Períodicos Democracia Obrera
El Organizador Obrero Internacional

VISITE TAMBIÉN
LA PÁGINA DE LA FLTI

WWW.FLTI-CI.ORG

volantes
Suplementos DO
English
Portugués


Francia
-1 de mayo de2019

En el día internacional de los trabajadores, París nuevamente en llamas
Enorme jornada de acción y combate en las calles con la unidad de las filas de los trabajadores


Los Chalecos Amarillos, los trabajadores sindicalizados, los desocupados, los inmigrantes, la juventud y todas las masas en lucha impusieron un combate unificado, a pesar y en contra de la burocracia sindical
Este 1ro de Mayo, centenares de miles de trabajadores se manifestaron en toda Francia en las más de 200 marchas que se realizaron a lo largo y ancho del país. Varios miles de manifestantes se hicieron presentes en las acciones de ciudades como Lyon, Tolosa, Burdeos, Estrasburgo y particularmente en París donde se contaron por varias decenas de miles.
Allí, en la capital, confluyeron grandes columnas de los sectores en lucha, en particular los Chalecos Amarillos que hace más de cinco meses están peleando contra el gobierno de Macron. También marcharon los trabajadores industriales y estatales que forman parte de los sindicatos- y que vienen, desde las bases, pujando por la unidad con la lucha encabezada por los Chalecos Amarillos-, los jóvenes combativos identificados como el “black bloc”, sectores de inmigrantes sin papeles e incluso trabajadores sudaneses que llevaron a la marcha sus demandas contra el régimen militar de Sudan. Se dio así una gran marcha unitaria conquistada desde abajo contra la política antiobrera del gobierno y la patronal y por mejores condiciones de vida.
Esta marcha de París se enfrentó a una brutal represión de las fuerzas represivas que, con un operativo de 7400 policías, previo a la marcha efectuaron registros de bolsos y efectos personales a unas 15 mil personas y luego no escatimaron en gases lacrimógenos, garrotazos, carros hidrantes, balas de goma. Una verdadera batalla campal se desató cerca de la Torre Montparnasse, al inicio la movilización, y luego también hacia el final en la Plaza Italia, donde los manifestantes, con los black bloc a la cabeza, respondían a la represión devolviendo las granadas de gas, con proyectiles improvisados y con intentos de barricadas. La juventud que no tiene futuro, que es masacrada y perseguida en los barrios, oprimida, súper explotada en los peores trabajos precarizados y a la que le niegan el ingreso a la universidad con las nuevas reformas educativas, expresó su odio a este régimen prendiendo fuego autos y motos, atacando vidrieras de negocios y enfrentando a los perros de presa del estado. Cuando estaban cara a cara con la policía, los jóvenes junto a los Chalecos Amarillos gritaban “¡todo el mundo detesta a la policía!” y también “¡Revolución!”.
Al finalizar la jornada se contaban casi 400 arrestos en todo el país de los cuales 330 fueron en Paris, donde 220 quedaron a disposición de la justicia.
El terrible combate librado en las calles parisinas muestra que los explotados y las masas populares de Francia repudian las medidas anunciadas por Macron en respuesta a la lucha de los Chalecos, que bien puede considerarse una burla. Es que luego de haber incendiado toda Francia, con acciones en las calles y jornadas revolucionarias que tuvieron al poder colgado de un pincel y de mantener la lucha por más de 5 meses, la respuesta que reciben es una baja de impuestos, la indexación de las jubilaciones mínimas según la inflación y una promesa de mejora en los servicios públicos… eso sí, con menos personal y menor presupuesto. Y por supuesto que para sostener esto Macron aclaró que habrá que trabajar más y por más tiempo. Un insulto reforzado por el hecho de que no restableció el impuesto a la fortuna que suprimió poco después de asumir la presidencia. Así es que los Chalecos volvieron a salir a las calles el sábado pasado y este primero de mayo llenos de odio.
Desde noviembre, las masas pelearon por tirar a Macron y lograron ponerlo contra las cuerdas. Si hoy sigue en el poder es porque lo salvó la dirección de las centrales sindicales, en particular Martínez y su CGT que carnerearon la lucha de los chalecos amarillos y la unidad de las filas obreras que era pedida a gritos por la base que clamaba por una Huelga General. Los dirigentes sindicales llamaron en un principio a no apoyar esta lucha y luego, cuando su base se sumaba por su cuenta a las barricadas, manifestaciones y reuniones de los Chalecos Amarillos tomando el grito de “Macron dimisión”, llamaron a marchas paralelas, de presión sobre el gobierno, exigiendo “justicia fiscal”. Y en la marcha del sábado pasado donde chalecos amarillos enfrentaron las “medidas” de Macron codo a codo con trabajadores de base de los sindicatos, los dirigentes brillaron por su ausencia y silencio. La bronca contra semejante puñalada por la espalda se expresó en la marcha de hoy en Paris, cuando un sector de la manifestación increpó a Martínez y a fuerza de botellazos lo echaron de la columna por un momento.
La izquierda como el NPA que con su programa de “una lucha prolongada contra la supresión de puestos y la precarización en el servicio público” y los estatales, y con su llamado a extender el combate y estar “todos juntos en la acción” propone una política de presión sobre el gobierno y sus instituciones y de claro sostén de la burocracia sindical.
En un ángulo de 180 grados las masas en las calles impusieron la unidad de las filas y el inicio de una tarea pendiente entre los trabajadores de Francia: la revolución política al interior de las organizaciones obreras. ¡Viva la rebelión contra la burocracia!
La marcha y los combates en las calles del 1ro de mayo fueron un gran paso adelante. ¡Ese es el camino a seguir! Demuestran que sigue habiendo condiciones para organizar un combate unificado para derrotar a Macron. Y para eso ¡hay que recuperar los sindicatos echando de ellos a los carneros de la dirección! Está claro que la burocracia está perdiendo el control del movimiento obrero. Ahora hay que conquistar los organismos de autodeterminación y los comités de fábrica para organizar una Huelga General Revolucionaria hasta tirar al gobierno y descalabrar el régimen infame de la Vta República.
Como gritan las masas de Argelia y Sudan en sus países y al interior mismo de Francia: ¡el pueblo quiere la caída del régimen! A uno y otro lado del Mediterráneo se enfrenta al imperialismo francés. Las masas obreras buscan la unidad. Sus direcciones las separan. Sobran condiciones para derrotar al imperialismo francés y a sus lacayos del África negra. En Francia hay que retomar el grito de ¡el enemigo está en casa! Por una lucha unificada con las masas insurrectas de Argelia y Sudán! ¡Una misma lucha, un mismo enemigo: el imperialismo y sus transnacionales que saquean las semicolonias y súper explotan a la clase obrera!
¡Por Comités de autodefensa contra la represión y comités de Chalecos Amarillos, estudiantes, jubilados, inmigrantes, refugiados, estatales en lucha, trabajadores ocupados y desocupados, que se coordinen a nivel nacional para organizar una lucha decisiva! Es hora de echar ya mismo a la burocracia sindical y avanzar en tirar abajo a Macron y a la Vta República.

Corresponsal

contactenos