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Ecos del 1° de Mayo en el mundo…

 

 

ARGENTINA

En un país quebrado y estrangulado por el FMI, miseria y hambre para los trabajadores…

 

El 1° de mayo del FIT-U: un acto de campaña electoral

 

Ni internacionalista ni de lucha por la revolución socialista.

Muy lejos de unir y coordinar a la resistencia obrera.

 

El tsunami del crac mundial y el estrangulamiento de decenas de países endeudados por el FMI golpea a la Argentina, quebrada y azotada por la inflación y la miseria de los trabajadores. La clase obrera no ha podido responder a esta catástrofe debido a la traición de los carneros de la burocracia sindical, a pesar de haber dado duras luchas contra el gobierno en los últimos años.

 

Hoy, cuando la catástrofe económica y social ya está aquí, el FIT-U está lanzado a una carrera desenfrenada por los votos. Su acto del 1° de Mayo, lejos de mostrar un camino de lucha efectiva planteando la coordinación de los que luchan, se limitó a llamar a votar a sus candidatos, en medio de acusaciones cruzadas entre el PO y el PTS sobre quién es más servil al kirchnerismo.

Si el FIT-U hubiese querido, podría haber llamado a los obreros del SUTNA, choferes, portuarios de Terminal 5, la Unidad Piquetera, docentes, Coca-Cola de Salta, etc. a reunirse y poner en pie el 1° de mayo un comité de lucha nacional, un organismo para unificar los reclamos y coordinar las luchas de resistencia.

Inclusive estaban en el acto Crespo (SUTNA), Belliboni (Polo Obrero), Sobrero (UF-Haedo), Dellacarbonara (Subte), Del Plá (SUTEBA), Adaro (Ademys), etc., todos dirigentes sindicales del FIT-U. Pero el FIT-U no quiso hacerlo. El único llamado a la acción que hubo en el acto fue… votar y fortalecer al FIT-U.

 

Cuando Argentina se hunde como el Titanic, el FIT-U le dice a los obreros que no se puede hacer otra cosa que votar y luchar por mejorar nuestras condiciones de vida poco a poco, con pequeñas conquistas en los marcos de este sistema en bancarrota.

Una utopía. Los de arriba no solo no dan nada sino que vienen a sacarnos hasta la última de nuestras conquistas. Para defender nuestros derechos y arrancarles hasta la más mínima de nuestras reivindicaciones, hay que pelear por todo. Francia demuestra que para defender el derecho a una jubilación digna hay que echar al gobierno.

El FIT-U no llama a preparar un Argentinazo victorioso. Para ellos, la ruptura con el imperialismo y la expropiación de los capitalistas son cosa del futuro y no una necesidad urgente para salir del infierno actual.

¿La revolución? En el futuro, dijo Bregman, no hoy. Hablando de Francia y Perú, planteó que “esas movilizaciones que recorren el mundo, esas rebeliones se transformarán en revoluciones sociales (…) ¡el futuro será socialista o no será!”.¿Qué hacer hoy? “Dar batalla en las elecciones nacionales”.

El ejemplo de Francia es categórico. Allí las masas no abandonan las calles porque saben que no conseguirán nada mientras Macron siga en el poder, ¡pero el PTS dice que no hay condiciones para luchar por tirar al gobierno con el método de la revolución!

No llama la atención. Los partidos del FIT-U vienen de apoyar abiertamente o “desde afuera” a los Petro, Castillo, Lula, Boric, y cuanto burgués se postuló para desviar los combates revolucionarios en América Latina en los últimos años. En Brasil, el MST e IS están adentro del PSOL, que es parte del gobierno de Lula.

Se han abrazado a la política stalinista de apoyo al “mal menor”, al burgués “progresista”. ¡Por eso se ganaron el saludo y el apoyo del castrista Frank García Hernández y el grupo Comunistas de Cuba!

 

La tragedia es que mientras el gobierno peronista, junto al FMI y las 6 grandes cámaras patronales que ya hablan abiertamente de guerra al pueblo, hunden a millones en la miseria y la desesperación, el FIT-U llama a enfrentar la catástrofe capitalista con una boleta electoral.

Bregman lamenta que las clases medias desesperadas e inclusive los sectores más pauperizados de la clase obrera se vayan con el fascista Milei, que les habla el lenguaje de la crisis y vocifera llamando a quemar el Banco Central.

¡Lo que no dice Bregman es que esos miles terminan buscando por derecha una salida radical a su ruina porque el propio FIT-U, con su programa reformista, le ató las manos a la vanguardia obrera para reagrupar sus fuerzas contra la burocracia sindical y los partidos patronales, y mostrar una alternativa en las calles con paros y piquetes, luchando por un programa de salida a la crisis para esos miles sin esperanza que hoy se van detrás de Milei!

 

Por un congreso de obreros ocupados y desocupados para unir las filas contra el ataque de los de arriba

 

Hoy la clase obrera está desgarrada, bajo la bota de una burocracia sindical carnera, sirviente del FMI y la embajada yanqui, y un movimiento de desocupados que lleva a los desocupados a mendigar planes sociales.

Es de vida o muerte volver a unir a ocupados y desocupados como en 2001 para enfrentar la catástrofe a la que nos llevaron.

El Congreso o Encuentro del que hablan el PTS y el PO no es para poner de pie a la clase obrera. En 2020-2022 tuvieron la oportunidad de impulsar la coordinación de los miles de trabajadores que se autoconvocaban contra la burocracia sindical y rompían con el gobierno peronista, y no lo hicieron.

Lo que necesitamos es un Congreso de Trabajadores Ocupados y Desocupados, que llame a derrotar a la burocracia sindical en las calles y le libere las manos a la clase obrera para pelear.

¡Hay que retomar el camino de las asambleas, los piquetes y la huelga general, como hicimos en 2017, cuando le tomamos el palco a la CGT al grito de “¡Poné la fecha!” al paro! ¡Paso a la autoorganización de los trabajadores! ¡Fuera la burocracia sindical!

El primer paso es unir y coordinar las luchas moleculares, aisladas, como la de los choferes, docentes, el SUTNA, portuarios de Terminal 5, desocupados de la Unidad Piquetera, bajo un programa que levante las demandas de lo más explotado de nuestra clase, los desocupados, los precarizados, los obreros en negro:

Salario mínimo de $400 mil y la reducción de la jornada laboral para que todos entren a trabajar bajo convenio.

¡Fuera el FMI y todos los saqueadores y parásitos que oprimen la nación! ¡Queremos las tierras de la oligarquía para que coma el pueblo!

¡Comités de autodefensa de las organizaciones obreras contra la represión de la policía y gendarmería!

¡Absolución de Arakaki, Ruiz, Estela Juárez y los petroleros de Las Heras!

 

Ese congreso inclusive podrá elegir a mano alzada a los candidatos de los obreros combativos para estas elecciones. Una candidatura de Crespo con Daniel Ruiz (ex-delegado petrolero condenado, dirigente del PSTU) Angélica Lagunas (ATEN) o el “Pollo” Sobrero (UF-Haedo), o a compañeros condenados como Arakaki, los petroleros de Las Heras o la compañera docente condenada Estela Juárez. ¡Trabajador vote trabajador! Una campaña electoral agitando este programa para poner de pie a la clase obrera así mostraría una alternativa de clase a millones de trabajadores que hoy no encuentran ninguna salida a sus padecimientos.

Es urgente que el FIT-U termine con su política autoproclamatoria y ponga su personería al servicio de que los obreros elijan a sus candidatos.

Pero las elecciones no traerán salario ni trabajo. Esta trampa electoral en marcha, hecha a la medida del FMI y el gran capital, es para definir quién será el próximo mariscal de los explotadores, si el PJ o el PRO-UCR, en la guerra que nos han declarado.

Solo un Argentinazo triunfante abrirá paso a las demandas de la clase obrera. En 2001 echamos a De la Rúa. Hay que terminar de echarlos a todos. La clase obrera debe pesar en la vida política nacional, comenzando por romper con todos los partidos políticos de la burguesía, con esta democracia para ricos y con el gobierno peronista antiobrero, lacayo del imperialismo.

Hay que terminar con esta feroz dictadura del capital tutelada por un puñado de empresas imperialistas, el FMI, la oligarquía y la gran patronal desde el Hotel Llao Llao y la embajada yanqui.

Solo un gobierno obrero y popular apoyado en la movilización autoorganizada de las masas podrá conquistar el pan, el trabajo digno y la vivienda, para la amplia mayoría de los trabajadores y del pueblo pobre. ¡Que se vayan todos y no vuelva ni uno solo!

 

El FIT-U no puede dirigir este combate. Hace años rompió con todo legado de la IV Internacional. La clase obrera necesita un partido leninista de combate, el partido de Mateo Fossa y León Trotsky, que sepa luchar en la resistencia y pelee por poner en pie una fracción internacionalista de la clase obrera bajo el programa y la estrategia de la IV internacional de 1938. Por eso te llamamos a organizarte con los trotskistas de la LOI-CI/Democracia Obrera para dar esta pelea juntos.

 

¡Argentina será socialista o colonia de Wall Street!

 

 

 

 


Candidatos del FIT-U


Massa en la sede del FMI en Estados Unidos


La burocracia de la CGT en la embajada norteamericana


Acto del FIT-U por el 1° de Mayo

 


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