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Después de un histórico paro de diez días
¡La lucha de los trabajadores del Subte debe triunfar!
Los trabajadores del subte salieron al paro el 3 de agosto por un 28% de aumento salarial, 2% de antigüedad, recategorización, mejores condiciones en el servicio y mejoras en las condiciones laborales. ¡Las demandas del Subte son las demandas de todo el movimiento obrero!
Cansados por los más de 70 días de postergación de las paritarias los trabajadores tomaron la solución de sus problemas en sus manos, basados en asambleas de base para decidir los pasos a seguir y sus piquetes de huelga.
Durante el paro, los andenes y los talleres estuvieron en manos de sus verdaderos dueños, los trabajadores, garantizando que ni un solo tren saliera de las cabeceras. Atacando la propiedad de los capitalistas con su lucha hacían peligrar el techo salarial del 18% y se enfrentaban a la patronal de Metrovías, al gobierno nacional y de la capital y a la burocracia de la UTA.
Mientras los trabajadores pasaban los días en los andenes y talleres, tanto el gobierno nacional como el de Macri se pasaban la pelota uno a otro sobre quién debía hacerse cargo del subte. Ambos le cuidaron y le cuidan las millonarias ganancias a Roggio-Metrovías, CFK le dio la concesión del Ferrocarril Sarmiento y Mitre, y Macri los premió con el tarifazo de $2,50, mientras en medio de la huelga decía que el boleto debía estar a $5,50. Estos enemigos, más allá de sus “diferencias” tenían acuerdo en derrotar la lucha de los trabajadores. No es la primera vez que lo hacen, ya en el Parque Indoamericano al gobierno de CFK y de Macri no les tembló el pulso para juntos, masacrar a los trabajadores inmigrantes que luchaban por una vivienda digna.
La UTA, que había amagado con un paro para el lunes 6, carnereó y lo levantó en “muestra de diálogo”, mostrando una vez más, el rol de la burocracia sindical que le cuida el bolsillo a la patronal y al gobierno.
Con la tenaz lucha de la base obrera, la dirección del AGTSyP durante 10 días tuvo en sus manos la posibilidad de romper el aislamiento de esta rebelión contra las paritarias truchas de la burocracia carnera de la UTA, de la CGT y la CTA. Para ello era y es necesario que la lucha por el 28% de aumento se transforme en una lucha de todo el movimiento obrero. Para ello había y hay que lanzar un llamado a todas las internas combativas arrancadas a la burocracia como La Línea 60, los ferroviarios del Sarmiento, etc, y a los movimientos de trabajadores desocupados a que envíen delegados a coordinarse al Subte, para unificar los reclamos y avanzar en imponer un plan de lucha y el PARO NACIONAL contra la carestía de la vida, contra la inflación y contra las paritarias truchas que dejan por fuera al 70% de los trabajadores.
Así podríamos conquistar las condiciones para levantar un programa que unifique las filas obreras: ¡Ningún tope salarial! ¡Abajo las paritarias truchas! ¡Seis horas y trabajo digno para todos! ¡Salario mínimo, vital y móvil de $7.500! ¡Ningún impuesto al salario! ¡Abajo el tarifazo! ¡Boleto gratuito para los trabajadores y estudiantes! Los trabajadores y los usuarios somos los únicos que sufrimos las malas condiciones en las que viajamos todos los días sin saber si vamos a llegar vivos a destino, y somos los únicos podemos resolverlo: ¡Fuera Roggio Metrovías! ¡Fuera las manos de CFK y de Macri del Subte! ¡Nacionalización sin pago y bajo control obrero del Subte, del Ferrocarril, de las empresas de transporte y de todas las empresas privatizadas!
El ataque de la patronal y el gobierno no debe pasar, la lucha de los trabajadores del Subte debe triunfar
Con su paro los trabajadores conquistaron el “compromiso” patronal de la recategorización de algunos sectores, una suma fija no remunerativa y más días por vacaciones. La patronal sabía que los trabajadores estaban dispuestos a ir hasta el final. Pero quedaron aislados dentro del subte, con la burocracia de la UTA intentando a cada paso quebrar su lucha. No había unidad con otros sectores para romper el aislamiento y seguir adelante por conquistar el 28% de aumento por el que salieron a pelear.
La unidad era lo que ansiaban muchos compañeros, quienes nos contaban su experiencia de luchas anteriores cuando conquistaron, como parte de la gesta revolucionaria del 2001, la jornada de trabajo de 6 horas. En ese momento pelearon codo a codo con los trabajadores desocupados que por miles bloqueaban las entradas al subte, mientras organizaciones obreras llegaban para unirse al combate.
Justamente esto era lo que hoy se necesitaba para conseguir el 28% de aumento, e incluso para impedir que la patronal de Metrovías transforme en “papel mojado” el acta que firmó. Hoy vemos las consecuencias, a muchos compañeros que debían tomarse licencia por vacaciones no les dan los días que se firmaron. Frente a esta verdadera provocación de la patronal de Metrovías, de CFK y Macri, los trabajadores del Subte ya están anunciando un nuevo paro de 24hs. Y Metrovías mientras se lleva millones de pesos en subsidios y ganancias y no invierte ni un centavo en los trenes, desconoce el acta que firmó. Así demuestra que ésta fue una maniobra para sacarnos de la lucha y debilitar nuestras fuerzas.
Ni bien se levantaba el paro del Subte, la patronal de DOTA mandó a los pistoleros de la burocracia de la UTA a prender fuego el auto del delegado de la Línea 60 Cáceres y a amenazar de muerte a otros delegados, mientras que en otras líneas le reventaron la cabeza a garrotazos a delegados y activistas.
¡Hay que romper el aislamiento! ¡Todos al Subte a poner en pie un Frente de Lucha de los trabajadores!
Lamentablemente los dirigentes del AGTSyP dejaron pasar diez días de heroica huelga y 15 más, sin hacer un solo llamado a una lucha unificada junto a todos los sectores que enfrentan a la patronal y al gobierno.
Luchando así todos los trabajadores del país, comenzando por los usuarios del Subte, de los ferrocarriles donde los obreros viajan como ganados y mueren como en la Masacre de Once, hubieran tomado esta lucha como propia porque estas demandas son las de todo el movimiento obrero. Lamentablemente la dirección de la AGTSyP, sigue negándose a levantar esta perspectiva, que significaría ponerle el pie en el pecho tanto a los Roggio, como a Macri y Cristina, y a sus guardianes de la burocracia pistolera de la UTA.
Desgraciadamente, la izquierda que es parte del cuerpo de delegados del Subte tampoco planteó ni plantea un programa para unir las filas obreras. Tanto el PO como el PTS hacen pomposos balances de que “habría que haber sacado el conflicto hacia afuera haciendo marchas” y “que había que buscar el apoyo de otras organizaciones obreras”. Durante el conflicto ninguno de estos partidos que integran el FIT que vienen de realizar cada uno su Congreso Sindical, puso el peso de las comisiones internas y cuerpos de delegados que dirige al servicio de unificar la lucha con los trabajadores del Subte, ni siquiera en las fábricas donde tienen peso, durante los diez días de huelga del Subte llamaron ni a un minuto de paro en solidaridad. Ellos también son responsables del aislamiento en el que pelearon los trabajadores.
¡Ninguna confianza en el gobierno nacional ni de la ciudad! ¡Ninguna confianza en las promesas patronales!¡Los trabajadores debemos confiar sólo en nuestras propias fuerzas!
Desde el Subte hay que convocar ya mismo a un Frente de Lucha de los trabajadores para derrotar los planes del gobierno de CFK y de Macri, que junto con la burocracia sindical, conspiran contra los trabajadores para cuidarle los bolsillos a Roggio-Metrovías y la patronal. ¡Basta! ¡Rompamos el cerco y el aislamiento llevando la moción a las asambleas del subte!
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