Volver al índice BOI 2 | El régimen infame prepara su continuidad | ¡Abajo la farsa de la "revolución bolivariana"! |
Lanzando un feroz ataque contra la clase obrera y con la fraudulenta trampa electoral
El régimen infame de los Kirchner, los monopolios imperialistas y la patronal esclavista, prepara su continuidad y la institucionalización del pacto social
Los ataques que se suceden, como ayer en el Francés y el Clínicas, en Río Gallegos y en Caleta Olivia, contra el cuerpo de delegados del Subte, contra los centros de estudiantes y federaciones universitarias arrancadas a la Franja Morada, y hoy contra los obreros del pescado de Mar del Plata son parte de una ofensiva concentrada y centralizada de la patronal esclavista, el gobierno y el régimen infame, con el apoyo abierto de la burocracia sindical. Estos se han conjurado para derrotar, antes de las elecciones del 28 de octubre, todos los focos de lucha, radicalización y organización obrera independiente que persistan: necesitan apagar hasta la última chispa de la rebelión obrera contra el pacto social que sacudió al país en los últimos meses.
Con este feroz ataque –que han debido acelerar frente al inicio de la nueva crisis de la economía mundial capitalista imperialista, cuyos golpes ya se hicieron sentir en Argentina-, y con la fraudulenta trampa electoral, preparan la continuidad del kirchnerato, dejándole a Cristina Kirchner un país con los trabajadores derrotados y esclavizados, para que los monopolios imperialistas puedan venir a invertir a Argentina con tranquilidad y se eleve así la productividad del trabajo -sin lo cual la producción argentina cada vez es menos competitiva en el mercado mundial-, y se mantenga el ciclo de negocios y el jolgorio de superganancias de los capitalistas a costa de las peores penurias para las masas trabajadoras. Esta es la promesa que Cristina y K hicieron a los chupasangre del Council of Américas, ante los que se comprometieron además a pagarle 6000 millones de dólares a los parásitos del Club de París y arrodillarse todavía más ante las exigencias imperialistas.
Derrotar a la clase obrera es también una condición indispensable para asentar un gobierno fuerte e imponer la institucionalización del pacto social, el famoso “Pacto de la Moncloa” del que hablan los Kirchner. Será un régimen donde lo que resuelva el Consejo del salario compuesto por las cámaras patronal, el estado y la burocracia de la CGT y la CTA –por ejemplo, el tope de aumento salarial- será ley del estado, y por lo tanto, el obrero que lo enfrente, estará automáticamente fuera de la ley.
La burocracia sindical y su pistoleros pagos son la fuerza de choque del régimen y el gobierno contra los trabajadores en lucha
Con el juicio a Etchecolatz y Won Vernich –para meter presos a un puñado de genocidas ya ancianos y salvar a todos los demás represores y asesinos del pueblo-, con la demagogia del “Museo de la Memoria”, y escudado en el apoyo de aquellos organismos de derechos humanos que abandonaron la lucha por el juicio y castigo a todos los genocidas, el gobierno de Kirchner se jugó a legitimar a la justicia y a las instituciones del estado para poder lanzar el ataque actual.
Pero para esta ofensiva se está apoyando no sólo en la represión de la gendarmería y la policía –militarizando Santa Cruz y hoy también Mar del Plata-, no sólo en la persecución contra los luchadores obreros y populares por parte de la justicia que viene de encarcelar a Villalba y a los militantes de Quebracho, sino sobre todo, en los sindicatos estatizados a un grado extremo, con 50.000 pistoleros pagos de la burocracia sindical, a los que, en todo el país, ya están haciendo actuar como verdaderas fuerzas de choque contra la clase obrera.
Ayer lo vimos con el “Tuta” Muhamad en el Hospital Francés. Después, vimos a los matones de la UTA codo a codo con la policía privada de la patronal de Metrovías, atacando a los trabajadores del Subte y a su cuerpo de delegados.
En Tucumán, vimos a los gángsters de la burocracia del sindicato de trabajadores viales, junto a las barras bravas de los clubes de fútbol, disparar a mansalva contra una movilización de obreros de vialidad que marchan a su propio sindicato. Como el compañero Algañaraz en Mar del Plata, hoy en Tucumán, el obrero vial Ramón Paz quedó cuadriplégico por los tiros que le pegaron los matones de la burocracia.
La traidora burocracia sindical de Yasky y la CTA no le va en zaga a los pistoleros de la CGT. Al mismo tiempo que en Mar del Plata el matón a sueldo de la patronal disparaba contra los obreros del pescado, bajo la orden de Yasky una patota de la burocracia molía a palos a los dirigentes docentes de oposición en el SUTEBA Tigre. Apenas días después, los matones kirchneristas de La Vallese, entraban armados a la facultad de Sociales de la UBA a impedir el escrutinio de las elecciones para claustros (ver página 12).
Pero este feroz ataque, ya está recibiendo la respuesta de los trabajadores. Porque contra él y contra los pistoleros de la burocracia sindical se levantan los obreros del pescado en Mar del Plata, los choferes de la UTA en Córdoba, los docentes en Neuquén, etc.
¡Abajo el fraude y la trampa electoral! ¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo!
La trampa de las elecciones no es más que la cobertura de semejante ataque contra la clase obrera. Hay que decirlo con claridad: ¡”democracia”, las pelotas, hay que decir con claridad! ¡Esta es la “democracia” patronal: una simple envoltura de la más feroz dictadura del capital!
¡”Democracia”, las pelotas, cuando el asesinato de Fuentealba sigue impune; cuando los luchadores de Las Heras, Villalba y los militantes de Quebracho se pudren en la cárcel, mientras el asesino Sobisch y todos los represores y asesinos de los trabajadores y el pueblo -los Menem, De la Rúa, Duhalde, Ibarra, etc.- los banqueros chorros que les robaron los ahorros a las clases medias, los políticos patronales que entregaron la nación, los milicos genocidas, no sólo están libres e impunes, sino que “volvieron todos” y muchos de ellos son “honorables” candidatos en estas elecciones fraudulentas! Cuando Julio López ya lleva un año desaparecido; cuando todos los días algún trabajador cae herido por la represión o por el ataque de los pistoleros de la burocracia, como ayer en Mar del Plata u hoy en la fábrica Mafissa de La Plata.
¡Abajo la trampa y el fraude de las elecciones, del pacto del imperialismo, el gobierno, la patronal esclavista y la burocracia sindical, que buscan ocultar el ataque de los capitalistas contra los trabajadores! Con rehenes obreros en manos de los patrones, no podemos luchar: ¡libertad inmediata a los presos de Las Heras, a Villalba, a los militantes de Quebracho! ¡Castigo a todos los asesinos y represores de los trabajadores y el pueblo! ¡Aparición con vida ya de Julio López!
El que hoy se somete a las elecciones está tirando tierra a los ojos de las masas trabajadoras. Esto es lo que hacen las corrientes de la izquierda reformista, que gastan fortunas en sus campañas electorales, que se dedican a recorrer el país diciéndoles a los trabajadores que todo se soluciona si los votan a ellos, mientras se niegan a poner todas sus fuerzas al servicio de la tarea y la necesidad urgente que tiene la clase obrera: la de centralizar y coordinar sus fuerzas y sus luchas para enfrentar a la represión, la patota de la burocracia sindical y el ataque que está descargando la patronal, el gobierno y el imperialismo.
¡Abajo el fraude y la trampa electoral! ¡Que se vayan todos, que no quede ni uno solo! ¡Todos a Mar del Plata, a rodear a los obreros del pescado y a coordinar nuestras luchas para avanzar a conquistar un gran congreso obrero nacional de delegados de base, una verdadera III Asamblea nacional piquetera de trabajadores ocupados y desocupados –continuidad de las dos asambleas de La Matanza de 2001- para poner de pie a la clase obrera argentina y reabrir el camino de diciembre de 2001, para esta vez sí, hacer realidad el “Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”.
¡Abajo la farsa de la “revolución bolivariana” de Chávez, la burocracia castrista y el Foro Social Mundial!
La semana pasada, los Kirchner visitaban Nueva York y se arrodillaban ante los empresarios imperialistas del Council of Americas y ante los Clinton –esos carniceros imperialistas del Partido Demócrata- mientras en Argentina su policía y sus pistoleros de la burocracia sindical atacaban a los obreros del pescado en Mar del Plata y baleaban al compañero Algañaraz. ¡Este es el gobierno que Fidel Castro llamó a apoyar, diciéndoles a los trabajadores que Kirchner iba a “repartir la riqueza”! ¡Palos, balas, cárcel, hambre, esclavitud para los trabajadores, y negocios millonarios para los capitalistas: eso es lo único que “reparte” el gorila antiobrero de Kirchner y su régimen infame!
Al mismo tiempo, su gran amigo Chávez se abrazaba en Venezuela con Ahmadinejad, el presidente de Irán –represor y asesino de su propio pueblo y sostenedor del gobierno títere del protectorado yanqui en Irak-, mientras reprimía violentamente con su policía “bolivariana” a los obreros petroleros del Orinoco que, al igual que sus hermanos de la Patagonia argentina, salieron a reclamar por sus salarios ya miserables, brutalmente carcomidos por la inflación. Este es el supuesto “antiimperialista” Chávez, ese es su “socialismo del siglo XXI”: ¡jugosos negocios para los monopolios y la burguesía nativa que les vende a los yanquis el petróleo con el que alimentan la maquinaria de guerra para masacrar en Irak, y para los obreros y los explotados, hambre y represión!
Mientras tanto, en Cuba, su amigo Raúl Castro y la burocracia restauracionista se preparan a imponer la restauración capitalista, y a transformarse en burgueses como hicieron ayer Gorbachov, Yeltsin, Deng Xiao Ping. Aceleran la entrega de la isla a los monopolios imperialistas europeos con los que se asocian en el turismo, el níquel y el petróleo para fugar ganancias a paraísos financieros; llaman a aumentar la “productividad del trabajo” en Cuba donde los obreros ganan… ¡15 dólares por mes!-, y se aprestan para volver a transformar a Cuba en un sembradío de caña de azúcar para asociarse con los monopolios imperialistas yanquis en la producción de biocombustibles.
No terminaba de secarse en el puerto de Mar del Plata la sangre del compañero Algañaraz, cuando en Bolivia, el gobierno también “bolivariano” de Evo Morales, volvió a matar. Después de reprimir en Cochabamba, en Yacuiba; después de mandar al ejército a atacar y balear a los mineros de Huanuni, esta vez el ejército asesino mandado por Morales acribilló a un estudiante secundario del departamento de Cochabamba que, junto con sus compañeros y los padres, reclamaban por su escuela que se cae a pedazos. El gobierno de Morales, gracias a la dirección colaboracionista de la COB y demás organizaciones obreras que postraron al proletariado ante la burguesía, expropió de la heroica revolución que los obreros y campesinos bolivianos protagonizaron en 2003-2005, e impuso la estafa de la “revolución bolivariana”. El resultado: los hidrocarburos y los minerales siguen en manos de las trasnacionales y sus socios de la burguesía nativa, la tierra en manos de los latifundistas, mientras los obreros son esclavizados con salarios de miseria, y mientras el hambre cunde entre los explotados por la brutal carestía de la vida. Morales y el MAS pactaron con el PODEMOS y la burguesía cruceña en la fraudulenta Asamblea Constituyente, fortaleció a la reacción que hoy levanta cabeza y vuelve a la ofensiva con los “paros cívicos” y el ataque directo de las bandas fascistas contra los obreros, los estudiantes combativos y los campesinos pobres.
Esta es la famosa “revolución bolivariana” pregonada por Chávez, la burocracia castrista y todo el Foro Social Mundial, incluidas las corrientes de los renegados del trotskismo: la expropiación de la lucha revolucionaria y antiimperialista de las masas y su sumisión a la burguesía, para que los buitres imperialistas y las patronales nativas esclavistas que son sus socias menores puedan llevarse fabulosas superganancias gracias a la superexplotación obrera y al saqueo de nuestras naciones. ¡Abajo la estafa de la “revolución bolivariana”! ¡Revolución obrera y socialista, o caricatura de revolución!