Volver al índice DO 16 Miles de compañeros se hicieron presentes por Maxi y Darío Hablamos con Nestor Gomez, dirigente del FUBADE General Mosconi y Tartagal

 

26 de junio: a 4 años de la masacre de Puente Pueyrredón
Miles de compañeros se hicieron presentes por Maxi y Darío
pero no encontraron lo que buscaban

El 26 de junio pasado se cumplió un nuevo aniversario de la masacre de Avellaneda donde cayeron asesinados Kosteki y Santillán. Alrededor de 8000 compañeros dijeron ¡presentes! y cortaron el Puente Pueyrredón, buscando un camino de lucha para la solución de sus demandas y el castigo a los asesinos de Maxi y Darío.
Mientras leían el documento y pasaban los minutos, los compañeros sentían que se estaban por ir con las manos vacías: nada se decía de retomar la lucha de Santillán y Kosteki por trabajo para todos, nada de unirnos ocupados y desocupados en una misma lucha para liberar a nuestros compañeros presos de Las Heras... Y luego de un día de mucho frío y largos discursos conmemorativos, miles de desocupados volvieron con sus manos vacías y las caras largas, de nuevo a sus casas.
Era de esperar: de la burocracia piquetera que quiere que los desocupados sigan peleando por la migaja de los planes y bolsones, ¡no puede salir ningún plan de lucha!
Menos que menos se puede esperar algo favorable a los desocupados de parte de las organizaciones de la izquierda refomista que el último 24 de Marzo le entregaron a Kirchner la bandera de la lucha por el castigo a los genocidas de ayer y de hoy, llevando a los trabajadores a marchar y compartir el acto en Plaza de Mayo con la juventud peronista, la burocracia piquetera kirchnerista de la FTV y los castristas de Barrios de Pie.
Y el 26 de junio fue la continuidad de la política de colaboración de clases que tuvieron el 24 de marzo. Porque si el 24 le entregaron la bandera de la lucha contra el genocidio a Kirchner, este 26 de junio fomentaron que los desocupados creyeran que presionando a la justicia vamos a conseguir encarcelar a los asesinos de Maxi y Darío. Pero... ¡si es la misma justicia que mantiene encarcelados a los compañeros de Las Heras, que tiene más de 4500 procesados, que ordena represiones como en Cargo-Renault!
Sabemos que los compañeros no se tragan este verso, porque saben que esta justicia solo favorece a los patrones y nunca a los trabajadores. Y tienen razón. La única que hará justicia será la clase obrera, con su lucha en las calles, con la huelga general y los piquetes; sacando a todos los jueces patronales e imponiendo Tribunales Obreros y Populares que castiguen a los represores y asesinos de los trabajadores y el pueblo!

¡Pongamos de pie nuevamente al movimiento piquetero revolucionario!

De los casi 2 y medio millones de planes que había en el 2002, hoy quedan sólo un 1.300.000. ¡Ese es el resultado de la política de transformar al poderoso movimiento piquetero revolucionario, que luchaba por trabajo para todos atacando la propiedad de los capitalistas, en un movimiento de presión por las migajas de planes y bolsones! Es el resultado de liquidar la democracia obrera al interior de las organizaciones piqueteras, y de convertirlas en una red de contención social; de negarse a unir a los trabajadores desocupados y ocupados convocando a la Tercer Asamblea nacional piquetera. El resultado es que los desocupados que consiguieron trabajo son obligados a trabajar como esclavos por un salario miserable, y los que no, deben seguir sobreviviendo con los miserables $150 de un plan y muchos, ni siquiera eso, porque les dan de baja o les quitan el bolsón cuando se niegan a marchar. Casi todos los movimientos de desocupados han establecido las “bajas por altas”: es decir, le sacan el plan al trabajador que no va a las movilizaciones que los dirigentes deciden, y se lo dan a otro al que tienen marchando durante meses. ¡El plan y el bolsón son del trabajador desocupado que se los ganó peleando en la ruta y en las calles, y no de las direcciones de los movimientos ni de las corrientes de izquierda que los dirigen!
Por eso compañero, usted que se fue decepcionado de los movimientos que ayudó a construir, cansado de tanto manoseo, y de tanta burocracia, y para no perder el plan, tuvo que ir con otros movimientos que resultaron tan burocráticos como ese del que se fue; usted que quiere levantar las banderas de Maxi y Darío y pelear por trabajo para todos; que durante años luchó por trabajo genuino poniendo el cuero en las rutas, enfrentando la represión de la policía y la gendarmería; usted que dijo ¡presente! cada vez que se lo llamó a luchar, usted y todos los compañeros ¡no se merecen las direcciones burocráticas que tienen a su frente y que los han convertido en mendigos de planes y bolsones!
A ustedes, compañeros que no quieren envejecer cortando rutas, los llamamos a pelear juntos por volver a poner en pie un movimiento piquetero revolucionario, que retome el camino de los 21 puntos del Norte de Salta y las Tesis de Pulacayo de los heroicos mineros bolivianos; que pelee por la democracia obrera; por la independencia de las organizaciones obreras respecto del estado; por echar a patadas a los traidores de las filas del movimiento obrero; por trabajo genuino; y por conquistar una Tercera Asamblea nacional piquetera, verdaderamente democrática, con delegados votados por asambleas de base de ocupados y desocupados, para dejar de pelear divididos.
Los revolucionarios de Democracia Obrera, que estuvimos junto a los piqueteros del Norte de Salta cuando votaban su gran programa obrero de 21 puntos y cuando resistieron los ataques de la gendarmería asesina; que fuimos parte del FTC mientras era un agrupamiento combativo y junto a ellos y a Brukman marchamos a la CTA para pedir un paro por la libertad de los compañeros de Salta; que fuimos echados de la Asamblea piquetera de febrero de 2002 por decir que se estaba gestando una nueva burocracia piquetera; nosotros, compañeros queremos pelear junto a ustedes para retomar el camino de Cutral-Có, Mosconi y el castigo a todos los responsables del asesinato de Kosteki y Santillán. ¡Hagámoslo juntos!

Severino Chúcaro

Hablamos con Néstor Gómez, dirigente del FUBADE
“Que las organizaciones a nivel nacional convoquen a una Tercera Asamblea
Piquetera donde todos los delegados de base vayamos a discutir”

DO: Ustedes fueron el 26 de junio al acto en Puente Pueyrredón, al cumplirse cuatro años del asesinato de Santillán y Kostequi, pero ¿adhirieron al documento de convocatoria?
NG: No adherimos al documento de convocatoria, como tampoco lo hicimos en ninguno de los actos que se hicieron en el Puente. Sí estuvimos: fuimos al puente con una posición política para llevarles a las otras organizaciones que estuvieron, llamando a convocar a una Tercera Asamblea Nacional Piquetera para volver a salir a luchar todos en conjunto, para derrocar el doble discurso de Kirchner. Pero no adherimos al documento porque no coincidimos. Por ejemplo, hace 20 o 30 días, ya había organizaciones que estuvieron ahí en el puente y que tuvieron reuniones con los funcionarios en el ministerio para pedirles permiso para cortar el puente. Nosotros, como organización de lucha, nunca vamos a pedir permiso para cortar tal o cual ruta. Nosotros estamos en un plan de lucha en el municipio de Moreno; hemos anunciado cortes en la próxima semana y no hemos ido a pedirle a los funcionarios que nos permitan cortar la ruta: salimos, vamos y la cortamos. Por lo tanto, con la cantidad de gente que había en el Puente Pueyrredón el 26 de junio, podríamos haber cortado igual.
Para nosotros, el corte del Puente fue negativo, porque se convocó con las mismas organizaciones que adhirieron al 24 de marzo. ¿Qué significa?: el 24 de marzo todos fueron a la Plaza de Mayo, y las bases respondieron el 1º de mayo vaciando el acto de conmemoración del día del trabajador. Según los cálculos que hicimos, el 1º no pasaron de 7000 personas en Plaza de Mayo. Fue desastroso.

DO: Cuando decís “todos fueron el 24 de marzo”, ¿a quiénes te referís?
NG: Cuando digo “todos”, digo que el 24 de marzo estaban la FTV, Barrios de Pie, estaba el PO, el MST, el PTS, etc., es decir, todas las organizaciones de izquierda, junto a todas las organizaciones kirchneristas conmemorando el 24 de marzo.

DO: Y para ustedes, ¿qué significado tiene eso?
NG: Para nosotros, que el 24 de marzo se haya hecho un acto en común con todas estas organizaciones refleja que la izquierda argentina es la pata que le faltaba al sistema para frenar la lucha que se empezó a generar en 1995. Ahora se encaminan todos a las elecciones, en vez de elegir el camino de la lucha, el aumento de salario. Cuando pasamos hoy frente al Hospital de Moreno, salieron los compañeros del hospital a denunciar que han cerrado dos salas de neonatología, que están privatizando rayos X, que están privatizando casi toda la salud, y no se sale a unificar la lucha para que esto no siga sucediendo y que la salud pública no se privatice. Están logrando privatizarla porque no se sale a coordinar con todas las organizaciones del campo popular.
Hay que unirnos y salir a luchar. Por eso decimos siempre que las organizaciones a nivel nacional convoquen a una Tercera asamblea piquetera donde todos los delegados de base vayamos a discutir. El problema es que las grandes organizaciones tienen miedo de que sus bases se “contaminen” en la lucha. Sus dirigentes no quieren luchar. Por lo tanto, eligen el camino burocrático de que sólo sus dirigentes a nivel nacional discutan en los ministerios, discutan en los municipios, cerrándoles el camino a los compañeros luchadores de los barrios, de las asambleas barriales, a los compañeros luchadores de las pequeñas fábricas que se levantan contra los patrones.

DO: ¿Ustedes creen que hay condiciones para luchar por trabajo genuino?
NG: Nosotros creemos que sí, que hay unas condiciones terribles en este momento. Según el gobierno, hubo un crecimiento del superávit fiscal; hoy mismo los funcionarios del municipio de Moreno reconocían que hubo crecimiento pero que no se está repartiendo la torta. Por lo tanto, la torta se tiene repartir, se tienen que bajar las horas de trabajo a los compañeros que están siendo explotados, y con el simple hecho de bajar las horas de trabajo se implementarían cientos de miles de puestos de trabajo, empezaría a bajar la desocupación. Que ganen menos los patrones y se reparta la ganancia que tienen.

DO: En el plenario del FUBADE que ustedes hicieron, votaron el programa de los 21 puntos de los piqueteros del Norte de Salta, y las Tesis de Pulacayo de la clase obrera boliviana ¿Ustedes creen que tienen vigencia hoy en día?
NG: Sí; nosotros creemos que este es el momento de empezar a discutir los 21 puntos de Salta y las Tesis de Pulacayo, que es el momento justo para que, a través de las asambleas, los compañeros vayan eligiendo el camino de la lucha, y no a través de mesas burocráticas de dirigentes de diferentes sectores que deciden qué día salís a pelear. Las decisiones tienen que ser de las bases, y los dirigentes tienen que ser removibles en cualquier momento, y no tener que esperar uno o dos años a que lleguen los respectivos congresos. Por eso reivindicamos el programa de los 21 puntos de los piqueteros del norte de Salta.


General Mosconi y Tartagal

Mientras Kirchner y los políticos patronales lanzan sus campañas
electorales anunciando “inversiones millonarias”

Hambre, miseria, superexplotación y desocupación para los trabajadores y sus familias

Pasan los meses, y la situación sigue siendo desesperante en el Departamento General San Martín, en el Norte de Salta, después de que las lluvias y la crecida tiraron abajo los puentes carreteros y las casas de los compañeros desocupados y trabajadores en Tartagal. Seguimos aislados del resto del país; no hay mercaderías y las que hay son carísimas. Hay enfermos de dengue, diarrea, vómitos.
Pasan los meses y sigue el verso de que vienen las “inversiones” para reconstruir el puente... pero nunca llegan. Ahora que han largado las campañas para las elecciones de 2007, vuelven los políticos patronales con sus promesas. El primero, el propio Kirchner, al que le están preparando la venida a Tartagal y Mosconi, salió a decir que el Departamento necesita una “reparación histórica”, y anunció un supuesto plan de obras públicas del gobierno nacional por 140 millones de pesos, que tendría como objetivo reparar puentes, repavimentación de rutas, cloacas, red de gas natural, aeropuerto, etc.
Por supuesto que nada de esto será al servicio de los explotados. Lo que van a hacer Kirchner y el gobierno asesino de Romero, es garantizarles a los monopolios petroleros como la Repsol, la Tecpetrol, etc., la infraestructura para que puedan seguir robándose nuestro petróleo, y también saqueando el gas de nuestros hermanos, los obreros y campesinos bolivianos, ahora que Kirchner, mandado por sus jefes de la Repsol, arregló los precios del gas con su amigo Evo Morales.
De todos estos anuncios, ninguna obra tiene fecha de comienzo. Lo que ya empezaron son las licitaciones y los negociados por parte de los políticos patronales y los esclavistas de las PyMES de la zona que se frotan las manos por las ganancias que van a hacer, sobre todo sabiendo que van a poder superexplotar mano de obra baratísima teniendo a su disposición los listados de las bolsas de trabajo que están en manos de cada municipio.
Mientras tanto, los trabajadores y nuestras familias seguimos sufriendo el aislamiento, las penurias, la falta de trabajo y cuando tenemos la “suerte” de conseguirlo, las condiciones de esclavitud y los salarios de miseria. 
Así, si entramos a trabajar en alguna de las empresas prestadoras de servicios a los grandes monopolios petroleros, es solamente por uno a tres meses. Después, a la calle otra vez. Los que trabajamos en las cooperativas sufrimos permanentemente la irregularidad de los pagos, y encima de salarios que van desde los $ 300 a los $ 750, que no alcanzan para nada. Este mes, para poder cobrar, nos vimos obligados a cortar la ruta, donde como siempre, fuimos amenazados por la gendarmería de ser desalojados por la fuerza y llevados presos.
Tenemos que retomar el camino del 2000 y el 2001, cuando conquistamos nuestro programa obrero de los 21 puntos, el camino de la lucha por trabajo genuino para todos con tercer turno en todas las empresas y el reparto de las horas de trabajo sin bajar el salario; por un plan de obras públicas bajo control de las organizaciones obreras, por que las bolsas de trabajo sean administradas por las asambleas; por que la plata de las ganancias de las petroleras quede toda en la provincia y en las casas de las familias obreras con la renacionalización sin pago y bajo control obrero de Repsol YPF y demás pulpos imperialistas
Y para eso, también tenemos que volver a poner en pie nuestras organizaciones de lucha, independientes del gobierno nacional y provincial y de todos sus agentes, que funcionen en  base a asambleas, con la más amplia democracia obrera, y volver a levantar la bandera de la una  Tercera Asamblea Piquetera Nacional con delegados con mandato de todo el movimiento obrero, para unir nuestras filas y dejar de pelear divididos, para volver a poner en pie un movimiento piquetero verdaderamente revolucionario.

Piqueteros revolucionarios del Norte de Salta