiración internacional se ha levantado contra este heroico levantamiento de masas para impedir que Al Assad corra la suerte de Khadafy.
¡Digamos la verdad! Hoy la clase obrera y los explotados de Siria resisten con fusiles. Estos fusiles los compran las masas vendiendo sus propiedades y los obtienen asaltando las comisarías y de la mano de los soldados rasos que se pasan al combate de los explotados. Ningún general asesino de los que “se pasaron a último momento” al CNS y que se dicen llamar “jefes del Ejército Sirio Libre”, ha disparado ni dispara un solo tiro contra esas tropas de ocupación de la nación siria a cuenta del imperialismo, bajo el mando de Al Assad.
Esos generales conspiran con el CNS, con Obama y con la ONU en la trastienda, porque saben que pese a la masacre, las masas pueden triunfar y aplastar a Al Assad con su heroica guerra civil. Todos ellos complotan para expropiarle esta heroica revolución a las masas, en negociaciones secretas para impedir no sólo que caiga Al Assad, sino también para evitar que se desmoronen todos los diques de contención que han impuesto en el Norte de África y Medio Oriente. Ellos no quieren que una caída revolucionaria de Al Assad encienda la chispa de Atenas y que ésta vuelva a incendiar Europa.
Hay que hablar claro. Hay que terminar con tanta calumnia contra la guerra insurreccional con la que las masas combaten en Siria: ¿cómo van a estar armadas por el imperialismo las masas cuando éstas pelean casa a casa con kalashnikov, revólveres y hasta cuchillos? El imperialismo se ha cuidado muy bien de que no le llegue armamento pesado a los explotados. El sionismo anuncia que invadirá Siria si esto pasa. Las armas que tienen las masas, son las arrebatadas con la sangre de sus héroes a la policía y al ejército de Al-Assad mediante sus hermanos, los soldados rasos.
Y todavía la clase obrera mundial debe soportar la calumnia de la izquierda contrarrevolucionaria internacional, de los partidos social-imperialistas, estalinistas y renegados del trotskismo que tienen la desfachatez de plantear que la heroica resistencia de Aleppo “está armada por la OTAN”. ¡Sinvergüenzas! La guerra civil la hacen las masas. Éstas, lamentablemente, no cuentan ni con un solo misil tierra-aire, ni un solo misil anti-tanque, ni siquiera un visor nocturno, con los que dejarían fuera de combate a las tropas de Al Assad que se apoyan en helicópteros artillados vendidos por Rusia para combatir a la insurgencia calle a calle. Los explotados sólo cuentan con heroísmo porque son conscientes de que si no aplastan a Al Assad, no conseguirán el pan.

Camaradas, venimos a esta Asamblea con una propuesta:
Desde América, África y Medio Oriente, con centenares de organizaciones obreras, estudiantiles y que se reivindican del socialismo y la clase obrera a nivel mundial, estamos poniendo de pie un Comité Internacional para romper este cerco impuesto por las direcciones traidoras a las martirizadas masas de Siria.
Seguimos un llamamiento de las milicias revolucionarias internacionalistas de Libia junto a miles de luchadores de medio oriente que ya combaten en las calles de Aleppo, Homs y en la misma Damasco. Ustedes tienen en su poder la declaración del Comité Internacional por Siria. Allí esta el llamamiento que juntos le proponemos encabezar y que seguramente esta asamblea aprobará. A no dudarle esto significará un enorme salto hacia adelante para romper el cerco de las masas martirizadas de Siria.

La JRCL y la FLTI podemos juntos dar un gran impulso a la solidaridad activa y combatiente con  las masas de Siria. No se puede perder un día más en poner en pie un Comité Internacional que rompa el cerco contra las masas combatientes de Medio Oriente y haga efectiva una solidaridad internacionalista, concreta y práctica con su lucha. Que llame a todos los trabajadores de los cinco continentes a no embarcar ni petróleo, ni alimentos ni armas al asesino Al Assad. Y a garantizar desde las organizaciones obreras el envío de medicamentos, hospitales de campaña, alimentos, dinero y armas para las heroicas masas sublevadas de Siria.
La ACES, la aguerrida coordinadora estudiantil de Chile, ha llamado a luchar en apoyo a las masas sirias. Como ayer en defensa de la educación gratuita, la juventud chilena y japonesa pueden encabezar una jornada internacional de lucha llamando a cercar todas las embajadas de Siria del mundo para expulsar de allí a todos los esbirros del asesino Al Assad.

Queremos desde esta asamblea, acompañar a nuestra brigada de jóvenes y obreros revolucionarios “León Sedov”, que ha marchado a combatir a Siria junto a nuestros hermanos de clase de distintos países de Medio Oriente. Ellos se han puesto su nombre en honor al hijo de Trotsky asesinado por el estalinismo en los ‘30. En estos días ha trabado combate contra las fuerzas asesinas de Al Assad. El movimiento revolucionario ya es carne y sangre de los centenares de miles de explotados que en Siria combaten por la revolución obrera y socialista y por romper el cerco a la Siria sublevada.
Luchamos junto a los trabajadores y las masas explotadas de Siria, desde el mismo frente de batalla, para que éstas no reconozcan ni al CNS escondido en Qatar, ni a sus generales asesinos “pasados a último momento” desde el bando de Al Assad. Peleamos para que se desconozca toda negociación y gobierno surgido de la conspiración secreta del CNS, Al Assad, la ONU, Obama y la Liga Árabe.
En cada ciudad donde combatimos y es controlada por la resistencia luchamos, para que los Comités de Coordinación Locales y los comités de soldados, expropien a la burguesía y a todos sus bienes, para alimentarse y para que estén a disposición de la guerra civil. Luchamos por expropiar también a los bancos, porque ahí está el dinero para comprar no sólo el fusil, sino los misiles para derrotar a Al Assad.
Los trotskistas, los socialistas revolucionarios, sabemos muy bien que la guerra civil contra los explotadores se gana con el método de la revolución socialista, con la independencia total de los explotados de los explotadores y con su alianza con el proletariado mundial.
Nuestros jóvenes y obreros revolucionarios no reconocen ni a la ONU, ni a la Liga Árabe lacayos del imperialismo.
Nuestras fuerzas rechazan toda intervención imperialista y, compartiendo la trinchera con obreros, soldados rasos, campesinos pobres y estudiantes, todos buscamos que Al Assad termine como Khadafy, y SE IMPONGA EL PODER DE LA CLASE OBRERA, BASADO EN LOS COMITÉS LOCALES DE COORDINACIÓN Y LOS COMITÉS DE SOLDADOS RASOS. UN GOBIERNO DE LOS EXPLOTADOS SIN EL CNS Y SUS GENERALES DE AL ASSAD, SIN CAPITALISTAS ESCLAVISTAS Y SIN PIRATAS IMPERIALISTAS.

Camaradas,
Las masas de Siria y Libia llegaron muy lejos, y han comprendido que con las armas se conquista el pan. Esto es lo que quisieron impedir las direcciones traidoras en Grecia. Allí, los falsos socialistas como Syriza pregonaban la “vía pacífica al socialismo”. Sostenidos por el estalinismo y los renegados del trotskismo desorganizaron las filas de la clase obrera que ansiaba derrotar en las calles al gobierno de la Troika imperialista. Hoy el fascismo allí levanta cabeza atacando y persiguiendo a los inmigrantes. Esta es la tragedia que sufre el proletariado europeo por la traición de sus direcciones reformistas. Estas desincronizan sus luchas. En Grecia se intenta nuevamente  aplicar la miserable receta que llevó a la masacre y a la tragedia a la clase obrera Chilena. Es que el capitalismo no se reforma pacíficamente, ninguna transnacional ni patrón se retirará ni entregará sus medios de producción pacifica y alegremente, esto es una vil mentira. Solo el triunfo de la dictadura del proletariado lo hará posible.
 Pero a pesar y en contra  de las burocracias obreras que intentan desincronizar su combate, la clase obrera del Estado Español entra a la lucha con su aguerrida vanguardia, los mineros de Asturias y con el apoyo de la juventud del movimiento de Los Indignados al grito de “¡Si esto no se arregla; guerra, guerra, guerra”. Los combates de Siria llegan a Europa de la mano de los aguerridos mineros de Asturias y sus mujeres que luchan junto a ellos por el futuro de sus hijos. Su grito debe ser el grito de toda la clase obrera mundial. Y esto en Europa significa: ¡Hay que pelear como en Libia y Siria desde Portugal hasta las estepas rusas! ¡Hay que marchar hacia los Estados Unidos Socialistas de Europa!
Sobran, entonces, fuerzas y energías en la clase obrera mundial. Ésta no se ha rendido. Los que se rindieron fueron las direcciones traidoras de las masas; las que aquí y allá las sometan a la burguesía.
La clase obrera no tiene la dirección que se merece. No se trata de llorar su “atraso”. Este no es más que la traición de sus direcciones actuales. Se trata de forjar al calor de los combates una dirección auténticamente socialista y revolucionaria del proletariado mundial.

Camaradas, desde la 50° Asamblea Anti-guerra en Japón, desde las costas del Pacífico, queremos desde aquí saludar y luchar junto a la clase obrera china. Este es uno de los proletariados más martirizado, explotado y esclavizado del planeta por las transnacionales. En China por centenares de millones han sido alojados en campos de concentración y custodiados a punta de bayoneta por sus carceleros del partido comunista de los empresarios Chinos.
Hoy no se puede ocultar más, a pesar del silencio cómplice de la izquierda reformista mundial, que en respuestas a enormes levantamientos de la clase obrera China desde mediados del 2011 hubo masacres, iguales o peores que las de Al Assad, contra centenares de miles de obreros y campesinos por parte del ejército asesino de Hu Jintao.
Aplastar a Al Assad en Siria es comenzar a hacer justicia también con el asesino Hu Jintao, y marcarle el camino a la clase obrera china y del Pacífico de cómo luchar.

Camaradas, juntos, desde esta asamblea, tenemos hoy enormes responsabilidades internacionalistas.
También hoy nuestros hermanos de la India claman por justicia, ustedes y nosotros la podemos comenzar a realizar. Debemos denunciar y llamar a acciones contra las multinacionales imperialistas japonesas como la Suzuki. Obreros de la India que ganan U$S 128 al mes, sin derechos, esclavizados por la Suzuki, se sublevaron inclusive haciendo justicia con sus manos con los patrones asesinos. Le prendieron fuego a sus verdugos.
Queremos junto a ustedes, encabezar desde Japón la solidaridad activa con los obreros de la India, y exigir la inmediata libertad de todos sus dirigentes presos. Para que ellos sepan que desde todos los continentes y de forma particular de la clase obrera japonesa, tienen todo el apoyo en su combate contra los patrones hambreadores de la Suzuki.
Esta acción internacionalista marcaria el camino de que la liberación de los trabajadores de la metrópolis del yugo de la explotación capitalista, está indisolublemente ligado a la suerte de sus hermanos de clase del mundo colonial y semicolonial y que SU VERDADERO ENEMIGO ESTÁ EN CASA.

Camaradas, desde América estamos enfrentando el proceso ya abierto de restauración capitalista que los hermanos Castros como Hu Jintao en China están llevando adelante en Cuba. Están preparando un “nuevo ‘89” contrarrevolucionario contra las masas revolucionarias de nuestro continente. El partido Comunista de Cuba, devenidos en nuevos ricos, ya ha iniciado la restauración capitalista en la isla. Han despedido a 500.000 obreros, decretando el derecho de herencia y abriendo la economía cubana a un mercado con distintos países capitalistas de América Latina, donde un nueva protoburguesía cubana gerencia y franquicia la educación y la salud conquistada por la revolución socialista, vendiéndola como una mercancía capitalista.
Luego de estrangular la revolución latinoamericana durante décadas, la nueva burguesía cubana dice que “ya el socialismo no funciona ni en Cuba”. Y tiene la desfachatez de decirlo cuando lo que se desmorona es el capital financiero mundial tirando su ruina sobre los hombros de la clase obrera. Cuando Wall Street se derrumba sobre las espaldas del proletariado la lacra estalinista afirma que no hay mas condiciones para el socialismo.
La clase obrera latinoamericana y mundial no puede permitir este nuevo golpe por la espalda a sus combates. Un nuevo embate revolucionario y socialista de la clase obrera de nuestro continente, tendrá que conquistar una nueva revolución socialista que restaure allí las conquistas perdidas de la revolución, y que sea esta, un punto de avanzada de la revolución socialista en EE.UU.

Camaradas, en vuestra lucha en Japón sepan que cada uno de nuestros militantes pelea codo a codo junto a ustedes, junto a los valerosos obreros explotados por el toyotismo, la peor esclavitud de las corporaciones japonesas y su gobierno asesino. Gobierno asesino al que no le tiembla el pulso en mantener centrales nucleares que están devastando y asesinando lentamente y contaminando a una nueva generación de trabajadores, causando más muertes que las mismas bombas de Hiroshima y Nagasaki. Si esto hacen los carniceros imperialistas japoneses con su propio pueblo, que no serán capaces de hacer para hacerle pagar junto a EE.UU. y demás potencias imperialistas la crisis que ellos causaron en el planeta a la clase obrera mundial.
Como decía el camarada León Trotsky, la civilización humana y sus fuerzas productivas ya controlan la tierra el mar y los cielos, pero en manos del podrido sistema capitalista éste ha convertido al planeta en una sucia prisión.
¡Para que la clase obrera de todo el mundo viva, el imperialismo debe morir!

¡Viva la unidad internacional revolucionaria de la clase obrera mundial!
¡Muera Al-Assad! ¡Que triunfe la guerra civil y la revolución socialista en Siria, en todo el Norte de África y Medio Oriente y que vuelva a flamear la bandera palestina en el Jerusalén liberado de las garras del sionismo!
¡Abajo Maastricht y la UE de las potencias imperialistas!
¡Como gritan los jóvenes que cercan Wall Street! ¡Ni Obama ni Romney, ningún pirata imperialista, expropiemos a los banqueros y sus transnacionales, por EEUU Socialistas! ¡Abajo Noda y su régimen asesino de las transnacionales! ¡Por un Japón Obrero y Socialista!
¡Abajo el socialismo de mercado de Hu Jintao y Putin y sus amigos Castros, Chávez y Al Assad, que no son más que carceleros y asesinos de sus pueblos a cuenta de las transnacionales y el imperialismo!

Para terminar con las guerras, el fascismo y la contrarrevolución: ¡Debe triunfar la revolución socialista internacional!
Comité Ejecutivo Internacional de la Fracción Leninista Trotskista Internacional