Francia- 30 de diciembre de 2018

Si Macron aún no cayó es porque lo salvaron
Hay que derrotar a la burocracia sindical
Por una huelga general revolucionaria que haga realidad el grito de las barricadas:
¡Abajo Macron! 

El 22 y el 29 de diciembre nuevamente los chalecos amarillos, con barricadas, bloqueos de ruta, piquetes y con duros enfrentamientos con la policía, ganaron las calles de toda Francia en su protesta VI y VII. Allí los trabajadores, empleados, jubilados, los desocupados, los jóvenes de la cités, los precarizados, los pequeños productores siguen combatiendo a pesar de la vil estafa de los anuncios del gobierno y de la gran traición de las direcciones de los sindicatos, que carnerearon la huelga general y pactaron con el gobierno y la gran patronal. Pese a las trampas del gobierno, apoyadas por la Nueva Izquierda y por “los anticapitalistas” de querer desviar la lucha a un debate sobre la posibilidad de realizar un referéndum; pese a las fiestas y al frío intenso… las masas arruinadas, la clase media pauperizada continúan combatiendo. Se siguen encontrando y organizando en las barricadas, en las calles, en las rutas, en los peajes.
Si bien redujeron su número en general y en particular en París, toda su rabia se hizo sentir en las ciudades del interior donde apuntaron a los centros del poder, bloquearon refinerías, establecimientos, edificios del gobierno, bancos e incluso quemaron las puertas de uno de ellos. Es que se niegan a abandonar la lucha que llevan adelante desde hace un mes y medio ya que aún no consiguieron lo central de su demanda: la cabeza de Macron, por ello la llama de sus combates continúa encendida.

La traición de la burocracia sindical

A principio de mes, las jornadas revolucionarias de los chalecos amarillos pusieron al gobierno contra las cuerdas. Macron quedó colgado de un hilo.  El gobierno, las centrales sindicales, los partidos reformistas, habían perdido el control de la situación. Las masas ganaron las calles superando a esas direcciones.

Es que las masas peleaban y pelean por tirar a Macron, porque reconocen que esta es la única vía para conquistar sus demandas. Si este no cayó y hoy puede, por ahora, secar su frente fue porque las direcciones traidoras de la CGT y demás sindicatos lo sostuvieron y lo vienen salvando. Durante semanas hicieron malabares para dividir las filas de los explotados y evitar llamar a una Huelga General con la que la clase obrera puede intervenir de manera decisiva, poniendo en cuestión quién es el verdadero dueño de la casa.
En el momento más álgido de la lucha, esta burocracia rompehuelgas sacó un comunicado pidiendo al gobierno una mesa de diálogo para sentarse a negociar. Y el gobierno la escuchó y el 10 de diciembre se sentaron con la gran patronal para poner en marcha la estafa de las “concesiones” del gobierno, que no es más que la postergación del aumento del combustible (ya que lo impondrán nuevamente si logran sacar a las masas de las calles) y un aumento del salario mínimo que lo pagarán los propios trabajadores con sus impuestos. Así la burocracia se puso como garante de ese pacto infame que pergeñó el gobierno para no caer.
Hicieron de todo para impedir la caída de Macron a manos de una acción directa de las masas, lo que abriría una verdadera crisis de poder en las alturas descalabrando al régimen de la Vta República, como sucedió en el ‘68. Fueron y son el gran sostén del gobierno.

Los intentos de desvíos “democratizantes” apoyados por la Nueva Izquierda y los “anticapitalistas”

Pero las testarudas masas, siguen luchando: la estafa de los anuncios de Macron no logra engañarlas y la burocracia sindical no consigue retomar el control y desmontar del todo esta enorme lucha política de masas.
Frente a esto, el gobierno montó una nueva trampa abriendo la posibilidad de instalar un “gran debate nacional” alrededor de la implementación de un Referéndum de Iniciativa Ciudadana (RIC), para “responder” a las reivindicaciones de los chalecos amarillos. Debate que fue aplazado hasta mediados de enero y se extendería hasta el mes de marzo. Donde recién se votaría si es viable y legítimo realizar un referéndum… ¡vaya uno a saber cuándo! Este nuevo dispositivo para desviar el combate de las masas es apoyado por Melenchon y su Francia Insumisa. Al mismo tiempo, el PS propone reinstalar el Referéndum de Iniciativa Compartida sobre el Impuesto solidario a las fortunas (ISF) que fue suprimido por Macron al llegar al gobierno. Mientras, la izquierda anticapitalista impulsa variantes constitucionales para “democratizar” a este infame régimen de la V República como juntar en una Asamblea Unificada los poderes ejecutivo y legislativo.

Un sector de los chalecos amarillos, engañado por esta trampa, ve con expectativas este tipo de referéndum y lo mantiene como una reivindicación más, por ello vemos en sus banderas la demanda de un RIC. Pero hay que decir la verdad: nada se podrá conquistar dentro de este régimen de la V República, pues no tiene nada para dar y mucho menos más “democracia”,  tiene solo miseria, hambre, más deterioro de las condiciones de vida  y represión. Ni con el RIC, ni unificando los poderes legislativo y ejecutivo, ni con distintos referéndums las masas arruinadas resolverán efectivamente todas sus demandas.

Todas las direcciones reformistas, la Nueva Izquierda, los “anticapitalistas” engañan a las masas en lucha con el verso de “más democracia” diciéndoles que democratizando al régimen se terminan sus penurias. Quieren así desviar las enormes jornadas revolucionarias porque son enemigos de que Macron caiga a manos de las masas. Es que se han juramentado nunca más una Comuna en París, una revolución obrera en Europa. Todos “luchan” por democratizar la Europa imperialista de Maastricht.

Las masas continúan el combate
Es hora de imponer la Huelga General Revolucionaria

Las últimas jornadas de lucha y los llamados a ganar las calles el 31/12 y a retomar en enero con más fuerza demuestran que, lejos de rendirse, los explotados se mantienen firmes.
No hay tiempo que perder. Hay que expulsar a los burócratas rompehuelgas de los sindicados, echarlos a patadas de los organismos de lucha de las masas oprimidas, ellos son los que le atan las manos a la clase obrera. ¡FUERA LA BUROCRACIA DE LA CGT Y DEMAS CENTRALES SINDICALES!
Hay que poner en pie los comités de fábrica y desarrollar los verdaderos organismos de autodeterminación con los comités de chalecos amarillos, de desocupados, de estudiantes, de la juventud superexplotada de la cités, de inmigrantes y los piquetes de combate de las barricadas, que se coordinen y centralicen a nivel nacional y pongan en pie comités de autodefensa y la milicia obrera. Esa es la manera que se podrá imponer una huelga general revolucionaria hasta que caiga el gobierno y así asestarle un golpe certero a este régimen.

HAY QUE RETOMAR EL CAMINO A UN MAYO DEL ’68 Y HACER REALIDAD EL GRITO DE LAS MASAS ARRUINADAS EN SUS BARRICADAS: ¡MACRON DIMISIÓN!

¡Basta de perseguir a los que luchan! Arranquemos de las cárceles de la V república a todos los presos de estas jornadas. Desprocesamiento de los luchadores obreros y populares. ¡Libertad a George Abdallah preso hace 35 años por defender la causa palestina!

Hoy vienen en ayuda de los trabajadores franceses los explotados de Túnez que se levantan contra las terribles condiciones de vida, los metalúrgicos de Irán, los sublevados de Sudan que llevan ya días de enormes revueltas.
¡Hay que pelear por sobre las fronteras! ¡Un mismo enemigo, una misma lucha!
¡Un mismo combate junto a los trabajadores de las colonias y semicolonias que las transnacionales francesas súper explotan, oprimen y saquean!
En Europa, los trabajadores de Hungría salen a pelear contra la reforma laboral, los trabajadores de Portugal entran en lucha, los chalecos amarillos de Bélgica y Alemania dicen presente junto a los independentistas catalanes. ¡Por la unidad de los trabajadores de toda Europa! ¡Abajo Maastricht!

Hay que poner en pie el poder de los abajo. ¡Paso a la Comuna de obreros, campesinos y del pueblo pobre!

Luisa Campos y Ana Negri