22-12-2012

Hay que unir las filas obreras para preparar y organizar
la lucha por el pan y contra el saqueo de la nación

El último 20 de noviembre la clase obrera ocupada y sindicalizada, aprovechó el paro convocada por la CGT y CTA “opositoras”, para llevar adelante un Paro General político de presión contra le gobierno de la Kirchner, sirviente de los banqueros y las transnacionales. Este paro fue mucho más potente de lo que la burocracia de Moyano (CGT) y Michelli (CTA) esperaban, por eso éstos se cuidaron muy bien de no llamar a nuevas medidas de lucha, sino a marchas “opositoras”, junto al FIT y demás corrientes de la izquierda reformista, que el pasado 19/12, a 11 años de los combates por el “que se vayan todos, que no quede ni uno solo”, se movilizaron a Plaza de Mayo junto a los gorilas de la UCR, el PS y el PRO, ¡los mismos asesinos que en 2001 masacraron a más de 40 trabajadores en todo el país!

Entre el 20-12 y el 22-12 se hicieron ver y entraron en escena las capas más explotadas de la clase obrera, yendo a los supermercados a buscar los alimentos y los productos que los capitalistas ya ni siquiera les permiten consumir. Estos “pobres diablos”, los hijos de los obreros contratados, despedidos, desocupados, inmigrantes, tercerizados y en negro, son olvidados por los sindicatos. Es más, para corrientes de la izquierda reformista estos jóvenes supuestamente “no luchan con los métodos de la clase obrera”, como si protagonizar una revuelta y atacar la propiedad de lo capitalistas y enfrentar la represión policial para conquistar el pan, no es un método de lucha de la clase obrera. ¡Pero por favor! Lo que pasa es que estamos en presencia de partidos que el único método de lucha que tienen para proponerles a los trabajadores es votar en elecciones sindicales totalmente fraudulentas; llamar a “cortar boleta” en las elecciones presidenciales votando a la Kirchner para presidente y a sus “candidatos socialistas” para el Parlamento; llevar a los obreros en lucha a presionar al Ministerio de Trabajo esclavista y sus conciliaciones obligatorias, a la justicia patronal y demás instituciones de este régimen infame.

Estas distintas capas de la clase obrera que el 20-11 salieron al paro y el 20-12 irrumpieron atacando los supermercados, luchan contra el saqueo de la nación, el hambre y la miseria y en sus acciones tienden a aproximarse y unirse. Pero, la burocracia sindical de la CGT y la CTA, “oficialistas” y “opositoras”, y las direcciones reformistas de la clase obrera desincronizan y separan a los distintos sectores de la clase, limitando las demandas obreras sólo a las que expresan al sector de los trabajadores mejor remunerados y sindicalizados.

Contra esta política que la clase obrera está pagando muy caro con sus filas desgarradas, se trata de levantar un programa y desarrollar los organismos para unir las filas obreras para golpear al plexo del gobierno de la Kirchner y el conjunto del régimen de la Constitución de 1853-1994, que sólo le sirve a las transnacionales, los banqueros, la patronal esclavista y la oligarquía argentina. ¡Basta! ¡Hay que reagrupar las filas obreras! Para unir a los desocupados, subocupados, tercerizados, contratados, a la juventud obrera e inmigrantes, con los efectivos tenemos que poner en pie desde las seccionales sindicales arrancadas a la burocracia y las comisiones internas combativas, los comités de fábrica para luchar por un turno más en todas las fábricas y que entren todas las manos disponibles a producir. El cuerpo de delegados del subterráneo tiene que volver a poner en pie el Movimiento por las 6 horas,  junto a los movimientos de desocupados, para unir las filas obreras y embestir contra los saqueadores de la nación.

¡Hay que imponer la ruptura de las organizaciones obreras con el ministerio de Acción Social de las dádivas miserables de Alicia Kirchner y con el ministerio de Trabajo del gerente de los esclavistas Carlos Tomada! ¡Hay que pararle la mano al gobierno de la Kirchner, sirviente de Obama, Wall Street, las transnacionales, los banqueros y la patronal esclavista!

¡Ni un desocupado más! ¡Basta de trabajo en negro! ¡Trabajo digno y bajo convenio para todos! ¡Escala móvil de salario y horas de trabajo! ¡Por la reducción de la jornada laboral sin reducción salarial y reparto de las horas de trabajo para que todas las manos disponibles entren a producir! ¡Abajo las paritarias truchas! ¡Salario mínimo, vital y móvil de $10.000 para todos, indexado mes a mes según la inflación! ¡Asignaciones familiares universales! ¡Eliminación del IVA! ¡Basta de impuesto al salario obrero!

Para conquistar el pan y terminar con el saqueo de la nación, hay que unir a la Huelga con el Piquete para marchar a aplastar a las transnacionales. ¡Fuera Gringos! ¡Ni un solo dólar, ni un solo peso a la fraudulenta deuda externa! ¡Nacionalización sin pago y bajo control obrero de las transnacionales y de toda fábrica que cierre, suspenda o despida!
                                                                                                        

¡Ni con Cristina, la presidente del Virreynato sirviente de los buitres imperialistas!
¡Ni con la oligarquía de la Federación Agraria, el PJ Federal
y los gorilas del PS y la UCR!

¡Congreso Obrero Nacional de las organizaciones en lucha de delegados con mandato de los trabajadores ocupados, desocupados, en negro, contratados, tercerizados e inmigrantes!

¡Que las comisiones internas y los cuerpos de delegados, que se dicen clasistas y combativas, lo convoquen ya mismo!

Comité redactor del periódico “Democracia Obrera”